Love With Lies - {Park Jimin}

**-Chapter Thirty Eight-**

La resaca era una de las cosas con la que tendría que luchar la castaña, al despertarse sintió otro cuerpo pesado a su lado sorprendiéndose al mirar que era Jungkook abrazando a una almohada durmiendo plácidamente, reconocía la habitación allí pasaba las noches cuando no quería ir a su apartamento, lo que no recordaba como había llegado allí, mucho menos como Kookie dormía a su lado.

Se levanto completamente inestable, camino hacia el baño que se encontraba aun lado del armario, al encender la luz se miro completamente echa un desastre, su maquillaje estaba corrido y tenia su rostro pálido como un papel, su cabello enmarañado, ¿En que me he convertido?, tomo rápidamente una ducha, intentado recordar como había logrado perder el conocimiento de lo que había pasado el día anterior.

Busco en los cajones algo de Hyo, para su suerte siempre tenia camisetas de su talla, termino de vestirse para salir del baño, y mirar a Jungkook enredado entre las sabanas durmiendo como un bebe, los ruidos que venían afuera de su habitación daban por enterada a la publicista que la feliz pareja ya estaban despiertos, camino por el corto pasillo que divida las habitaciones de la cocina y la sala.

Para su sorpresa estaba solamente su mejor amigo cocinando, llevando puesto aún su pijama, se movía de un lado a otro de espalda a ella.

-Buenos días.- Saludo.

-Buenos días.- Respondió con una sonrisa.- ¿Como dormiste?

-No puedo quejarme.

-Un café bien cargado.- Lo coloco en la mesa.- Debes hidratarte mucho por todo lo que bebiste.

-Me siento bien, no tienes que preocuparte.

-¿En serio?- Pregunto irónicamente.- Ayer llegaste casi inconsciente, Jungkook me ha dicho que tuviste una pelea en el bar.

Termino escupiendo el trago de café que se iba a tomar por esa noticia.

-¡Oye!

-¿Tuve una pelea?- Pregunto sorprendida.- ¿Como?

-Un hombre quiso propasarse contigo y tu le partiste el vaso en la cabeza.- Soltó mientras limpiaba lo que Lía había escupido.- No puedes seguir así Lía, ¿Desde cuando te escapas a beber?

Ella simplemente callo ante tantos sermones, que su mejor amigo y casi hermano le estaba dando, Lindsay y Hyo, eran peores que sus padres cuando estaban molestos, y si no le había dolido la cabeza antes ahora la estaba matando.

-Deja de sermonearme.- Le miro con mala cara.- Pareces mi papà.

-Y lo seré hasta que te corrija.- Se cruzo de brazos.- Pareces adolescente.

-Con dinero.

-Exactamente esa es la diferencia.

-¿Donde esta Yummi?

Hyo no se detuvo en lo que estaba haciendo, tratar de ignorar la pregunta de la publicista fue en vano.

-¿Se fue a trabajar temprano?- Volvió a preguntar.

-Si eso hizo.

-Me hubiese encantado hablar con ella.- Sonrió antes de tomar otro trago con ella.- Creo que fui muy grosera con ella ayer, no le di las gracias por secarme la ropa.

-Créeme, eso no le molesto.

-¿Porque dices eso?

-Olvídalo, solo desayuna.- Le sirvió un plato de pan tostado y mermelada.- ¡Jungkook!- Llamo.- Ven a comer.

Lía le miro extraño, mientras que este soltaba una tremenda risa al servir otros dos platos en la mesa, poso sus manos en la cintura y soltó un suspiro.