Capítulo 39

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-Uff, suerte que te diste cuenta de lo que tramaban -suspira Akane con alivio cuando nos reunimos en los vestuarios luego del partido, el cual terminamos ganando al descubrir sus jugadas.

-Sí, ¿cómo supiste que harían eso? -pregunta ahora Jin.

-Lógica -respondí simple y con una sonrisa por haber pensado bien.

-Bueno, gracias a que eres buena con la lógica... ¡Ganamos el partido! -Emiko me abraza por el cuello desde atrás hasta casi ahorcarme.

-¡Sí! Ahora solo falta la semifinal y la final -menciona Ima emocionada al igual que las otras y provocando que Emiko apretara más el agarre en mi cuello.

-Emiko... nos dejarás sin capitana -le avisa Akane consiguiendo que ella me soltara al ver mi rostro morado por la falta de aire.

-Lo siento, lo siento.

Suspiré tomando una gran bocanada de aire para recuperar el que perdí, pero entonces pensé en las palabras de Ima y que estábamos tan cerca de terminar el torneo. Me abracé a mí misma.

-Llegamos muy lejos chicas... -comenté llamando la atención de las demás.

-Sí, lo hicimos... gracias a ti, capitana.

-No, lo hicimos gracias a todas -respondí atrayéndolas para un abrazo grupal que casi nos hizo soltar lágrimas... bueno, no mentiré, sí lloramos-. Lo hicieron muy bien hasta ahora, no puedo pedir un mejor que equipo porque nadie las puede alcanzar.

Nos separamos para vernos entre todas y notar los ojos rojos por el momento emocional que agarramos. Sollozaban un poco y se limpiaban, pero todas compartíamos una sonrisa amplia. Finalmente terminamos de cambiarnos y salimos del vestuario y luego del gimnasio, seguíamos hablando hasta que Akane apoya su mano en mi hombro.

-Bueno, allí vienen tus amigos cuervos. Nos vemos luego -menciona ella sonriendo. Miré atrás para comprobarlo, vi al Karasuno acercándose y yo sonreí nuevamente.

-Está bien, nos vemos chicas -me despedí para irme hacia ellos. Hinata es el primero en felicitarme con un salto nuevamente emocionado-. Gracias, chicos, lo aprecio.

-Estuviste muy bien -comenta Suga-. Fue como si previeras el partido y supieras lo que harían.

-Fue solo lógica -respondí un poco apenada.

-¿Ló...gi...ca? -Hinata y Kageyama ladean la cabeza sin entender. Me reí un poco fuerte y apoyé una mano en el hombro de ambos.

-Que ellos les expliquen -respondí.

Nos dimos vuelta al escuchar a algunas chicas y vi lo mismo que con las chicas anteriores. Oikawa rechaza a las chicas que quieren colmarlo de más regalos. Los chicos del Karasuno, al ver eso, dejaron caer su mandíbula hasta el suelo. Kageyama era el más sorprendido.

-El Gran Rey ha... ha... -Hinata igual estaba sorprendido. Reí un poco y me crucé de brazos mientras miraba hacia Oikawa que se disculpaba con las chicas y se alejaba de ellas.

-Sí... cambió -murmuré terminando con la oración de Hinata. Sentí un brazo sobre mis hombros por sorpresa.

-Y yo creo saber el por qué -Yui me sonríe al aparecer, la abracé enseguida-. Felicidades por ganar el partido, otra vez.

-Gracias -respondí riendo un poco al igual que ella.

-¡Michimiya-san! -Hinata llama su atención notándose curioso- ¿Por qué el Gran Rey cambió?

Yui me mira de reojo y yo aparté la mirada sonrojada, mientras que el pelinaranja seguía esperando por la respuesta.

-Bueno Hinata, digamos que ahora solo piensa en una persona en específico -responde Yui dándome ligeras sacudidas.

-¿Huh? ¿En quién? -sigue preguntando.

-Está bien Yui, ya dijiste mucho, lo siento Hinata te dejamos con la duda -dije tapando la boca de Yui apresurada-. Tengo que irme. Nos vemos chicos -me despedí de ellos agarrando de nuevo mi bolso que había dejado en el suelo.

-¡Adiós _________-san!

Volví a despedirme con la mano mientras me alejaba hacia Iwaizumi, Oikawa, Takahiro y Matsukawa, al llegar con ellos me tiré sobre Iwaizumi tomándolo por sorpresa al treparme a su espalda.

-Hola muy buenas -saludé sonriendo.

-Oye, bájate -exige el amargado este.

Antes de que siquiera pudiera responder, Iwaizumi me tira de su espalda, y yo, como muñeca de trapo, me caí. Sin embargo, me sujetan justo antes de chocar contra el suelo.

-¡Iwa-kun, idiota! -lloriqueé.

Me equilibré y vi tras de mí a Oikawa, quién había sido el que me atrapó en mi caída. Me sonrojé sin poder evitarlo pero le sonreí ampliamente.

-Gracias, Oikawa -dije dándole un poco de espacio.

-Por nada _________ -responde correspondiendo a mi sonrisa.

-_______-san, ¿Cómo estás para mañana? -pregunta Matsukawa sacándome de mi ensoñación con Oikawa y nuestra hipnosis ocular mutua.

-Nerviosa, pero ¿quién no lo estaría? -cuestioné sujetando mi brazo.

-Estarán bien -asegura Iwaizumi despreocupado.

-Sí, ustedes son geniales -afirma Takahiro. Les sonreí agradecida por su confianza y halagos, me hacía un poco de falta para no estar tan nerviosa.

En ese momento escuché que me llamaban desde atrás, y cuando me di cuenta vi a mis padres esperando por mí para llevarme a casa.

-Tengo que irme, adiós, chicos -me despedí de ellos pero sonriéndole un poco más al capitán que me regresó la sonrisa.

Corrí hasta mis padres quienes, al igual que los demás, me felicitaron y me dijeron que estuve muy bien en el partido. Yo estaba tan cansada que decidí por acostarme en la parte de atrás del auto y dormir allí.

CAPITANES || Oikawa Tooru x Tú ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora