Awake/Despierta

Capítulo 53

[Nota: posiblemente sea algo cursi, pero, quedaran complacidos]

Cap.53: Propuesta... 14 Abr. Del 2012... 18:50hrs

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Vestido de forma casual, al igual que su pareja, había pasado años desde la última vez que salieron en una cita a solas, caminaban por las calles tomados de la mano, hablando de ciertos temas, el ocre solía molestar al azabache con hacerle preguntas sobre a donde le llevaba, este solamente le decía un "ya verás", dejando con la intriga al menor de la relación.

Llegaron a un pequeño restaurante, no de lujo, pero aceptable para la ocasión, ambos ingresaron, pidiendo una mesa junto a la ventana, a ambos les dieron un menú, el ocre empezó a leer, notando algunos ingredientes que reconoció al instante.

--no sabía que habían restaurante con menú para caníbales en la parte de... comida especial--confiesa Stephan dejando el menú sobre la mesa luego de haber decidido lo que pediría.

--es para que veas--alardea Sajiro con orgullo--, no te traje antes porque tenía mis razones, no era el momento.

El ocre iba a preguntar, en eso llega el mesero preguntando sus órdenes, el de cabelleras largas solamente señaló lo que quería en el menú, acción imitada por el azabache, el mesero anotó las órdenes con cierto nerviosismo, eran pocas las veces en las que interactuaba con caníbales. El de orbes grisáceos suspiró, jugando un poco con su cabello.

--no desordenes ese hermoso peinado que traes esta noche--declara el de orbes azulados con una sonrisa, posicionando su mano sobre la mesa como si indicase que colocase la suya sobre esta--dame tu mano.

El menor sonrió un poco, estirando un poco su brazo sobre la mesa, agarrando la mano de su pareja, el azabache le dedicó una pequeña sonrisa, besando sus nudillos de su novio, esa noche era algo especial para el mayor de esa relación que, por milagro, seguía intacta hasta la luna de esa noche.

--aquí están sus órdenes--habló el mesero dejando los platillos sobre la mesa--¿algo para beber?

--algo de vino para ambos, por favor--responde el azabache antes de que el ocre hablase.

El mesero volvió a retirarse, dejando sola a la pareja, el de orbes grisáceos arqueó una ceja, jugando un poco con la copa, dejando que el chico que les atendía lo llenase con el vino, la pareja agradeció de sus servicios, empezando a dar inicio a esa pequeña cena, hablando algunas veces durante la comida, disfrutando de esta y del tiempo que compartían juntos ese día.

Una vez haber acabado la comida, siguieron hablando mientras tomaban del vino, dando pequeños brindis a juego, eso era disfrutar de la noche, el ocre trataba de no tomar demasiado para no quedar ebrio al igual que el azabache, algunas personas se quedaban viendo al de cabelleras largas con ligera sorpresa, era extremadamente hermoso a la vista de esos perversos, los cuales eran regañados por sus acompañantes.

Pagaron la cuenta, saliendo del lugar tomados de la mano, despidiéndose de la recepcionista del restaurante, el azabache empezó a guiar una ruta, dejando al ocre con la duda de a dónde se dirigían, llegaron a una colina que antes habían visitado junto a la pequeña, el lugar era perfecto para ver unos fuegos artificiales que lanzarían ese día.

--no sé cómo te soporto--confiesa el ocre dando una pequeña sonrisa.

--ahora me tendrás que soportar más--sisea el azabache, arrodillándose frente a su pareja, llegando a confundir a este--Stephan Oliveira, eres un hermoso chico, mi primer y único amor de la vida, me haces feliz cada día con tu perfecta belleza, si fuera delito estar a tu lado, estaría pagando condena eterna porque deseo estar junto a ti hasta el resto de mis días...--declaró mientras sacaba una pequeña caja, abriendo esta, dejando ver un anillo de compromiso--¿quieres casarte conmigo?

Justo en ese instante, iniciaron los fuegos artificiales, dando su toque especial de colores fríos y cálidos en su momento de explosión. El de cabellera ocre quedó estático, saliendo de ese trance para así dar pequeños sollozos, lloraba de cierta felicidad que le daba el momento, asintiendo varias veces con su cabeza.

--si... me casaré contigo--esa fue su respuesta.

El azabache se reincorporó, sacando el anillo de su caja, para ponérselo en el dedo anular de la mano derecha, mostrándole que también usaba ese anillo, luego de eso, el ocre le abrazó, siendo esta acción de afecto correspondida, se dieron un beso tierno, para luego disfrutar del show de fuegos artificiales de esa noche. Cuando esto estaba a punto de terminar, se fueron del lugar, tomados de la mano.

Se dirigían a su hogar, ya estaba algo tarde como para seguir en la calle, hablando de algunas cosas en el camino, el ocre sacó su celular, mirando el mensaje que su hermana le había enviado, soltó la mano de su pareja, este le abrazó por la cintura con uno de sus brazos en lo que el ocre texteaba con su hermana, avisándole a esta que ya estaban por llegar.

--¿no está sola con Amane?--pregunta el azabache mirando el chat del ocre.

--¡no seas vieja chismosa!--exclama en un susurro el ocre, negando ante la pregunta--al parecer James está con ella y su hija, al menos Amane no se aburrirá estando con mi hermana nada más.

--James no me cae del todo bien--sisea el azabache haciendo un gesto de piquito.

--calma, antes no me caía bien, pero es buena gente--le dice para que dejase esa expresión--mi hermana no me creerá cuando se entere que estamos comprometidos.

--que se la crea a la fuerza.

--Sajiro malo--burla un poco el menor.

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Hasta aquí el capítulo de hoy, espero que os haya gustado, no se les olvide darle a la estrellita y dejar tu comentario en la cajita de acá abajo, no me agradó del todo este cap. No soy buena en las declaraciones de amor, mucho menos en propuestas de matrimonio, aparte, mientras escribía este capítulo, tenía hambre, me puse escribir mi dolor durante la parte de la cena, ja jajaja, me paso de maraca. Sin más que deciros me despido de ustedes mis preciaos lectores, felices fiestas... nos vemos... se les quiere... chao~

Atte.: TheCreeper