No sé qué somos

Capítulo 49

Tan pronto como sonó el timbre, Bonnie se levantó, sonriendo como una tonta. Estaba muy ansiosa esa noche. Se había preparado para la ocasión, usando un vestido rojo extremadamente sexy, pero elegante, que le quedaba perfectamente y mostraba sus largas piernas a la perfección. Su rostro estaba iluminado de emoción y sus ojos brillaban de alegría.

Sonreí también, no porque estuviera deseando que llegase esa noche, sino porque ella se veía muy feliz. Esa noche iba a ser eterna para mí, era la fiesta de graduación. Debería haber sido una noche de celebración, y debería estar igual de emocionada que Bonnie, pero en cambio la temía.

¿La razón? No podía ir con quien quería ir en realidad. No había manera posible de ir al baile con Liam así que, en cambio, estaba yendo con su hermano. No había querido ir en absoluto, porque no podía ir con él, pero Liam y Bonnie habían insistido en que era una parte importante de mi adolescencia o algo así, por lo que fueron, literalmente, los que me obligaron a ir.

Liam se había ofrecido como cuidador en el baile de graduación. Supuestamente dijo que quería estar allí por mí, pero en realidad no podía estar «allí para mí». Dijo que quería ser parte de eso de alguna manera, incluso si solo tenía que permanecer al margen. Además, dijo que no podía dejar pasar la oportunidad de verme con el vestido de graduación.

Estampe una sonrisa forzada en mi rostro y me puse también de pie, alisándome la falda hasta la rodilla del vestido azul eléctrico que llevaba. La tela del vestido era suave bajo mis dedos. En silencio me pregunté qué pensaría Liam de mi vestido y si le gustaría. Probablemente le gustaría el pequeño cinturón negro de encaje que estaba justo debajo de mi escote.

-Esos deben ser Logam y Tyler -dijo Bonnie alegremente, aplaudiendo con entusiasmo-.

Asentí y las dos nos dirigimos a la puerta. Por supuesto, mi padre ya estaba allí hablando con los chicos en susurros. Le hice una mueca a Bonnie, rezando para que mi padre no ahuyentara a Logam de ella, amenazándolo con destriparlo si la lastimaba. Tyler estaba, por supuesto, acostumbrado a este tipo de cosas así que le estaba sonriendo a mi padre con paciencia.

Saludé discretamente por encima del hombro de mi padre, mirando a Tylem con su esmoquin. Se veía increíblemente apuesto esta noche. Su cita era una chica afortunada. Él no quería en absoluto ir esa noche, pero Bonnie y yo prácticamente lo habíamos obligado a hacerlo, si tenía que someterme a un baile, él también. Lo habíamos juntado con Casie, una preciosa morena que no era del último año. Ella era adorable, del tipo tranquilo.

Técnicamente mi cita era Dylam, pero habíamos acordado todo eso porque no queríamos que Dylam conociera a mis padres, así que Tyler me recogería en su lugar y fingiría ser mi cita. Liam aprobó el plan, al parecer no quería que Dylam conociera a sus futuros suegro antes que él y manchar el apellido Cowell. La brillante respuesta de Dylam fue que el nombre Cowell ya estaría manchado cuando se enterasen que yo había estado acostándome con mi profesor durante varios meses. Sonreí al recordar la conversación; fue un día bastante divertido.

Cuando mi padre dio un paso atrás e invitó a los chicos al vestíbulo, Tyler sonrió.

-¡Mis chicas están genial! -dijo Tyler con entusiasmo-.

Sonreí y antes de que pudiera responder, me entregó un gran ramo de lirios y rosas blancas. Jadeé, mirándolo con los ojos muy abiertos ¿Son de él?

-Esto.. gracias -murmuré, cogiéndolo de sus manos y echando una mirada inquieta a Bonnie -.

Ella estaba demasiado ocupada comiéndose a Logam con los ojos para darse cuenta de mi malestar, sin embargo. Él dio un paso más cerca de mí, sonriendo felizmente mientras sostenía una caja que contenía un pequeño brazalete blanco. Mi padre había desaparecido a buscar la cámara o algo, así que tomé mi oportunidad para interrogar a Tyler.