One Shots GTA +18

Volkacio

Noche Buena.

Volkov sa encontraba sentado en un sillón, esperando a su preciado novio, se había metido al baño le dijo que le tenía un regalo de navidad, y allí estaba sentado con una erección. La estaba acariciando por encima del pantalón, masajes suaves.

Se abrió la puerta y salió Horacio tenia una falda roja con bordados de peluche balnco, la falda le llegaba hasta media nalga, un corto rojo, igua con bordado y tirantes de peluche y blanco, una medias blancas hasta el muslo que conectaban con unos listones que la falda.

Volkov sentía que se asfixiaba, la corbata lo ahorca, el pantalón le apretó, parecía que lo podía romper por la erección que se le formó, le faltaba el aire.

Quiere poseer a Horacio, quieria penetrarlo hasta que le doliera.

-Vik, ¿Este es mi regalo de navidad?- se acercó para ponerse de rodillas y acariciar la creciente erección.

-Te voy a dar leche y galletas- le acaricio sus cabellos, para invitarle a seguir.

Seguía amasando la erección, quitó una mano para retirar el cinturón, desabotonar el pantalón y bajar el cierre. Volkov subió un poco las cadera para que Horacio pudiera quitar el pantalón y la ropa interior.

Dejaba besos en sus muslos internos, unos besos y otras mordidas, succiona todo lo que este a su alcance. Los jadeos de Volkov lo incitaban a seguir. Subió hasta la zona uve, Volkov movía sus caderas impaciente.

Escupió en su mano para agarrar la erección y acariciarla, hacia movimientos de arriba abajo, mientras veía como se acumulaba el líquido pre seminal en la punta, veía como se abría ligeramente para sacar el líquido.

Acerco su boca y lamió todo el liquido, con su mano lo levantó un poco y aceleró sus movimientos, agarro un testículo y se lo metió a la boca y soluciono, lo mordió ligeramente. Eso hizo que Volkov sacara un gemido desde el interior de el.

Dejo el testículo y lamió todo el largo, desde la base hasta la punta, dejo un beso y se lo metió hasta el fondo de una estocada.

Volkov se sentía en el mismo cielo, la caliente lengua de su novio, la forma en lo que apretaba, la humedad, que fuera Horacio quien lo estuviera haciendo, era el por que lo disfrutaba tanto, soltando gemidos y jadeos.

Horacio metió una mano bajo la falda, saco su erección y le empezó acariciar, suavemente, con su cabeza de arriba para abajo, lo que no alcanzaba con su otra mano, y aveces la bajaba hacia los testículos para jugar con ellos.

Sintio como el pene se hacía más grande y duro, estaba apunto y el quería su leche, acelero los momentos, y Volkov llego al orgasmo, haciendo su cabeza hacia atrás soltando otro gemido, que pudieron escuchar los vecinos.

Se corrió dentro de la boca de Horacio, y el gustoso se lo tomó, lo disfrutó tal manjar.

Se paró y beso a Volkov, dándole probar de el mismo, se sentó a horcajadas del Comisario. Volkov metió sus manos debajo de la falda, las acaricio y apretó, las separo y el calzón que tenía lo movió hacia un lado, acarició su entrada, dejó el beso para descender po su cuello, sacó sus manos de allí, y le quitó el top que tenía puesto, se separó para así poder sacarlo, y bajar más hacia los botones.

Tenia a Horacio agarrado de la espalda, para que no se cayera, encorvada su espalda y se dejaba caer hacia atrás. Volkov ha tenido pocas experiencias sexuales, pero conocía sus puntos sensibles, y como hacerle disfrutar.

Subió hasta su boca, ahora con una manos lo sostenía, se besaban como si su vida dependiera de eso, se separaron, y acercó tres dedos hacia la boca del menor.

El los chupa, como antes al pene de Volkov, lo hace entre los dedos, succiona y muerde, los saca hasta que siente que ya están los suficientemente tes húmedos. Con la otra mano hace que se pare.

-Soltnse, desnudate para mi- Tiene las pupilas dilatadas.

Y el como un buen novio, sacando su lado sumiso lo hizo, se acabó de doblar las rodillas y se sacó la falda junto su ropa interior, cuando se agachó pudo ver desde adelante su trasero, se sacó las media y se volvió acercar.

-Vik, no estamos en mismas condiciones, tu todavía tines tu camisa- Le hizo un puchero

-Quitala tu- le dio besitos en el puchero.

Mientras el acercaba sus dedos húmedos, Horacio le deshacía el nudo de su corbata pra hacerla y desabotonar su camisa.

Volkov acariciaba la entrada para adentrar un dedo de golpe, lo movía en círculos, para agrandar la entrada y así adentrar un segundo dedos, hacia movimientos de tijeras.

Horacio soltaba jadeos y gemidos, ama los dedos largos y delgados e Volkov, ama ese trozo de carne que luego va a tener adentro, ama su cabello grueso, ama su espalda, ama sus manos, ama su espalda, amo cono con todos es el frío y serio Comisario, pero con el es otra persona, ama sus pequeños ronquidos que suelta cuando duerme, ama cuando le prepara comida y se le quema, ama sus animes, ama la fea canción que escucha, pero por el la escucha y adora, ama sus jadeos y gemidos, ama todo de el, tod lo que compone al Comisario, y no le importa revivir todo lo que han sufrido para estar allí, revivirla, el rechazo, el disparo, la separación, las risas, las pelas, las noches donde ponían anime y con pizza hasta quedar dormidos, las noches donde habían el amor, donde discutieron por que Horacio quiere formar una familia, no me importaba revivir toda su historia, para estar donde esta.

Metió un tercer dedo, simulaba embestidas, Horacio era un lago de gemidos. Hasta que Horacio soltó un grito profundo, le había dado al punto.

Saco sus dedos y levanto a Horacio para adentrar su pene, escupió en si mano y lo acercó para esparcir en su pene y la penetración no doliera tanto.

Acaricio con su glande los pliegues, lo empezó adentrar el glande, Horacio se dejaba caer sobre el pene, descendiendo centimetro a centímetro, hasta que se bajó, soltando un gemido cuando todo estuvo andeteo de el.

Emezo a moverse circularmente, de arriba a bajo, de un lado a otro, hasta que se sintió listo, y Volkov lo agarro de la cadera para hacerle subir y bajar, sobre su largo.

Dando saltos, rápidos y certeros, dando a su próstata, una tras otra, sin detenerse, ahogados en el deseo.

Volkov acariciaba la eternidad de Horacio, para hacerle llegar, el sentía que estaba apunto y quería que terminaran juntos.

Así fue, Horacio rasguño la espalda de Volkov, por los espasmos y así llegaron los do al clímax, Volkov corriendose adentro de Horacio llenándolo, y Horacio manchando los dos pechos.

Se dejó caer sobre el, no tenía energías, Volkov se encargó de limpiarlo y recostarlo en la cama.

-Vik Feliz Navidad-

-Feliz Navidad- y se dieron un beso para ais poder dormir plácidamente