Epílogo

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Han pasado muchos años desde que soy párroco del Sagrado Corazón del sufragio. Cuando contaba con tan solo 8 años, recibí una visión en sueños, Dios me mostró que mi destino sería este.
Sé que cada día, la fe en Dios se está perdiendo, pero tengo esperanzas.
El padre Berger Müller ha sido de gran apoyo para mí, cuando llegué como su ayudante a mis 25 años. Hoy tengo 68 años y escribo estas líneas, para que queden para la posteridad. Para que la gente sepa que el purgatorio es real.
Estoy viviendo una atmósfera de felicidad en mi parroquia.
Cada semana, cientos de personas visitan el Museo del purgatorio donde se exhiben las pruebas reales de que el tercer lugar existe.

Disfruto de dar misas a las 3 am en las catacumbas del templo, siempre estoy acompañado de muchas almas allí, nunca me siento solo.

Además, cada día el altar se llena de flores, cientos de fieles vienen de visita a la tumba del Beato Juan Aguirre. Su cuerpo incorrupto se exhibe en una urna de cristal, bajo la figura de Dios en el altar. El padre Berger me ha hablado tanto de él, que no puedo dejar de verlo, parece dormir con una expresión de paz en su joven rostro, a pesar de que hace más de 50 años ha fallecido. Su corazón, también incorrupto, se encuentra en una parroquia de Buenos Aires.

Me he estremecido, cuando en el aniversario de su muerte, sus estigmas sangran, además de que desprende un aroma que parece no ser de este mundo, un aroma a santidad, que inunda toda iglesia.

Lo último que puedo contar, es que el venerable padre Berger Müller, eligió volver a su parroquia, ubicada en un pequeño pueblo, en las afueras de Alemania. Quiso pasar sus últimos años de vida allí.
Cada tanto recibo noticias de él, es muy anciano ya, pero sé  que se encuentra en paz y me alegra.

¡A Dios gracias! , porque la semana entrante, el Papa nombrará a un nuevo Santo, me encuentro muy emocionado de poder vivir esto.

Ya Debo marchar para tener todo listo, los días pasan muy rápido.

La próxima semana Juan ya no será Beato, estaré orgulloso de llamarlo
San Juan Aguirre, patrono de las almas del purgatorio.

Atte: Padre Lorenzo  Hernández.
Nacido en Venezuela, enviado aquí, por voluntad de Dios.

(Fragmento de su diario)




(Fragmento de su diario)

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El tercer lugar [Terror]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora