El Error De Haberme Enamorado

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Narra Raymond

Seguía arreglando mi traje mientras me miraba atento al espejo, escuché que abrieron la puerta lentamente y pensé que era uno de los chicos pero en eso voltee a ver y mi sonrisa por el día de mi boda se borró al instante.

Raymond: ¿qué haces aquí?. Digo serio.
Wendy: Ray, se que no quieres verme ni hablar conmigo pero realmente necesito esto. Se acerca a mi mientras me mira triste.
Raymond: déjame decirte que solamente pierdes tu tiempo, además por tu culpa mi familia no vendrá a mi boda. Digo molesto.- ¿sabes lo qué se siente que tu familia te abandoné en un día tan especial?, pero que cabeza la mía. Me río.- si hablamos de abandonar en días especiales tu eres una experta. Cruzo los brazos molesto.
Wendy: Ray debes que entender que yo no quise dejarte plantado ese día pero ocurrió algo que realmente me obligó a hacerlo. Dice triste.
Raymond: a ver dime ¿qué fue eso que pasó hace 13 años?. La miro serio y ella baja la mirada.- ya ves ni tu misma te crees tus mentiras estúpidas y aún así ¿quieres que te perdone?. Digo molesto.
Wendy: pero Ray la causante de ese acontecimiento fue Samantha...
Raymond: ahora vas a involucrar a Samantha en tus estupideces, por favor Wendy ya no mal gastes palabras culpando a otras personas. Rodeo los ojos.
Wendy: pero sino no estoy culpando a otras personas, te estoy diciendo la verdad y por eso te suplico que no te  cases con ella ¡no lo hagas!. Dice casi llorando.
Raymond: demasiado tarde para eso Wendy, en pocos minutos estaré en frente de ese altar esperando a la mujer que será mi esposa así que te voy a pedir que ni se te ocurra decir algo u oponerte a la boda porque sino te las verás conmigo, que seamos socios no significa que vengas a arruinar el día más importante de mi vida pero si sigues así voy a retirar ese contrato y todo volverá como un principio, solamente como dos desconocidos. La miro serio.
Wendy: ¿y amigos? ¿acaso no podemos ser amigos como antes?. Dice llorando.
Raymond: lamentablemente no, yo ya tengo a mi amiga, la cual será mi esposa próximamente así que yo no te necesito.
Wendy: entonces esa será tu última decisión por lo que veo...
Raymond: si, esta será la última decisión que tomo en relación a ti, desde mañana seré un hombre casado y así toda la relación que nos una acabará, tú debes conseguir a alguien porque a mi me perdiste y para siempre.
Wendy: entiendo. Dice triste.- entonces si es así. Mira su mano y quita su pulsera.- ¿reconoces esta pulsera?.

Ella me mostró la pulsera y era obvio que si la reconocía, recuerdo muy bien que ahorre mucho dinero para comprarla y dársela a ella, pero por culpa de esas mariposas no pude aunque me sorprende mucho que la lleve puesta.

Wendy: Coral me dijo que la habías comprado para mi y ahora veo que si fuiste tú. Voltea la pulsera.- la letra R está grabada al reverso y nunca me había dado cuenta pero ahora es mejor que se la des a alguien más, como a Samantha. Me la entrega.- se ve que la amas mucho y bueno es algo que yo no puedo cambiar. Sonríe mientras llora.- espero que ella pueda darte todo lo que yo no pude y que todo salga bien en su matrimonio de ahora en adelante. Me mira triste.

Ella me miro y en realidad me destrozó el corazón verla así, en eso ella se acercó a mi lentamente y nuestras miradas se cruzaron, luego de eso me besó de sorpresa.

Iba a separarla pero mejor decidí tomarla de la cintura y apegarla más a mi y seguirle el beso, nuestro beso era tímido pero podía sentirse el amor que emergía en el. Al final nos separamos por falta de aire y ella se quedó tranquila en mi pecho y en eso le abrazó.

Wendy: digan lo que digan yo siempre te amaré, no me importa quien esté a tu lado Ray, yo siempre estaré enamorada de ti. Dice triste.

Ella se separó y se alejó hasta la puerta, en eso nos miramos nuevamente y sonrió falsamente.

Wendy: te deseo lo mejor en tu nueva vida con ella. Dice llorando.

En eso ella se salió llorando de la habitación y me dejó ahí triste y confundido, ¿porqué cuando me besó sentí ese amor incondicional? es como si aún la amara bueno, si la amo un poco pero ahora estoy demasiado confundido y bueno creo que es demasiado tarde para arrepentirse porque en pocos minutos estaré con Samantha oficialmente.

Miré la pulsera y sentí una pequeña lágrima caer por mi mejilla, decidí guardarla en el bolsillo de mi pantalón y seguí arreglandome pero con una gran punzada en mi corazón de tristeza y desesperación.