Deepest Reflections (Traducción)

Capítulo 36

Reuniones

Mundo Alternativo

Damien llamó suavemente a la puerta y esperó a que respondieran. Escuchó los pasos acercándose a la puerta antes de que se abriera. Harry apareció en la puerta. Silenciosamente se apartó del camino, permitiendo que Damien entrara.

—Hermione se fue— Damien le informó mientras entraba. —Tenía que ver al profesor Dumbledore, para contarle sobre la brújula. Mamá y papá subieron con ella—

Harry cerró la puerta y se unió a Damien en el sofá.

—¿Le explicó todo a mamá y papá?— preguntó en voz baja.

Damien asintió.

—Sí, se sorprendieron con la brújula— Él dijo.

Harry miró hacia otro lado, jugueteando con las mangas de su túnica.

—¿Estaban enojados conmigo?— preguntó con aprensión.

Damien le frunció el ceño.

—¿Por qué estarían enojados?— preguntó.

Harry miró hacia arriba con ojos llenos de culpa.

—Fue mi culpa. Tenías razón después de todo, la brújula nunca funcionó por mi culpa—

Fue el turno de Damien de apartar la mirada con sentimiento de culpabilidad.

—Estaba siendo un idiota—, admitió. —Ya te lo dije. Nunca supiste que estabas afectando la brújula. No fue tu culpa—

Harry bajó la cabeza. Era cierto que no sabía que había estado impidiendo que la brújula funcionara. Hermione le había explicado que la brújula obtenía energía de todos los presentes en el momento de la activación. Es un dispositivo complicado y extremadamente poderoso y, aparentemente, también es increíblemente sensible. Cada vez que se activaba para enviar a Harry de vuelta a su propia dimensión, no funcionaba porque Harry no quería que funcionara, no quería volver. El Kayanat podía captar la resistencia de Harry ya que, como explicó Hermione, extrae sus poderes de su entorno y el poder de Harry era muy superior al de Damien o cualquier otra persona que estuviera alrededor de la brújula. Así que hizo lo que Harry quería y no nadie más.

Todas las pruebas que realizó con la brújula resultaron positivas. La brújula llevaría a Harry de regreso hoy si eso es lo que quisiera.

—¿Hermione dijo cuando estaba trayendo la brújula?— Preguntó Harry, haciendo todo lo posible por sonar normal.

—Dijo que lo traería mañana— Damien respondió, notando el valiente intento de Harry de permanecer sin emociones.

—Mañana, bueno, eso es… bueno— Dijo Harry.

Los chicos se quedaron en silencio. Ambos se esforzaban por pensar en lo que podrían decir a continuación. Damien siguió lanzando miradas incómodas a Harry. Por fin habló, incapaz de quedarse callado por más tiempo.

—No quiero que te vayas— Él espetó.

Harry lo miró sorprendido.

—Yo tampoco quiero irme, como lo demostró la brújula que no funciona— Respondió Harry. —Pero tengo que hacerlo—

—Debe haber una manera de que te quedes— Damien dijo desesperadamente. —Una forma para que Harry y tú se queden aquí—

—Creo que te estás olvidando de ese pequeño factor llamado Equilibrio Universal— Harry señaló.

—¡¿Quién sabe si eso existe?!— Damien respondió. —Por lo que sabemos, a un tipo aburrido se le ocurrió—

—Damy— dijo Harry en voz baja. —Quiero quedarme aquí, con mamá, papá y tú. Pero no importa cuánto lo desee, no significa que pueda tenerlo. No pertenezco aquí, no importa cuánto desearía hacerlo—