El Error De Haberme Enamorado

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Narra Samantha

Me dirigía hacia Cartel después de haber ido de compras al centro comercial, ahora que le pude sacar dinero a Raymond pude darme la vida que siempre quise, y bueno mañana finalmente será mi esposo así que ya no tendré que preocuparme de nada. La estúpida de Wendy ya obtuvo su merecido así que ya no me importa que pase con ella, Ray la odia así tanto como yo y debo admitirles que hacerla vivir el mismo infierno en carne propia a sido único.

Estaba a pocas calles de llegar a la empresa pero de lejos pude ver a la hermana de Ray junto a esa maldita hablando mientras caminaban, me escondí entre un callejón ya que no quería que se dieran cuenta de mi presencia así que espere que pasaran y luego las miré. Sonreí maliciosamente y luego caminé un poco más rápido hasta llegar a Cartel, al llegar fui a encerrarme a uno de los baños y ahí se me ocurrió algo magnífico, tal vez ya haya hecho sufrir a Wendy por asunto de Ray pero eso no significa que la diversión a acabado así que es momento de hacer un pequeño jueguito.

Narra Raymond

Estaba en mi oficina revisando algunos documentos del banco ya que esta situación de estar casi en banca rota a empeorado y ahora los bancos no quieren acceder a darme un préstamo o ayudarme en este problema, los chicos ya me advirtieron que si no resuelvo pronto todo esto ellos podrían irse de Cartel a buscar trabajo a otro lado y yo realmente no quiero eso.

Los documentos del banco también decían que la única manera de resolver el problema es pidiendo un préstamo al socio que está aliado, en mi caso sería contactar a Wendy para poder hablar con ella pero dudo que ella quiera hacerlo y además mi mente no está segura de hablarle o también ella pueda ser la responsable así que no debo confiarme.

Miré de reojo mi teléfono y realmente unas ganas enormes de llamarla me invadieron pero ¿será que ella me contestaría? ¿querrá hablar conmigo?. Esas preguntas resonaban en mi cabeza pero cuando menos lo esperé ya tenía el teléfono en mis manos, fui a Instagram y la busqué, su cuenta estaba verificada y además ella me seguía algo que de verdad nunca me había dado cuenta, fui a la sección de mensajería y ahí miré por unos segundos el icono de videollamada, estaba a punto de presionarlo pero en eso Samantha entró llorando a mi oficina.

Raymond: amor. Digo preocupado.- ¿qué te pasó?. Me levanto y voy a su lado.
Samantha: Ray..., debes que detener esa maldita de Wendy, ella me atacó. Dice llorando.
Raymond: ¡¿Wendy te atacó?!. Digo sorprendido.
Samantha: si amor, mira nada más como me dejó. Me muestra sus heridas y moretones.- yo venía tranquila caminando por la calle cuando de repente ella apareció y me atacó, yo no pude hacer nada para poder defenderme y te juro que yo no hice nada malo, yo solamente venía a visitarte como todos los días. Me mira triste.- ve a detenerla ahora mismo antes que le haga algo a Coral.
Raymond: ¿Coral?. Digo confundido.
Samantha: si amor, ella me dijo que su próxima víctima sería tu hermanita y luego toda tu familia, ve y salvalos, no quiero que esa loca le haga algo a mis suegros y mis cuñados. Me abraza mientras llora.
Raymond: pero amor tú...
Samantha: no te preocupes por mi, tu familia es primero. Me besa.
Raymond: está bien amor. La beso.- ya verá esa niñita que nadie se mete con las personas que amo, te prometo que haré todo lo posible ¿si?. La miro con una sonrisa.
Samantha: si Ray..., te amo. Sonríe.
Raymond: y yo a ti mi reina. Beso su cabeza.

Le di un último beso y luego rápidamente tomé mis llaves y salí corriendo de mi oficina, no tenía tiempo para esperar el ascensor así que tomé las escaleras y bajé hasta la entrada principal de Cartel, de ahí salí y subí a mi auto, lo puse en marcha y fui lo más rápido posible a la casa de mis papás para evitar que esa desquiciada de Wendy les haga algo.

Narra Wendy

Después de haber caminado un buen rato con Coral llegamos a un lindo vecindario y luego nos detuvimos en frente de una casa muy bonita aunque no entiendo que hacemos aquí.

Wendy: ehh Coral ¿qué hacemos aquí?. La miro confundida.
Coral: venimos a hablar con mis papás sobre Ray, ellos también se enteraron de que habías vuelto así que me pidieron que fuera por ti, ven que deben ya estar esperándonos. Sonríe.

La miré confundida por un momento pero luego ella tocó el timbre de la casa y en cuestión de algunos minutos nos abrieron la puerta y me di cuenta que era la mamá de Ray.

Rosa: Coral, que bueno que has llegado. Dice feliz.
Coral: si mamá, pero mira a quien traje. Se hace a un lado y me miran.
Wendy: hola señora Rosa, es un gusto verla otra vez. Digo feliz.
Rosa: ¿Wendy?, vaya como has cambiado, eres mucho más linda de lo que recordaba. Sonríe.- también es gusto verte otra vez mi niña, pero pasen Ramón, Melvin, Nomar y yo, ya las estábamos esperando. Dice con una sonrisa.

Sonreí y luego con Coral entramos y fuimos a la sala en donde el papá y los hermanos de Raymond estaban hablando.

Coral: papá, hermanos, es un gusto verlos otra vez. Dice feliz.
Melvin: ¡hey! pero si es Coral. La mira feliz.
Nomar: hermanita, cuanto tiempo. La saluda.
Ramón: hija, gracias a Dios llegaste. Sonríe.
Coral: me alegro de verlos realmente pero luego seguimos con eso, ahora quisiera presentarles a quien traje después de tantos años. Dice emocionada.- Wendy, cuñadita ven.

Me acerqué tímida y solamente los miré por un momento pero luego los saludé amablemente.

Wendy: ¿qué tal señor?. Miro al papá de Ray.- Melvin, Nomar es un gusto verlos otra vez. Sonrío.
Melvin: ¿Wendy?. Dice confundido.
Nomar: ¿eres tú?. Dice sorprendido.
Wendy: la misma de siempre chicos. Me río.
Ramón: pero no te quedes ahí, siéntate. Dice amablemente.
Wendy: oh claro, gracias señor.

Sonreí y luego me senté en el sofá al igual que Coral pero en eso se puso a hablar con ellos, la mamá de Ray llegó a nuestro lado y nos sirvió un taza de té.

Rosa: cuanto tiempo Wendy ¿cuánto a pasado? ¿10, 13 años?. Toma té.
Wendy: bueno señora, 13 años exactamente. Sonrío.
Melvin: pero ¿dónde estuviste todo este tiempo?. Dice confundido.
Nomar: ¿a donde fuiste?. Me mira.
Wendy: bueno yo...
Ramón: chicos, no sean imprudentes. Los mira serio.
Wendy: no se preocupe señor, pero mejor diganme ustedes ¿cómo han estado?.
Coral: ya te imaginaras, soportando a la descarada novia de Raymond. Rodea los ojos.
Rosa: Coral por favor...
Melvin: Coral tiene razón mamá, esa tal Samantha sólo quiere a Raymond por dinero y nosotros no hemos podido hacer nada al respecto para hacerlo razonar.
Nomar: pero menos mal que llegaste Wendy, ahora podrás ayudarnos en detener esa absurda boda el día de mañana. Dice feliz.
Wendy: ¿yo?. Digo confundida.
Ramón: perdona lo directos que son pero  ello tienen razón, estos últimos años hemos soportado la relación de nuestro hijo junto esa mujer.
Rosa: tal vez suene algo raro pero tenemos justificación para odiar ese matrimonio, Raymond no se da cuenta de las cosas.
Coral: por eso te decía cuñada, que nos ayudaras en detener la boda de Ray, puedes hablar con él, bailar en la fiesta y invitarlo a comer pero debes que buscar la manera de acercarte a él y hacerlo razonar las cosas un poco, él no puede casarse con  Samantha ¡no puede!. Me mira.
Wendy: pero yo no...
Melvin: suena algo raro y lo entendemos pero Raymond no puede ser esposo de esa arpía. Dice molesto.
Nomar: a la única que queremos como nuestra cuñada es a ti Wendy, tú si sabrás cuidar muy bien a Raymond. Dice con una sonrisa.

Cuando Nomar dijo que quería que yo fuese su cuñada me hizo un poco feliz ya que eso significa que aún me quieren y no guardan rencor por lo que pasó. Realmente me encantaría hablar con Ray y hacerlo cambiar de opinión pero dudo que eso pase.

Estaba sumida en mis pensamientos mientras escuchaba el plan que tenían preparado para hacer cambiar de opinión a Ray pero en eso azotaron la puerta de un golpe y cuando volteamos a ver era Raymond que venía bastante enojado y me miró.