—Es una aberración, hay algo mal con ese chico, apesta a oscuridad, es un fenómeno, un monstruo, malvado, malo... equivocado.
.
.
Hay algo en el último sueño de Rey.
Tiene un aspecto cetrino de nuevo, y está jadeando por el esfuerzo de ponerse de pie; sin duda, su corazón se está esforzando por todo el alboroto de esa pesadilla, pero también probablemente todavía está sintiendo los efectos de la fuerza sobre ella desde antes.
No importa, piensa, sintiéndose vengativa. Todavía está el hecho de que ella se ha comprometido para salvar a su familia, aún a costa de su propia vida.
La luz de la estrella más cercana en el nuevo sistema solar se filtra por la ventana de su habitación, bañando la estancia de un tenue rosa. Rey ha pasado dos semanas oculta en su habitación, recuperándose de sus heridas de la batalla contra Ushar, que de alguna forma, la han dejado más molida que un filete de banta.
Kylo fue benevolente con ella y permitió que descansara en la quietud de sus aposentos durante todos estos días. Los cortes del látigo se han secado, sólo dejando finas líneas de sangre seca y un dolor moderado en la espalda. La marcas en su rostro.—de las cuales fueron menos lastimadas.—ya casi han desaparecido gracias a los parches de bacta y al cuidado constante de los medidroides. Ella comió, durmió y se acicaló esas dos semanas tranquilamente entre las sábanas de seda corelliana. Se aseguró de recuperarse lo suficiente para lo que fuese que Ren tuviese preparado para ella y se mentalizó rigurosamente para lo peor. Dejó que los droides la trataran como a una princesa, aceptando y embutiéndose cuanta comida y bebida pudo.
Pasó el tiempo leyendo los archivos de la primera orden desde una datapad y memorizó las reglas del gremio de Ren. Había una infinidad de reglas de la primera orden, muchas de ellas hasta ridículas, pero las obligaciones y creencias de los caballeros de Ren lograron llamar su atención a pesar de los métodos poco ortodoxos que utilizaron para ascender al lado oscuro.
Finalmente hoy, en su último día de convalecencia; la castaña está tan nerviosa por volver a ver a su gemelo. Hay una extraña confusión por el hecho de que no volvió a pararse en su habitación, y una parte de ella creyendo que quizá sus labores como líder supremo le impidieron visitarla.
Para ella mejor... Por supuesto.
Ese medio día, casi a punto de almorzar; una nota sencilla y luminosa aparece en la pantalla de su cuaderno de datos. Es de Kylo Ren y quiere que vaya a la clinica para que le retiren la escayola del brazo y los puntos, pero antes tiene que verlo en la la sala del trono. Ella no ha ido a la sala del trono del líder supremo, incluso es el único lugar que no tiene una imagen representativa en los archivos de la primera orden. Es probablemente, el único lugar que no está ubicado en el mapa del Finalizador y, que de alguna forma, resulta intrigante para ella.
Rey termina su almuerzo más rápido de lo que debería y se viste con un pantalón y una chaqueta negra de algodón. Es el juego de ropa más cómodo que tiene y el conjunto que mejor se amolda a su delgada figura. Por una parte, debe admitir que ha ganado peso en esos días, ahora la ropa se pega a sus muslos y pechos como una segunda piel y ella se siente cómoda por la ganancia de peso y energía. Llevaba muchos meses sin comer de manera adecuada y gracias a las vitaminas y complementos alimenticios que le administraron los medidroides, realmente de siente mucho mejor.
Gracias a ello, las náuseas se han ido, la falta de aire también y lo más importante, se ha acostumbrado a la gravedad simulada de la meganave.
ESTÁS LEYENDO
𝐄𝐑𝐀𝐕𝐀𝐍𝐀 | 𝐑𝐄𝐘𝐋𝐎
Science FictionSINOPSIS: No recuerda nada de su pasado. Rey no sabe de dónde viene o cuál es su misión en la galaxia. Ha pasado más de seis años trabajando como traficante de especias, junto a la mecánico más irritante a bordo del Eravana. Su vida es monótona, sim...