Capítulo 16: Compañero

424 43 107
                                    

Comandante Skywalker.

El terror persigue los pasos de Rey mientras se dirige a la  nueva sala de entrenamiento especial para tomar el dichoso conocimiento de sus compañeros. ¿Kylo dijo algo de quiénes son? Rey se da cuenta de que hay un buen número de cosas que el líder supremo puede usar contra ella en términos de convertir su ira en un castigo, y eso hace que su pavor aumente. Se detiene fuera de la línea invisible del espacio personal, respirando profundamente, tratando de controlar cualquier emoción y tratando de aclarar su mente para encontrar el equilibrio. 

Sin embargo, no puede dejarlos esperando mucho tiempo, o su nuevo maestro se impacientará con ella. Comenzará a sospechar de algo de lo que no es culpable. 

Entonces Rey entra, excluyendo todos los pensamientos y sentimientos mientras los hombres frente a ella se cierran delante de sí, regocijándose cuando el temblor involuntario le aborda el cuerpo. La infame sala de entrenamiento no es exactamente lo que Rey había imaginado, y sin embargo, cuando mira a su alrededor, se da cuenta de que es exactamente como debería haber esperado. 

Había pensado que habría instrumentos oscuros de tortura, cosas sucias ensangrentadas, objetos de magia oscura y cosas por el estilo. Pero rápidamente se corrigió con reproche, porque por supuesto la sala de entrenamiento es tan prístina y austera como las habitaciones de Kylo Ren. Seguro que hay equipo y armas de aspecto peligroso, pero están perfectamente organizados en las mesas y a lo largo de las anchas paredes de duracero. Y hay evidencia de que la habitación ha sido utilizada según lo previsto por los arañazos y las marcas de quemaduras en las paredes, el piso y el techo, pero aparte de eso, está muy limpia y ordenada. 

El más bajo de los individuos es el más rápido a simple vista, porque sin poder evitarlo ya está tan cerca de ella que puede percibir el calor brotar a borbotones de su abollada armadura. Rey se ve obligada a retroceder tantos pasos como le es posible, logrando que tropiece con sus nuevas botas, mandando su pequeño trasero al suelo. La risa burlona no se hizo esperar después de eso, el individuo más bajo se toma la libertad de saborear su caída, temblando tranquilamente a lo que parece una carcajada silenciosa.

Ella se irrita con ese hecho.

Se pone de pie, sintiendo aún la debilidad del uso de la fuerza oscura. Sus articulaciones doliendo como si hubiese envejecido varios años de un golpe, sus tobillos tronando como la tapa de un vaporizador de comida espacial. Le toma unos momentos lograr ponerse de pie sin caerse nuevamente, entre respiraciones profundas y sostén del suelo que le sirvió como ancla para su equilibrio. Rey vuelve a mirar por segunda vez a sus compañeros, pero en esta ocasión el coraje de la irritación y la molestia la acompañan con un gesto valiente para esos tipos.

—Mírala, Cardo.—Ronronea el más bajo a su compañero.—Tan salvaje como de costumbre...—Luego, su casco gira en su dirección.—¿Te crees en la posición de mirarnos de esa manera cuando no eres más que una desertora cobarde?

Rey no responde.

El tal Cardo tampoco.

—Vamos a ver...—Continuó.—Se supone que debemos aceptarte nuevamente como nuestra compañera.

—Ushar, detente.—El otro habla por primera vez. Rey casi llora cuando la voz gruesa y profunda se coló por el vocomodulador de la máscara. Le hace preguntarse si el más alto es una especie de humanoide o un animal, pero definitivamente no es un humano.

Ushar se detiene instintivamente, casi como si la orden de Cardo fuese absoluta. ¿Ren tendría también ese efecto en sus aprendices? ¿Existe una jerarquía incluso en su equipo? Ella está en el eslabón más bajo, obviamente. Su vestimenta no es nada parecida a la de sus compañeros y la médico dijo que estaba ahí en calidad de esclava. Una simple chatarrera de la pobre Bracca. Rey asegura su posición con una silueta más rígida, sintiendo la tensión de sus músculos, el hormigueo característico del cansancio y la vena incómoda del estrés. Nunca ha pasado mucho tiempo sin pisar tierra firme y ahora no sabe cuándo le será posible bajar del Finalizador. Ella temió porque su vida de ahora en adelante fuese a desarrollarse en la frialdad del espacio.

𝐄𝐑𝐀𝐕𝐀𝐍𝐀 | 𝐑𝐄𝐘𝐋𝐎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora