CAP 55

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POV CRISTAL

Aún me encontraba arriba de Kitana sorprendida por lo que había dicho, mi lobo aullaba de alegría y el olor del celo de mi omega alteraba todos mis sentidos -más bien hormonas- por querer llenar su vientre y ver mis cachorros dentro de ella.

--Dime que puedo hacerlo -dije con voz ronca en su cuello- dime que puedo tomarte y llenarte de mí, dejar mis cachorros aquí -acariciaba su vientre-

--Hazlo amor, no lo digo por el celo -besó mi nariz- estoy consciente de lo que deseo.

Comenzamos con un besos demasiado caliente, nuestras lenguas luchaban por tomar el control pero la falta de aire y la calentura del ambiente hacía que Kitana abra su boca y gima rendida.
Quitaba poco a poco su ropa de dormir -suerte hoy era una bata- dejaba resaltar su cuerpo por lo fino de la seda que esta tenía con unos toques en el bordes de encaje. Su olor me tenía loca pero tocar su piel era otro nivel, recorrer mis manos por sus piernas y después tocar entre estas para sentir su lubricante mojando estas era la gloria.

Mis colmillos picaban por salir y ya marcar todo su cuerpo, pero quiero disfrutar este momento.

--Preciosa quiero que gimas lo que quieras -besaba su cuello- no quiero que te calles, ¿Okay?

--S-Sí

Sus manos arrugaban mi ropa de dormir ya que aún la tenía puesta, saqué pronto la camisa que llevaba y bajé mi pantalón de dormir junto las bragas de Kitana. Sentí que sus feromonas llamaban más a mi lobo para que la tomara.

--Mírame -le pedí-

Y ahí estaba, la razón del porqué siempre le pedía a Kitana que me mirara.

--¿Sabes por qué siempre te pido que me mires cuando te hago mía? -ella negó- porque tus ojos se tornan grises haciendo saber que tu lobo está allí en nuestro lazo.

Su rostro se tornó de un rojo intenso centrándose en sus mejillas haciendo que la viera más preciosa a mis ojos. Su cabello castaño resaltaba totalmente con los ojos ahora de su omega dominante. Y los míos, está de más preguntar que de seguro de la misma manera -de un verde brillante-

--Alfa -pedía en gemidos ella- te necesito aquí adentro ya.

Señalaba su vientre con sus manos y es como si aquel lugar fuera el más importante para mi lobo desde ahora y no quisiera que nadie más lo tocara. Mi garganta picaba y gruñía por cumplir su cometido.

--Perdón si duele.

Vi su cara confundida pero después una mueca se reflejó en su rostro al ingresar tres dedos en su entrada lubricada, mis dedos se empapan por su humedad y mi lengua desea probar de nuevo de aquel dulce que poseía.

Besé una vez más sus labios para comenzar a mover con fuerza y placer mis dedos dentro, sus manos tomaron la sábana desde los lados, con su otra mano aplastaba la almohada y hacía su cabeza hacia atrás al separarnos del beso.

--Mira nomás como estás coqueta -elevé mis dedos desde su interior- tan mojada para recibirme.

--C-Cristal joder -tomaba aire desde su boca- no me tortures.

--No lo hago mi omega -pasé mi lengua por su cuello y gruñir en su glándula de olor- solo que me encanta verte pidiendo por mí en todo tu esplendor.

Su cuerpo se elevó cuando moví más rápidos mis dedos y daban a entender que su orgasmo estaba presenciandose apretando estos a la vez con sus paredes. Decidí llevar mi boca a su feminidad para hacer que este llegara pronto y con fuerza, lo que eran gemidos fueron gritos un poco al sentir demasiada estimulación, mi lengua recorría a velocidad su clitoris y empujaba cuando elevaba mis dedos en su interior. Con un llamado a alto a mi nombre se vino con mis dedos, dejando chorreando estos cuando los saqué y probé su esencia en estos.

SOLO MÍA, MI LUNA Y YO TU SOLDonde viven las historias. Descúbrelo ahora