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Narra Raymond

Miré molesto el pedazo de madera que acabo de romper y después tomé en y seguí rompiéndolo mientras sentía como la furia y rencor se apoderaba de mi cuerpo, luego de eso me acerqué al lago y los tiré ahí.

Wendy: ¿cómo puedes hacer esto Raymond?. Dice llorando.
Raymond: es para que te des cuenta que yo no estoy jugando y si vuelves a desgraciarme la vida como hace 13 años te juro que no tendré piedad. Digo molesto.
Wendy: pero tan sólo escúchame...
Raymond: ¿y para qué? para que me sigas mintiendo, entiende Wendy que lo nuestro ya es historia del pasado, tú solita te buscaste esto así que tienes ningún derecho de reclarmarme a mi las cosas ¿entendido?. Digo serio.
Wendy: pero Ray...
Raymond: no quiero volver a escuchar tus absurdas explicaciones, por eso desde hoy doy como acaba nuestra amistad y para dejartelo muy en claro aquí está tu estúpido regalo que me diste. La miro molesto.

Saqué el llavero que me dio hace años atrás y lo miré con odio, pero después lo tiré al lago y los dos mirábamos como empezaba a hundirse.

Wendy: tantos años que dediqué mi tiempo a nuestra amistad ¡y así me pagas!. Dice molesta.
Raymond: no me hables así niñita. Digo serio.
Wendy: ¡te prohibido que me vuelvas a decir así Raymond Ayala!. Me mira molesta.- tú no sabes lo que viví y lo que sufrí para volver aquí a Puerto Rico solamente por ti, para recuperar nuestra amistad y también para decirte que todo este tiempo yo..., ¡he estado enamorada de ti!. Dice casi llorando.
Raymond: ¿y hasta ahora me vienes con eso?, ni creas que porque me digas que estas enamorada de mi te voy a perdonar pequeño engendro del demonio, ya mucho sufrí con tu abandono y para mi eso es suficiente, y solamente para que sepas, ya conseguí a alguien mejor que tú, mi novia actualmente, ella si sabe valorar muy bien lo que es amor y amistad  ya que por ninguna circunstancia me a abandonado, así que por favor  ¡déjame en paz!. Digo enojado.
Wendy: yo no te abandoné es tan sólo que...
Raymond: ya ves, ni tú misma te crees tus mentiras así que por favor deja de molestar. Me volteo molesto.

Iba a dejarla ahí he irme yo a mi casa para ya no saber nada de ella pero en eso su voz me interrumpió.

Wendy: y si hablamos de mentir y de ocultar secretos el señor aquí presente se lleva el premio mayor. Dice seria.- o que ¿acaso ya no recuerdas lo que pasó en mi fiesta de cumpleaños número 15.
Raymond: no..., no sé de que estás hablando. Digo nervioso.
Wendy: ¿acaso ya olvidaste nuestro primer beso?. Dice desafiante.



El Error De Haberme EnamoradoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora