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Narra Raymond

Estaba junto con Samantha tomando una copa de vino cuando de repente la gente se alboroto y empezó a ir hacia la entrada, voltee a ver y había llegado Wendy junto con Darell y pide ver que ella iba tomada de su brazo y muy cerquita de ese cabrón haciendo que sintiera algo de celos al verlos juntos, tomé el resto que quedaba de vino en mi copa mientras los miraba molesto pero en eso sentí los labios de Samantha en mi cuello.

Samantha: ¿qué miras amor?. Dice curiosa.
Raymond: no, nada mi reina. Digo apartando la mirada de esos dos.- oye, ¿ya te dije qué te ves hermosa con ese vestido?. Sonrío.
Samantha: y eso que no has visto lo mejor amor. Besa mi cuello.- más tarde después de la fiesta te mostraré algo más íntimo. Dice coqueta.
Raymond: no espero la hora amor. La beso.- por cierto, ¿viste quién llegó?.
Samantha: si, la estúpida de Wendy. Los mira molesta.- pero no te preocupes amor hoy le daremos su merecido a esa maldita por haberte abandonado, tú sólo haz lo que te dije y ahí después las chicas y yo nos encargaremos del resto. Sonríe maliciosamente.
Raymond: ¿y crees qué resulte?. Digo curioso.
Samantha: obvio Ray, todo saldrá a la perfección y verás que después esa estúpida se arrepentirá de todo lo que te hizo. Me besa.

La miré y después la besé con necesidad, ella se separó de mis labios y la miré confundido pero después ella se fue junto a las chicas, voltee a ver a Wendy nuevamente y me llevé una gran sorpresa, ella estaba besándose con Darell y eso inmediatamente me hizo estallar en celos pero lo pensé por un momento así que si quiere guerra, pues guerra obtendrá.

Me levanté de la mesa y después fui por Samantha, la tomé de la mano delicadamente para después llevarla al centro de la pista de baile, ella me miró confundida por un momento pero después me arrodille enfrente de ella y sonreí.

Narra Wendy

Estaba tranquila con Darell hablando sobre la academia mientras tomábamos una copa de vino, en eso miré a Ray y entonces lo vi besándose con esa mujer muy acaramelados, esa escena en cierto punto me destrozó el corazón y mis ganas de llorar eran enormes pero mejor me resentí y seguí tomando vino.

Darell: ¿pasa algo?. Dice curioso.

Yo no dije nada y solamente le hice una señal para que viera esa escena, sentí como una pequeña lágrima cayó por mi mejilla pero en eso sentí que Darell tomó mi cara entre sus manos y me miró tiernamente.

Darell: no le prestes atención a esos dos, ellos posiblemente sólo lo hacen para sacarte de quicio porque ya se dieron cuenta que estás aquí, me tienes a mi ¿recuerdas?. Me mira sonriente.
Wendy: pero...
Darell: si ellos quieren jugar con fuego pues nosotros también lo haremos. Dice serio.
Wendy: ¿y cómo haremos eso?. Digo confundida.
Darell: ¿confías en mi?.
Wendy: si, pero...

Antes que pudiera seguir hablando Darell me besó de repente, me pareció algo extraño y a la vez me moleste por eso así que pensé en empujarlo pero mejor decidí seguirle el beso.

Estuvimos así un momento hasta que el bullicio de las personas hicieron que nos separáramos, miramos confundidos que sucedía y todos estaban felices y emocionados alrededor de la pista de baile, me levanté y fui a ver que pasaba en ese lugar, aparte de mi camino a algunas personas para así ver mejor y cuando vi esa escena mi corazón se destruyó en mil pedazos y mis ojos se llenaron de lágrimas.

Raymond estaba arrodillado enfrente de esa mujer y con un anillo en sus manos mientras la miraba sonriente.

Raymond: mi amor, han sido los mejores años junto a ti y realmente le debo que agradecer a Dios que llegaste a mi vida para cambiarla por completo, gracias a ti ahora soy un mejor hombre al cual ya no le hace falta aquellas personas que solamente quisieron hacerme daño, ahora tú eres mi razón de estar aquí presente porque sin ti no sé que haría realmente por eso hoy enfrente de todos nuestros amigos y conocidos quisiera preguntarte..., ¿quieres casarte conmigo?. Le muestra el anillo.

Mi vida se vino abajo en ese momento y realmente no puedo creerlo, Ray se va a casar con esa mujer ¡esto no es cierto!. Empecé a llorar y en eso decidí ir al baño para que así nadie me viera llorando y así también poder pensar con claridad todo este asunto.

Mientras me dirigía al baño corriendo pude escuchar como todos empezaban a celebrar y eso tan sólo significa que la tal Samantha aceptó casarse son Ray, ¿ahora qué haré? él ahora es un hombre comprometido con alguien que no soy yo y eso era lo que más anhelaba cuando Ray empezó a gustarme, ser con quien se casaría, tener hijos, formar una familia pero al parecer toda esa ilusión se a ido totalmente a la basura.








El Error De Haberme EnamoradoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora