Un líquido frío cayó sobre mi mejilla y sentí como se deslizaba lentamente por mi rostro. Cerré mis ojos aún más fuerte, mientras llevaba mi mano a mi rostro para limpiarlo.
Seguidamente otra gota aterrizó en mi frente. Otra en mi nariz. Suspiré. Genial, Ahora el techo tenía goteras. Me incorporé de la cama tan rápido que mi cabeza comenzó a dar vueltas. El sonido de una risa que llegó desde mi izquierda me hizo saltar y casi chillar por el shock.
Giré para ver a Tyler sentado en el borde de mi cama, con un vaso de agua en su mano.
-Buenos días, bella durmiente -canturreó él alegremente -.
Entorné los ojos mientras lentamente procesaba todo.
-¿Me acabas de tirar agua?-lo acusé, limpiando mi cara de nuevo -.
Él se rio.
-No seas dramática, fueron cinco gotas de agua -sonrió -.
Puse los ojos en blanco.
-¿Qué estás haciendo aquí de todos modos? Y, ¿Cómo entraste aquí? -pregunté -¿Tienes llaves de mi casa?.
-Dijimos a las diez y tu madre me dejó subir -explicó él, inclinando la cabeza hacia el reloj que tenía en la mesita de noche -.
Parpadeé sorprendida y miré hacia los rojos números brillantes que señalaban las 10:15.
-¡Oh! Mierda, Lo siento -me disculpé, saliendo de la cama y dirigiéndome hacia mi armario por algo de ropa -.
Tyler estaba mirando a cualquier lado menos a mí y estaba incómodamente sentado en mi cama. Fruncí el ceño, preguntándome que era lo que le pasaba, luego me di cuenta de que yo estaba vistiendo sólo una de las camisetas que él había dejado en mi casa antes de que rompiéramos.
Muy a menudo dormía con ella, pero supuse que apenas cubría mi culo.
-Tyler, no es nada que no hayas visto antes -bromeé sacudiendo mi cabeza y riendo -.
-Sí, bueno es un poco distinto ahora -contestó ruborizándose -quiero decir que no se supone que te mire ahora.. a lo que me refiero es que... ¡Maldición! ¿Podrías vestirte ya, April?.
Puse mis ojos en blanco y continué sacando algo de ropa.
-¿Tengo tiempo para darme una ducha? -pregunté -.
Él suspiró dramáticamente.
-Sí, de todas formas sabía que debí haber llegado a las 10:30 -bromeó él - pensaba que habrías cambiado y estarías lista a tiempo, para variar.
Su mirada estaba firmemente fija en sus zapatos, como si fueran la cosa más importante que hubiese visto en su vida.
-Nunca se sabe, siempre hay una primera vez para todo- me burle y dirigí hacia mi baño para la ducha más rápida de todos los tiempos -.
Quince minutos después estaba vestida y lista.
Recogí mi cabello mojado en un moño desordenado y salimos. Charlamos fácilmente mientras él conducía. Tyler siempre tenía algo que decir, ésa era una de las cosas que me encantaban de él.
Aparcó frente al supermercado y me sonrió abiertamente. Miré a todos lados, confundida.
-¿Qué estamos haciendo aquí? Pensé que iríamos a estudiar -incliné la cabeza -.
-Nosotros estudiaremos, pero tú vas a cocinar – comenzó a decir él - Quiero algo muy bueno, así que, puedes venir y decirme qué puedo comprar.
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No sé qué somos
Teen FictionApril es una chica de 17 años, que disfruta del verano antes de su último año de instituto. Ella como toda adolescente esta en esa edad en la que un no siempre puede llegar a ser un sí, incluso colarse con carnet falso en una discoteca con sus amiga...