11. ━━━ tensión

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      Freya iba a pisar la casa de los Cullen por primera vez

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      Freya iba a pisar la casa de los Cullen por primera vez. Lo que había llevado a que ella estuviera ahí era algo que si pudiera, habría cambiado, pero no podía, así que no le quedaba más que apoyar a su padre.

      Estaba vivo ─más o menos─ y aún estaban juntos. Eso era más que suficiente para hacer feliz a Freya.

      Carlisle le había contado básicamente todo sobre los vampiros. Incluidos dones y nuevas habilidades que les daban una ventaja notable sobre el resto de los humanos mortales. Al principio había estado asustada y su impulso de supervivencia la había instado a salir de ahí por patas, pero también estaba intrigada.

      Y agradecida.

      Jamás dejaría de agradecerle a Carlisle lo que había hecho por su padre.

      Una vez pasado el primer shock de la noticia, ella se había literalmente lanzado hacia Carlisle sin pensar en la vergüenza que sentiría después. Lo había abrazado con fuerza y había murmurado "gracias" al menos cien veces, mientras encerraba al pobre hombre con sus brazos.

      Seguramente había incomodado a Carlisle, pero él había sido igual de educado que siempre y simplemente había aceptado la efusividad de la chica con una sonrisa.

      ─Pensamos que ibas  a odiar a Carlisle ─sonrió Alice, enganchando su brazo con el suyo. La más bajita suspiró─. Estaba tan asustada cuando vi eso, pero es un alivio. Cambiaste el futuro que había visto con tu gratitud por Carlisle y tu amor por tu padre.

      Alice le sonrió aún más, cómo si estuviera orgullosa de ella, y Freya no pudo evitar emocionarse.

      ─Alice vió que nos odiarías al enterarte de lo de tu padre ─murmuró Emmett, metiendo sus brazos en los bolsillos de su sudadera mientras caminaba a su lado. Rosalie iba unos pasos más adelante que ellos.

      ─No podría. Al principio estaba asustada, pero si salvaron a mi padre, ¿Cómo puedo pensar que son malas personas? ─bajó la mirada al piso para no tropezarse en las escaleras de entrada.

𝗴𝘂𝘆𝘀 𝗺𝘆 𝗮𝗴𝗲,     𝖼 . 𝖼𝗎𝗅𝗅𝖾𝗇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora