Llamas Gemelas [Terminada]

(15) Encuentro Agridulce

Juliana

Después de grabar varias escenas de acción termine agotada, la verdad me encantaba hacerlo y no arriesgar a otra persona, además era muy divertido, peligroso si, pero divertido.

Me fui al camerino rodante que compartía con otra actriz, Karen Gillan. La vi que se quitaba el maquillaje, mientras yo me vestía.

-Con Anne y Rachel vamos a ir un bar en el centro de la ciudad en la noche —me dijo —Invitamos a las demás, pero tenían otros compromisos, ¿te sumas con nosotras?

—La verdad quiero descansar en mi apartamento, pero si me decido te llamo.

—Bueno —me dijo con una sonrisa, me acerque para limpiar mi cara también —Puedes invitar a tu novia, ¿Vanessa es su nombre?

—ehhh, si... Pero no está en la ciudad —le conteste —Esta afuera por su trabajo de modelo.

—Ah, bueno —se coloco su chaqueta — Bueno. Espero tu llamado —yo asentí, me dio un beso en la mejilla y se fue. Karen era una mujer muy simpática y divertida, llevábamos tiempo trabajando juntas y con otras actrices más y nos quedaba un mes más para terminar las grabaciones de la película, que era de acción tipo los indestructibles, pero versión femeninas.

Me coloque mi chaqueta roja de cuero, tomé mi mochila y salí del camerino en dirección a mi auto, me despedí de algunos trabajadores moviendo la mano, le saque el seguro a mi auto y me subí. Quedaban unos minutos para que sean las cuatro y a esa hora el tráfico era horrible, por que a todos se les ocurre salir a la misma hora. Mientras esperaba que el semáforo cambiará mire a mi alrededor; restaurantes, cafés, mall, tienda de ropa, pero una de las tiendas llamó mi atención, era una pastelería, el semáforo cambió y seguí manejando, pero girando hacia la izquierda y acercarme más a la pastelería, al leer el letrero "Delicias de las Borges", tenía tres coronas al final, tuve una extraña sensación en mi pecho y me estacione, me quedé ahí unos segundos y luego baje siguiendo mi intuición, asegure el auto, me acerque a las vitrinas, habían mesas redondas altas con dos sillas, no sabía si entrar o no, pero algo en mi interior me impulso y abrí la puerta la cual hizo sonar una pequeña campana. Era un lugar muy amplio, para comer ahí mismo o llevar, ya habían clientes. Habían todo tipo de delicias: donas, postres, pasteles, rollos de canela, Pie, tartas, etc. Pero los que más me llamó la atención fueron los Cupcakes, habían de muchos colores, se veían muy apetitoso. Me acerque para poder comprar aún que sea uno, no veía a nadie, en eso se abrió una puerta entrando alguien de espaldas, al parecer traía unas cajas, al darse vuelta sus ojos azules se cruzaron con los míos, soltó la caja por la impresión, algunas manzanas y naranjas rodaron por el suelo, me tomé el atrevimiento de acercarme y ayudarla con las manzanas, no pude evitar sentir su aroma, las metimos todas nuevamente en la caja y la tomé.

—¿Donde la llevas? —le pregunté sin dejar de mirarla, ella trataba de no mirarme mucho, me daba risa su nerviosismo.

—La cocina —me indicó otra puerta, asentí y camine, ella tras de mi.

Era una cocina bastante amplia. Dejé la caja sobre el mesón de metal.

—Gracias —me dijo.

—No es nada —le sonreí —.Nos volvemos a ver después de tanto tiempo —le dije.

—Así es.

—Y estas más linda que la última vez que te vi —me miró y se sonrojo, llevaba el cabello tomado, pero un mechón cubría parte de su bello rostro, lo aparte con delicadeza colocándolo tras su oreja, me acerque más a ella —No sabes las ganas que tenía de verte otra vez.

—Y yo —me dijo, nos quedamos mirando varios segundo hasta que alguien entró.

—Supongo que esto es todo, ¿no? —la mujer traía otra caja —¡Oh, perdón! No sabia que estaban ocupad...espera, yo te conozco —dejo la caja sobre el mesón al lado de la otra.