UN JUEGO DE SEDUCCIÓN. (TS #1)

CAPÍTULO 22.

Aarón.

Probablemente William Káiser vaya a querer asesinarme cuando me vea llegar con su hija, pero no como el miembro de la familia Káiser que es, si no como mi asistente. Tal vez lo llame en un par de días, ahora tengo otros asuntos importantes y por ironía se trata de su hija.

¿Sospechara que yo estoy detrás de las rosas negras y los emails?

Quizá aún no, pero con las pistas puede comenzar a hacerlo, Aisley es una mujer demasiado lista, solo espero que sea lo suficiente como para descubrirlo antes del evento de su padre.

Tom no me envió el informe sobre Jesse White a mediodía como me lo había dicho la noche anterior, pero me aseguro que había algo que le iba a tomar un par de horas más investigar y que me iba a interesar demasiado, confió en Tom demasiado, por eso no me moleste y si dice que me va a interesar, realmente será así.

Cuando llego a mi casa esa tarde, Annia está profundamente dormida en el sofá y mi madre, como los últimos días, cuando llego del bufete no está en casa.

Gracias al cielo, podre darme una ducha y cambiarme sin que me interrogue, amo a mi hermana, pero es un fastidio.

Un par de horas después, estoy en mi despacho organizando todo para un juicio que tengo en un par de días y que gracias a Aisley todo el papeleo esta ordenado; pero el sonido de mi celular me obliga a dejar lo que estoy haciendo, en la pantalla puedo ver que se trata de Tom.

— Buenas noches doctor, disculpe la tardanza, pero realmente esto va a interesarle.

— No te preocupes Tom, ¿De qué se trata?

— El señor White no se encuentra en la ciudad desde el fin de semana y en el informe que está llegando a su email se dará cuenta de que es lo que va a interesarle.

— Gracias, lo voy a revisar, buenas noches. — Corto la llamada.

Inmediatamente, mi computadora me avisa la entrada de un nuevo email y obviamente sé que se trata del informe que me envió Tom.

Cuando lo abro, lo primero que me llama la atención es que Jesse White no viene de una familia multimillonaria como lo es la familia Káiser, no estudio en los mejores colegios del país ni fuera de él, como Aisley. Me parece increíble que William haya permitido algo así, según sé Aisley es su única hija, tiene un hijo mayor que no recuerdo, pero es realmente increíble.

¿William sabrá quién es el novio de su hija? Pero teniendo en cuenta que Aisley ni siquiera usa el apellido de su padre, no creo que le importe si él se opone a su relación.

Dejo las suposiciones a un lado y continúo leyendo; pero el nombre de una empresa que pertenece a su hermano me llama la atención y creo recordarlo en alguna demanda millonaria. Un viejo amigo demando a esa empresa por plagio de un proyecto, yo lo represente hace un par de semanas y por supuesto ganamos el juicio, pero según supe esa empresa quedo totalmente en la ruina y al parecer, ahora intenta levantarse.

¿Y si Jesse White esta con Aisley por el dinero de su familia?

Es una posibilidad demasiado grande y después de todo quizá llame a William, si le informo de esto podría deberme un favor.

Sigo leyendo el informe y algo me llama demasiado la atención a diferencia de todo lo demás, literalmente me quedo boquiabierto.

El señor White en estos momentos se encuentra en Carolina del Sur por el nacimiento de su hija, que tuvo lugar en un pequeño hospital el pasado lunes. La recién nacida fue registrada con el nombre de Alisa White. Sus padres son Jesse White y Valentina Jones.

¿El novio de Aisley tiene una hija recién nacida? ¿Cuánto tiempo llevan juntos? Ok, necesito de la ayuda de Annia, la mejor amiga de Aisley es amiga de mi hermana, supongo que debe de saber más de lo que me dice.

Por lo que salgo de mi despacho con mi laptop en mano y comienzo a bajar las escaleras, por suerte Annia ya está despierta y la puedo escuchar en la cocina, por lo que camino rápidamente hasta ahí.

— Hola hermanito, no me di cuenta cuando llegaste. — Me dice frotándose los ojos.

— Estabas profundamente dormida. — Me acerco para darle un beso en la mejilla y me regala una sonrisa somnolienta.

— ¿Qué pasa? — Enarca una ceja y pongo la laptop con el informe abierto sobre la isla de la cocina para que pueda leerlo.

— Tom me envió este informe hace unos minutos, le pedí que investigara a Jesse White. — Abre mucho los ojos.

— ¿El novio de Aisley? — Asiento. — ¿Pero por qué? — Se interrumpe y abre aún más los ojos.

— Precisamente por eso, Jesse no viene de una familia poderosa como Aisley, al parecer se conocieron en la Universidad de Columbia, que es en donde Aisley estudia, pero Jesse tenía una beca casi completa.

— ¡Joder! — Exclama y continúa leyendo el informe.

— ¿Recuerdas que hace un par de semanas te hablé sobre una empresa a la que envié a la quiebra por una demanda?

— Creo que sí, antes de que se fuera Susan, ¿No? — Me dice sin mirarme a los ojos.

— Si, esa misma, ¿Recuerdas el nombre? — Enarco una ceja.

— Tu amigo Logan demando a la empresa por plagio. — Ata cabos en su mente. — La empresa se llamaba White Tecno... — Se interrumpe y vuelve la vista a mi laptop. — ¡Joder! Es la empresa del hermano de Jesse. — Exclama.

— Así es pequeña, ¿Sabes lo que eso puede significar?

— Jesse puede estar con Aisley por interés, por el poder y dinero que la familia Káiser tiene en el país y fuera de él. Seguramente quiere ayudar a su hermano y quien mejor que la hija de William Káiser para ayudar al pobre hermano de su novio.

— Efectivamente, pero eso no es todo, sigue leyendo.

Hace lo que le pido y durante un par de minutos sigue leyendo hasta que se levanta de golpe del taburete de la isla de la cocina.

— ¿Jesse está en Carolina del Sur por el nacimiento de su... — Se interrumpe y vuelve a leer como sin poder creérselo. — de su hija? — Casi creó que se le van a salir los ojos. — ¡Joder!

— Si pequeña, joder. — Coincido y me froto la barbilla. — ¿Sabes cuánto tiempo llevan juntos?

— Andrea el sábado por la noche me comento que llevaban juntos un año y que a Aisley le urge un orgasmo. — Suelta una carcajada y yo pongo los ojos en blanco. Aunque la idea me gusta.

— Entonces ese idiota la engaño y embarazo a otra mientras ya tenían algunos meses de relación.

— ¡Joder, que idiota! — Exclama y vuelve a sentarse. — ¿Qué vas a hacer, hermanito?

— No le diré nada hasta que sea conveniente o hasta que necesite hacer uso de la información, obviamente tú tampoco dirás nada.

Hace un gesto como si cerrara sus labios con un zíper y arrojara la llave y no puedo evitar soltar una carcajada, definitivamente aún parece una niña. Es mi hermanita y me encanta eso.

— ¿Hablarás con William? — Me pregunta con una amplia sonrisa y parece leerme el pensamiento.

— Si, lo hare. Pero en un par de días, mientras tanto tú te quedas calladita.

— Trato hecho, pero tienes que contarme todo y si se puede, dejarme estar presente cuando hables con su padre. — Me señala con el dedo índice.

— Está bien. — Acepto. — Pero prométeme que no dirás nada hasta que yo lo haga, supongo que a William no le va a gustar cuando le diga que el novio de su hija dejo embarazada a otra mujer siendo novio de ella.

— Esto cada vez me gusta más. — Suelta una carcajada y yo la sigo.

Me siento como si fuéramos niños de nuevo planeando una travesura en la que sabemos mi madre iba a regañarnos. Aún no puedo creer que esté haciendo todo esto por una mujer; solo espero no arrepentirme.