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*Horas después*

Narra Wendy

Después de haber pensado bien sobre ir o no mañana al banco, decidí que si lo haré no por mi, sino por Ray, tal vez así él pueda comprender que yo no soy una mala persona.

Iba tranquila caminando hacia el gran salón de la academia ya que ahí estaban los chicos con los niños tocando sus instrumentos, al llegar antes de hablar con los chicos sobre las firmas pude ver en el grupo de los pequeños, una niña y un niño tocando su instrumento y también ayudándose mutuamente, eso inmediatamente me hizo recordar la vez en la que Ray y yo estábamos en el campo de softball practicando.

*Flashback*

Estaba con Ray en el campo de softball practicando un rato mientras esperábamos al equipo para que así él pudiese entrenar con ellos.

Yo realmente no sé jugar softball pero Ray se ofreció a enseñarme como jugar así que veremos cómo me va en esto.

Raymond: bien, ahora que estás en la posición para batear, debes tener fija tu mirada en el que va a lanzar la pelota ¿si?. Dice feliz.
Wendy: pero Ray, tengo miedo ¿y si me lastimo. Digo asustada.
Raymond: hey tranquila. Toma mi cara entre sus manos.- lo harás bien, yo creo en ti mi angelito. Besa mi cabeza.- yo estaré en el otro lado del campo y te lanzaré la pelota, tú sólo está atenta ¿si?. Sonríe.
Wendy: si. Asiento.

Él besó mi cabeza por última vez y después se fue al otro lado del campo, tomó el guante y después una pelota que estaba en el suelo, me miró y después se posicionó para lanzar la pelota, lo miré asustada por un momento mientras sostenía el bate nerviosa.

Raymond: ¿lista?. Dice serio.

Yo tan sólo asentí pero después él lanzó la pelota con todas sus fuerzas, retome mi postura y miré como la pelota se acercaba rápidamente pero en eso la batee con todas mis fuerzas y salió disparada hasta salir del campo.

Ray me miró sorprendido para después abrazarme mientras yo seguía en shock en lo que acabo de hacer.

*Fin Flashback*

Una pequeña lágrima cayó por mi mejilla al ver a esos niños y recordar ese día, esto realmente no es fácil ya que Ray siempre a sido una persona especial para mi y verlo con otra mujer y creer que yo soy una mala persona me está lastimado mucho.

En eso sonó el timbre para que los niños fueran al recreo así que los chicos les dijeron que podían ir a jugar ellos inmediatamente fueron al pateo de juegos que está en la parte trasera.

Los niños que había visto antes fueron felices a jugar como sin fuesen mejores amigos, así como lo éramos Ray y yo.

Quité ese pensamiento de mi mente y después fui con los chicos para que así me dieran sus firmas para el día de mañana.





El Error De Haberme EnamoradoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora