Aisley.
Aarón se adelanta, dejándonos hablando a Annia y a mí. La verdad es que adoro a Annia, llegué esta mañana aquí y me siento demasiado cómoda, Karina es una mujer muy diferente a como lo fue mi madre.
— Mamá me dijo que te quedarás aquí unos días. — Da saltitos.
— Si, es por las notas que salieron esta mañana. — Me encojo de hombros.
— Y por qué Aarón quiere protegerte. — Me empuja con el hombro. — ¿Puedo preguntar algo? — Asiento. — ¿Lo quieres?
— Llevamos muy poco tiempo saliendo. — Sonrió. — Pero la verdad es que me siento muy bien estando cerca de él, es diferente a cualquier otro y eso es lo que más me gusta. Estar con él.
— Lo tomaré como un sí. — Me sonríe. — Quiero que Aarón sea feliz, siempre lo he querido, es demasiado importante para mí y saber que es feliz contigo me da mucho gusto. Pero debes de saber que tiene un carácter horrible casi siempre, es sobre protector y por supuesto que puede ser intimidante. — Soltamos una carcajada entrando a la cocina.
— Huele delicioso mamá, me recuerda a las tardes en la finca de la Toscana. — Le dice Annia a Karina.
— Lo sé mi amor, a mí también me lo recuerda, Ángelo ya arregló el comedor, podemos sentarnos.
Aarón rodea mi cintura con su brazo mientras comenzamos a caminar, retira una silla para que pueda sentarme y él lo hace a mi lado, poniendo una mano en mi pierna sonriendo.
— ¿Hace cuánto tiempo no vas a la finca, hermanito? — Comienzan a servir la cena y huele más que delicioso.
— Hace al menos ocho meses, pero tú estabas en Suiza con Darrell.
— Cierto, extraño a Darrell. — Los ojos de Annia se llenan de lágrimas.
— Lo sé pequeña. — Aarón le sonríe cariñosamente. La verdad adoro la forma en que se comporta con su hermana.
— Linda, ¿Has pensado en dejar de ser la asistente de Aarón? — Me pregunta Karina y yo frunzo el ceño. — Si serás oficialmente abogada en unos meses, no creó que siempre vayas a ser su asistente. — Suelta una carcajada.
— Si, por supuesto que quiero ejercer como abogada. — Le sonrió.
— Vaya hermanito, parece que tendrás competencia. — Todos nos reímos y Aarón me aprieta la pierna. — ¿Ezra vendrá a verte después del evento? — Alza una ceja y yo frunzo el ceño.
¿Ezra y Annia se conocen? ¿Y cómo sabe que vendrá a Nueva York? Responde a mis preguntas no formuladas.
— Am... — Se revuelve en el asiento después de unos segundos de incómodo silencio. — Conocí a Ezra hace un par de años en Italia y lo vi hace unos meses antes de que él regresará a Los Ángeles, estuvimos juntos algunos días. — Abro la boca y Aarón se tensa a mi lado. — ¡Joder! Lo dije en voz alta. — Exclama Annia con las mejillas sonrojadas. Ezra se acostó con Annia. No puedo salir de mi asombro, me quedé sin palabras.
— ¿Te acostaste con Ezra? — Inquiere Aarón notablemente molesto.
— Si y tú con su hermana. — Intenta desaparecer la tensión en el ambiente, pero no funciona.
— Hay que cenar o se enfriará. — Dice Karina evitando una pelea entre sus hijos.
El resto de la cena transcurre en silencio y con mucha tensión, de vez en cuando acaricio la mano de Aarón y me sonríe levemente.
— Estaremos arriba. — Dice Aarón cortantemente poniéndose de pie. — Tú y yo tenemos que hablar. — Señala a Annia con el dedo índice. Toma mi mano y comenzamos a caminar.
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UN JUEGO DE SEDUCCIÓN. (TS #1)
RomanceSeducción 1. Ella tenia la típica vida de estudiante universitaria, al hombre perfecto a su lado, romántico, caballeroso, el sueño de cualquier mujer, ella creía que su vida era perfecta y normal. Pero eso cambio el día que coincidió con un hombre r...