Love With Lies - {Park Jimin}

**-Chapter sixty-**

Jimin entró a la habitación y miró a la castaña sentada en la cama, con su suéter y unos pantaloncillos, mirando fijamente la ventana.

-¿Como esta?- Pregunto.- Le he oído gritar como loco, pero no pude salir.

-Esta bien.- Bufeo Jimin.- Hiciste lo correcto.

-Es mi mejor amigo y no se me ocurre nada para poder tranquilizarlo.- Miro como JImin se acercaba lentamente.- Solo se preocupa por mi.

-Cálmate.- Se sentó a su lado en la cama.- Él estará bien

-¿Se ha ido?, cuando está molesto puede hacer locura....

-Esta bien, esta junto a Tae, no te preocupes.

Jimin la abrazó con suavidad, y acaricio su cabello suavemente, sabía cómo se sentía.

-Puedes estarte tranquila.- Susurro.- Hyo estará bien.

Los ojos de Lía se abrieron con pesadez, tocando a su lado para poder encontrar al modelo, su el vacío en su cama le hizo alertarse, de alguna manera estar al lado de Jimin parecía ser un lugar seguro para la castaña, al abrir los ojos se encontró al modelo, sentado mirándola fijamente .

-¿Que haces alli?- Pregunto.

-Vigilo tu sueño.- Sonrio.

-Ven aquí.- La castaña con pucheros palmeo su la de la cama.- Duerme conmigo un rato más.

-Lia.

-Ya no me duele la cabeza.- Volvió hacer pucheros.- Estoy bien.

-No te preocupes, voy a contemplarte mientras duermes.- Se acostó a su lado apoyando su cabeza en la mano.- Te ves tan hermosa asi dormida.

-Jimin.- Susurro.

Un pequeño beso en sus labios le hizo recostarse a él, para quedar en un profundo sueño, distorsionadas imágenes venían a su mente, todo lo que Jimin había contado, visualizar a JungDon riendo de placer y acercándose a ella, las peores partes fueron cuando las palabras golpeaban su cabeza, <<Voy a hacerte mía>>, la sensación del frío recorriendo su piel cuando rompió su camisa, le hicieron levantarse de golpe, su cuello hinchado aùn dolía, y sin mencionar los huesos que resonaron al moverse tan rápido, le maldijo una y otra vez por lo que había hecho.

Miró a su lado y Jimin no estaba, su parte se encontraba desordenada como si se hubiese levantado, quería mirarlo dormir pero sus medicamentos le hacían caer dormida cada vez que podía, se levanto lentamente debía buscar a Jimin, quería sentirlo cerca y estar con él, la puerta se encontraba abierta, los pasillos en completa penumbra, no podía calcular que horas podian ser, pero solo el foco de la lámpara en la sala alumbraba el lugar.

Camino descalza lentamente, para encontrarse al modelo sentado frente a la gran ventana de cristal, apoyando sus rodillas en su pecho y con un teléfono en su oreja, mirando el maravilloso paisaje que se admiraba por las noches.

-He tratado de contactarme desde ayer.- Dijo por teléfono.- Crei que podria hablar con el ahora.

Parecía morder sus uñas mientras esperaba.

-Si, quisiera saber de el.- Pidio.- Me han dicho que está muy grave, soy un pariente.

Paralizada quedo la castaña al oir eso, todo su cuerpo se estremeció no sabia pero, algo no estaba bien.

-Muchas gracias.- Dijo.

El silencio se apodero de la habitación, pasaron unos segundos cuando el volvio a hablar.

-Escúchame bien, maldito hijo de puta.- Su tono era fuerte y serio.- Si soy Jimin, no te acerques a nosotros, no vuelvas a mirar a Lia, porque te juro que te mato, ya no soy el mocoso que no pudo matarte aquella vez, ahora soy capaz de hacer todo lo que está en mis manos para mantenerte alejado.