Love With Lies - {Park Jimin}

**-Chapter Thirty Seven-**

Desaparecer, esa fue una de las ideas de la publicista, después de la visita del modelo a su oficina no quería ver a nadie, quería llorar en silencio, quería sentirse mejor, se sentía tan destrozada por dentro que no creía ser capas de hablar con alguien ni siquiera con su mejor amigo.

Habia pasado por su casa a darse una ducha, y visito el bar mas cercano.

"Olvidar", "Olvidarte Jimin", "Necesito olvidarte".

Aquel bar estaba casi vació, eran las siete de la noche y ella era la única que estaba sentada en la barra con una botella medio llena, era la segunda que se tomaba, su cabeza estaba reposando en la barra mientras jugaba con su trago, "Tenia miedo a perderte", "Tenia miedo a que me miraras con decepción así como me miraste ayer", su cabeza dolía, pero ella seguía bebiendo sin parar.

Su teléfono sonaba una y otra vez pero ella le ignoraba completamente, colocandolo en silencio para que nadie la molestara, después de vaciar su vaso lo volvió a llenar mirando como la pantalla de su móvil se encendía por la llamada de "Lindsay", no estaba de humor para contestar preguntas como ¿Que ha pasado?, ¿Estas bien?, era una completa estupidez, claramente no estaba bien.

Rio sola al recordar, que era patética en cosas del amor, De amor nadie se a muerto, asi que no lo necesito, no lo necesitaba hasta que apareció el modelo, volvió a colocar su cabeza encima de la barra se sentía decaída y con sueño, el bartender miro en que estado se encontraba, y como su móvil recibía llamadas sin parar, hasta que agarro el teléfono y contesto una de ellas.

-Hola hermosura.- Hablo el chico detrás de la linea.- ¿Tienes planes para hoy?

-Lo siento pero la señorita no puede atenderlo.

-¿Quien habla?- Pregunto alarmado.- ¿Quien es usted?

-La señorita ha estado bebiendo mucho y realmente no se si esta en condiciones de marcharse sola.

-¿Donde esta?

-En el bar centrico.

-Ya voy para allá.

Un hombre de traje se sentó a su lado, mirándola completamente, aquella falda en forma de tubo acentuaba sus piernas y con su camiseta blanca y su chamarra de cuero le hacían ver muy elegante, la desvistió con la mirada en un momento antes de hablar.

-¡Maldita sea!- Se quejo.- Mi cabeza.

-¿Que hace una linda chica como usted sola?- Pregunto el hombre sentado a su lado.- ¿Porque ha bebido de esa manera?

-Se supone que bebí para embriagarme, no para que me doliera la cabeza.

-No debería tomar de esta forma.- Acoto.

Ella le miro pero no tenia ni la mas mínima intensión de responder.

-Mire en las noticias y hablaron sobre el calentamiento global, y veo que tiene razón.- Se rió.- Usted señorita esta completamente ardiente.

El se le acerco lentamente y le susurro "Sexy", Lía rodó los ojos completamente.

-¿Fue malo el piropo?- Pregunto,mientras que ella lo ignoraba.- Intente hacerte reír, pero en realidad si estas muy ardiente.

-¡Hay por dios!- Hablo.- Me duele la cabeza y puede dejar de hacer sus chistes malos.

Este le miro las piernas desnudas por la falda corta hasta sus muslos, impulsándolo aún mas a tratar de seducirla.

-¿Tienes novio?- Pregunto perversamente.- No importa, veo en tu cara que puedes con dos, ¿Quieres intentar conmigo?

-¿Pero que?- Le miro asqueada.- Déjeme en paz, ya me estoy hartando.