Capítulo 84

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Cap.84: Awake... Please... 27 Jun. Del 2016 a 31 Mar. Del 2018...

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¿Qué es esto? No puedo ver nada en lo absoluto, no puedo moverme, no puedo hablar, apenas y puedo respirar. Hay un extraño olor, uno que ya he sentido antes, ah, ya sé que olor es... el olor de la sangre es lo que puedo husmear, hay demasiado ruido si me concentro, voces de personas alteradas, de celulares llamando a un número que no llego a escuchar, no recuerdo que sucedió, ni del rostro de la persona que me acompañaba, ni siquiera recuerdo quien soy.

-Stephan... despierta...

¿Ese será mi nombre? Creo que lo es, un momento, el ambiente ha cambiado, siento la brisa fresca más la humedad de la tierra, estoy en un lugar distinto. Mis parpados se hacen más livianos y soy capaz de abrirlos, un lago, ¿Por qué estoy aquí? Camino alrededor del lago, mojando mis pies descalzos en la orilla, notando que estoy vestido totalmente de blanco. Unas risas llego a escuchar a lo lejos, giro mi mirada hacia esa dirección, dos niños, no, tres niños de seguro, se acercan con prisa solo para saltar a ese lago, ¿será un recuerdo? No... porque esos niños no están en mi memoria, tampoco llego a sentir que les conozco.

_oh vaya... hermano, mira que chico tan bonito_ uno de los niños se acerca a mí_ soy Jackson, y él es mi hermano Michael, ¿y tú?

Esto me desconcierta, esos niños también visten de blanco, y me doy cuenta de que el tercero que venía con ellos ya no está, decidí no preguntar, ya que este lago se me hace muy conocido, un lugar donde las personas visten de blanco y buscan un lago para pasar al más allá, entonces... estoy muerto o estoy en ese proceso, le respondí a ese niño cuando repitió la pregunta, él sonrió mostrando los dientes, dejando ver la falta de un canino, tantas cosas que ocurren en el mundo vivo, tanta maldad que hay, y tantas muertes que se producen a diario.

_¿usted también vendrá?_ pregunto Michael, yo dude en responder_ si apareciste directamente aquí puedes regresar a la vida, así decía mi abuela...

_fue un gusto conocerle, chico bonito_ se despidió Jackson ates de entrar junto a su hermano a lo más centrado del lago.

Se esfumaron de mi vista, que les vaya bien en la otra vida, al darme cuenta de que se acercaban más personas decidí caminar para alejarme del lago, sé que hay un propósito que tengo, pero no sé cuál es, no recuerdo demasiado de mi vida, entonces, debo de estar en coma o agonizando, maldición, tantas variaciones de esa teoría me está haciendo doler la cabeza, espera, eso no es posible si estoy aquí, ¿o sí?

Alguien más se acercaba a mi ubicación, mire en esa dirección, no vestía de blanco como los demás, más bien, vestía como si estuviera en el mundo el cual puedo abandonar en cualquier momento si sigo sin recordar cual es mi propósito.

-Stephan... recuerda todo para olvidar partes de esa memoria... si es que quieres despertar.

Esa voz me es familiar, su imagen se aclaraba conforme se acercaba hacia mi persona, mis ojos se abrieron más de lo normal, ¿Kaliostre? Si está aquí con esa ropa, significa que no ha muerto totalmente (a diferencia mía), se me hace extraño recordar ese nombre en un momento así, donde estoy entre la vida y la muerte.

_¿por qué estás aquí?

-para ayudarte quizás-me ofreció su mano.

Dude un segundo, pero al final acepte el agarre de su mano, y todo regreso a oscurecerse, ese chico me guiaba, quizás a mis memorias o a otro lado, pero... no puedo hacer nada más, aquí no hay noción del tiempo, no sé cuánto he estado aquí si soy honesto conmigo mismo. Llegamos a un lugar, no, a un hospital, pero, el ambiente es muy extraño, tenebroso quizás, podía ver a un par de personas a lo lejos, al final de ese pasillo. Kaliostre soltó mi mano antes de desaparecer, diciendo entre líneas un no mueras, me acerque hasta donde esas personas se encontraban, notando algo extraño, cuando los dos se separaron, la mujer ingreso a un ascensor, donde se encontraban otras dos personas.

Y en eso... les recordé, esa pareja, eran mis padres, durante esa caminata que tuve con ese viejo amigo vi tantas memorias, demasiadas de hecho, o en otras palabras, mire toda mi vida con tan solo caminar. Por un reflejo me agache, justo cuando un cuchillo fue lanzado a donde estaba parado. Mire de nuevo el ascensor, este es mi propio sueño, mi propia forma de decir adiós a este mundo, quienes estaban allí dentro eran Lily, mi madre, Yashipiro de 8 años y Mónica, la madre de Kaliostre.

__entra al ascensor niño.

Un escalofrío me recorrió la espalda, deteniendo con mis manos un golpe, retrocediendo hasta quedar al lado de la entrada del ascensor, sin entro, le diría adiós a la vida y saludaría a satán, no me lo permitiría nunca, Scrabby (la mujer que antes había hablado), se acercó a mí, intentando golpearme o clavarme una daga, me alejaba lo necesario, sin embargo, siempre hacia un movimiento para que me acercara de nuevo al ascensor, mire una vara de hierro, esquivando un par de golpes de esa mujer para agarrar la vara y defenderme, entre más peleaba, más casado iba quedando, con pocas fuerzas logre noquearla, mire hacia el ascensor y este se cerró luego de que los tres se despidieran. Sonreí, solo para susurrar un:

_nos veremos pronto.

----------- 31 Mar. 2018

La máquina medidora de pulso baja el ritmo de los latidos con bastante rapidez, Sajiro, que estaba sentado a un lado de la camilla, tomaba la mano del ocre entre sus manos, se le había hecho difícil avanzar en ausencia de Stephan, le visitaba cada que podía, y esa vez era una casualidad, no activo la alarma de emergencia en cuanto el pulso del ocre se detuvo después de bajar constantemente, más bien se resignó a la realidad, casi dos años sin que el de orbes grisáceos despertarse, sus heridas estaban sanadas y había recuperado la sangre que perdió durante el accidente, si no despertaba aun después de eso, no valía la pena tratar de hacer que regresase si es por esas razones.

Quien no creía en los milagros, acá empezaría a hacerlo, el ocre empezó a respirar de nuevo, y sus latidos regresaban a su ritmo normal, y para mayor sorpresa, la mano del ocre empezó a apretar la suya, una enfermera que de por casualidad entro a la habitación, pudo ver como el ocre abría sus ojos con lentitud, de inmediato fue a llamar a uno de sus superiores, el azabache seguía algo sorprendido, y llevo una de sus manos a la mejilla izquierda del más joven.

--¿Sa...Sajiro?

Una alegría inmensa le llego, a lo que abrazo al ocre, este algo dudoso correspondió a esa muestra de afecto, olfateando un poco al azabache, solo había dicho el nombre de este por mera casualidad, no le recordaba claramente, seguía aturdido de todo lo que sucedió y su mente no procesaba todo con claridad. Lo importante era que pudo despertar, solo había que hacerle recordar algunas cosas y de eso se encargarían.

The End

Notas finales:

Quería agradeceros por llegar hasta acá, enhorabuena por eso, creer que llegaría hasta acá no me parecía tan posible luego de todo lo que me ha pasado, próxima segunda parte la tenéis asegurada, sin embargo no puedo daros fecha especifica si soy honesta, ya actualizare la segunda parte de Alas Rotas De Un Ángel Caído, pero tienen que ser pacientes. No se les olvide darle a la estrellita y dejar tu comentario... dedicado a: @Inusakuya_Taisho y a @LaChica_Rara1... nos vemos... hasta la próxima... chao~

Atte.: TheCreeper

Awake/DespiertaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora