Capítulo 20: Al menos los calabozos no cambian.

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Después de que nos sacaran de la universidad, fuimos llevados a una prisión subterránea, se me colocó una cadena para intentar bloquear a Nyan, mientras Tadeo que fue llevado conmigo simplemente fue encerrado en aquel sitio junto a mi.

-Realmente lamento tal inconveniente mi estimado amigo. -Decía apenado el investigador.

-No te preocupes estas cosas pasan, a todo esto ¿Qué planean hacer con nosotros? -Pude ver al tipo a mi lado dudar por un segundo antes de responder.

-Pues lo más seguro es que yo sea ejecutado por el crimen de falso profeta, mientras que en cuanto a ti, tratándose de un individuo tan extraño... probablemente te diseccionen para investigar. -Ok, eso no suena bonito.

-Pero, primero nos darán un juicio y eso ¿No? -Pregunté un poco temeroso.

-Nuestro juicio ya fue dado en la universidad, lo más probable es que pasen directo a la sentencia. -Ok, me dejé capturar porque pensé que con esto podría contactar más fácil con el rey o lo que sea que maneje este sitio de forma fácil, pero por lo visto tendré que tomar el plan B.

-Nyan ¿Puedes romper estas cadenas? -En eso la niña gato reapareció frente a mi.

-Claro, estas cosas no son rival para miau fuerza. -En ese momento ella me hizo pararme de golpe y sin previo aviso, me abrió de piernas al completo... no voy a mentir, se me salió una lágrima, o quizá varias.

-¿Por qué? -Decía casi llorando. Tras eso esta me levantó de inmediato, lo que me percató de que los grilletes de mis piernas ya estaban rotos, por su parte, la cadena superior fue más fácil, solo un movimiento rápido y Nyan la partió al instante, casi golpeando a Tadeo en el proceso, por lo visto en espacios reducidos Nyan tendría problemas.

-Déjamelo a miau. -Dijo, tras ello volvió a envolverse sobre mi torso y controlando mi cuerpo, se acercó a la puerta, donde con una patada de taekwondo, la cual ni siquiera pude ver pese a ser quien la hizo, Nyan partió la puerta de la celda.

-Ok, compañero una última pregunta ¿Hacia donde se encuentra el rey? -Ante esto mi nuevo amigo se mostró temeroso.

-¿No estará pensando matarlo? -Dijo mientras retrocedía.

-No... pero necesito que revoque nuestra sentencia. -Dije mientras veía que algunos guardias se acercaba, en ese momento Nyan apareció en mi hombro y me guiñó, tras ello, mis piernas se movieron tan rápido que ni lo noté, para cuando me percaté de ello, ambos soldados estaban en el suelo y yo acababa de patear sus cabezas, ante esto el investigador a mi lado solo me miró sorprendido.

-El rey está en el centro de la ciudad, estamos en el borde exterior, así que tendrás que recorrer todo el camino recto al centro. -¿Así que el calabozo no estaba en el castillo? Supongo que tenía sentido, tras eso asentí mientras miraba a Nyan.

-¿Qué me dices? ¿Quieres irrumpir un castillo?

-Nyan -Dijo sonriente, antes de partir miré al señor Rose10 una última vez.

-Solucionaré esto, lo prometo. -Con eso dicho partí de inmediato hacia el exterior, los guardias tenían más rango y en los pasillos de piedra no tenía demasiada ventaja, pero Nyan en su forma látigo podía sacarse de encima mucho más fácil a todos. Me tomó cerca de 20 minutos salir de allí, los guardias, pues lo lamento por ellos, pero si se metían en el camino los derribaría, el castillo era un objetivo claro, así que corrí movido por Nyan, a una velocidad inhumana, al punto que era incluso más rápido que los autos de vapor que usaba esta gente, pero debo decir que mis piernas lo estaban sintiendo.

-Nyan, debemos detenernos un momento. -Dije cuando sentí como mis músculos comenzaban a fallar, por suerte para mi, Nyan comprendió rápido, por lo que nos ocultamos en un callejón, cuando Nyan liberó mis piernas, pude ver que mis músculos realmente la estaban pasando mal, un ejercicio de este nivel con un cuerpo como el mío, no era una tarea fácil, en ese momento, una voz me interrumpió.

-Cuando vi lo que pasó en la prisión, supuse que estarías cerca. -En eso lo vi, ese joven rubio yd desalineado de antes, Rodríguez se encontraba frente a mí con una espada enfundada.

-Parece que tendré que enseñarte sobre la importancia de las normas APA a la mala entonces. -Dije mientras me levantaba, a la vez que Nyan volvía a envolverse en mis piernas, no estaban del todo recuperadas, pero estaba claro que el tipo frente a mi, no venía a pedir disculpas...

Mi pequeña Villa en otro mundoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora