Awake/Despierta

Capítulo 19

Cap.19: Casi Mueres... 19 Abr. Del 2001... 09:01hrs

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Estaban allí en la mitad del pasillo, el castaño con el ocre, ambos hablando de algunas cosas, aunque la mayoría de las veces el castaño se callaba, provocando ciertos reproches por parte del menor, se separaron un momento, ya que la hermana del castaño le llamaba, el ocre no quería que fuera, puesto a que sabía que la castaña maltrataba a su hermano menor desde hace varios años atrás. Se quedó solo en ese pasillo, mirando a sus alrededores, esperando a su amigo, esperaba que no lo dejase tan mal como la última vez, aparte de esas pruebas raras con drogas que le hacían al castaño, lo que se le hacía raro era que este jamás ponía resistencia, lo aceptaba, jamás entendía a su amigo en esas situaciones.

--espero que estés bien--cruzó sus brazos mirando por donde se había ido.

Se sentó en el suelo, le parecía raro que nadie pasase por ese pasillo, casi siempre los guardias pasaban o los enfermeros, así era mejor para el ocre, no tendría que aguantarse los coqueteos al menos un rato, y no se quejaba de ello. Ese silencio no era normal, algo debía pasar, volvió a levantarse, mirando por la ventana cristalina, desde ese piso se podía ver el exterior, era algo que agradecía bastante, demasiado aburrido era no poder ver el afuera desde aquellas ventanas, las cuales eran un poco grandes, si las rompían podían escaparse, pero eso activaría una de las alarmas de seguridad.

Dejó salir un suspiro cansado, alejándose de aquella ventana, quería salir del lugar por lo menos una vez, que se sentiría estar allá afuera, caminando con libertad, aunque no todo fuese bueno, sería suficiente para él. Llegó a escuchar pasos atrás suyo, lo iba a ignorar, suerte que se haya quitado de allí o hubiera recibido un cuchillo en la cabeza o espalda, miró a esa persona, estúpido psicópata de 15 años, este se mantenía con una sonrisa sádica sobre sus labios, alzando nuevamente la mano donde agarraba aquel cuchillo preparándose para atacarle de nuevo. Un chillido salió de los labios del ocre, colocando su mano sobre la herida en su pierna, teniendo que arrastrarse en el suelo para irse lejos del pelirrojo, sin tener éxito alguno con alejarse lo suficiente.

--joder--resbaló su mano, haciendo que tuviera la cara contra el suelo.

Esperaba aquella apuñalada, pero jamás la recibió, sino que alguien le abrazó protegiéndole, miró de reojo para ver a quien posiblemente le haya salvado la vida, sorprendiéndose al ver que era el castaño, este se quejaba casi de manera inaudible, se separó del menor, levantándose del suelo, cubriendo la herida de su brazo, miró al pelirrojo, este le miraba fijamente un tanto sorprendido.

--vaya, pensé que bromeabas cuando dijiste que lo defenderías--habla el mayor de los tres de manera burlona.

--yo jamás bromeo sobre eso--responde seriamente agarrando un tubo de hierro posicionándose para pelear--y mucho menos si se trata de los mellizos.

--hablas mucho.

Ambos empezaron a pelear, la ventaja del tubo era que podía usarlo para frenar los ataques del pelirrojo, ya perdiendo cada uno sus armas, dejando al ocre de espectador el cual seguía en estado de shock. No se dio cuenta, no. No supo en que momento pasó, solamente llegó a escuchar el vidrio de una de las ventanas romperse, más el grito de ambos mayores al caer por ella. El ocre reaccionó, acercándose a la ventana, luego de que el vidrio sobre la recepción se rompiese más un golpe duro.

--Kaliostre, no--lágrimas empezaron a caer de sus ojos hasta su mentón.

Siete pisos... habían caído siete pisos de altura, quien sabe si hubieran sobrevivido o no, era muy dura la caída, aunque si se contaba el vidrio sobre la entrada, serian 5 pisos de caída, aun así el golpe era fuerte, llegó a escuchar que alguien le llamaba, dirigiendo su mirada a esa persona, había ignorado la herida en su pierna y el desangramiento, a lo que su vista se volvía borrosa hasta caer inconsciente al suelo. Todo era tan repentino y extraño a la vez.

13:21hrs

Despertaba lentamente, siendo cegado un poco por la luz de aquella habitación, sentándose en la camilla, recordó lo que pasó, mirando a los lados, dándose cuenta que estaba solo en ese cuarto, soltó un suave quejido mirando su pierna vendada, al menos la herida estaba tratada. El azabache ingresó al cuarto, al ver al menor despierto fue a abrazarle, montándose en la camilla quedando al lado del menor, el ocre correspondió el abrazo, apoyando su cabeza en el hombro ajeno, empezando a llorar, por dos razones, la primera, casi moría, y la segunda, el castaño estaba casi muerto por culpa suya, quería verle, al menos en ese momento, quería saber si estaba bien, si seguía respirando, no quería culparse de la posible muerte de su mejor amigo.

--Sajiro--nombró a su contrario, empezando a acariciarle los cabellos--¿sabes algo de Kaliostre?

--no nos dejan verlo todavía--sabía que ese niño era importante para su menor--debemos esperar un rato.

Esperar era lo que menos necesitaba el de cabellera ocre, aguantarse esas ganas de ver a su mejor amigo sano era difícil en todos los sentidos, soltando un pequeño suspiro, se aferró a su mayor, empezando a llorar nuevamente, se culpaba de lo que había pasado, de que el castaño casi muriera defendiéndole, al separarse de ese abrazo, el azabache le limpió las lágrimas con sus dedos, para luego depositarle un beso en los labios con ternura y tranquilidad, siendo este correspondido de igual manera. Así logró calmar al menor, era complicado hacerlo cuando se desesperaba por algo, pero aun así logró su objetivo, calmarlo.

--ya está curado pero no ha recuperado la conciencia--llegaron a escuchar la pareja.

--el golpe fue muy fuerte, es increíble que sigan vivos los dos.

Aquello ultimo sorprendió al ocre, con ayuda del azabache bajó de la camilla, el mayor lo cargó en su espalda para que no se lastimase, empezando a caminar por los pasillos dirigiéndose a donde se encontraba el castaño reposando de esa caída, al llegar, la imagen que vio el menor le hizo doler el pecho, se sentía culpable de lo que había sucedido anteriormente, con tratamiento infra venenoso, un pequeño aparato que le ayudaba a respirar, vendas en casi todo el cuerpo, incluso tenía un rasguño en la mejilla, teniendo que ser cosido y tratado, una imagen así, torturaría a cualquiera. El azabache se dedicó a hacer guardia, dejando a los dos contrarios en la misma habitación.

--tsk~--ese quejido llamó la atención del ocre, llevando su mirada--maldición...

--no te esfuerces, la caída fue-

--du-uel-e--se quejó el castaño sin poder moverse, todo su cuerpo dolía como el infierno.

En ese momento llegó a sentir culpa de nuevo, el estado del castaño era delicado, aunque se recuperara de ese incidente, ese día no lo olvidaría el de cabellera ocre, casi veía a su amigo morir, todo por su culpa, miraba al mayor, quien decía débilmente que le dolía, era algo obvio, resistir una caída de esa altura era un reto.

Todos se preguntaban cómo llegaron a sobrevivir a ella...

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Arena ven a mí, no soy tan buena para "dramas" jeje, pero me esfuerzo bastante por pulir esta historia, espero que lo hayan disfrutado tanto como yo disfruto el hacer esta historia para todos ustedes, les mando besos y saludos junto a un frasco de la buena suerte para sus tareas.

A partir del siguiente cap. El salto de tiempo solo se aplicará en estos caps. Adicionales, luego publicaré otra historia tras terminar esta, espérenla apenas vamos casi por la mitad de esta.

Sin más que decir me despido de ustedes con un abrazo y muchos besos... nos vemos... os quiero mucho... chao~

Dedicado a: @LaChica_Rara1, @Villiancreeppy (no sé si lo escribí bien)