Capítulo 132. Encuentro Inesperado

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Cuando el grupo se despertó, la cantidad de bostezos instantáneamente puso a todos en alarma. Instantáneamente se dieron cuenta de que nadie había hecho guardia, dejándolos completamente indefensos excepto por la presencia de su supervisor teóricamente neutral.

Phloria y los demás se sintieron muy avergonzados, pero nada podía compararse con el agotamiento y el disgusto que aún permanecían en sus mentes. A pesar de usar magia de oscuridad para limpiar sus bocas y dientes antes de irse a dormir, todavía podían sentir el sabor del vómito y la sangre.

—¿Cómo se sienten ahora chicos? —Preguntó Phloria.

—Como un trapo sucio. —Friya respondió, haciendo que los demás estuvieran de acuerdo.

» Dios mío, Lith, ¿de verdad te ganas la vida haciendo cosas como esta?

—Sí, es parte del trabajo. —El asintió—. Y pronto será parte de los suyos también, excepto quizás por Quylla. Friya, Phloria, ustedes son Mage Knights, sus espadas no están hechas para asustar o proteger, sino para matar.

» Yurial, como señor feudal y Warden, tendrás las vidas de tus enemigos y aliados en tus manos. Quylla, incluso si eliges convertirte en una académica, como el Profesor Marth o Manohar, aún necesitas saber cómo defenderte.

El grupo reflexionó sobre las palabras de Lith y sobre las implicaciones de la prueba. Se habían entrenado durante años con maniquíes o con compañeros de entrenamiento, sin comprender nunca del todo para qué estaban destinadas sus habilidades.

Linjos estaba obligando a sus alumnos a ponerlos en práctica, a experimentar las consecuencias de sus elecciones hasta ese momento, antes de decidir qué camino querían tomar en su vida futura.

—Antes de movernos, ¿hay algo más que Quylla y yo debamos saber sobre nuestras nuevas armas? —Preguntó Friya. No había culpa ni resentimiento en su voz, pero Phloria se sintió culpable de todos modos.

—Perdón por no decírtelo antes. —Ella se sonrojó de vergüenza.

*Dioses, soy tan estúpida.* Phloria pensó. *Ahora se supone que no sólo soy su líder, sino también su hermana mayor. No enseñarles sobre las espadas personalizadas de los Ernas fue un gran error de mi parte.*

—Es solo que los regalos de mi... quiero decir... nuestro padre y este examen me dejaron tan estupefacta que lo olvidé por completo. Nuestras armas han sido forjadas y encantadas usando una técnica secreta de la familia Ernas.

» Las hace anormalmente afiladas, lo que permite que incluso un arma ligera como el estoque pueda cortar y perforar. Ya no están limitadas a las puñaladas. Siempre que tu oponente no use una armadura pesada, también puedes cortar.

» También las hace lo suficientemente resistentes como para cortar rocas sin daños. Por último, pero no menos importante, tienen una capacidad limitada para cambiar de tamaño para adaptarse a espacios reducidos sin obstaculizar a su portador. Aunque no conozco los detalles. No soy un Forgemaster.

» Quylla, tu cuchillo largo puede convertirse en una espada corta si necesitas más alcance en la batalla.

Quylla asintió con la cabeza, probando el arma por sí misma. Sus movimientos eran incómodos, pero la hoja era liviana y fácil de usar, lo que le daba una sensación de seguridad.

—¿Puedo verla por favor? —Lith extendió su mano hacia Friya, quien le pasó su espada.

Lith usó Invigoratiom en el arma, estudiando su complejo pseudo núcleo. Todavía no era un espadachín, pero incluso él podía apreciar su habilidad. La usó contra una pequeña roca, que se perforó fácilmente produciendo un sonido metálico.

Mago Supremo: Volúmenes 4 y 5Donde viven las historias. Descúbrelo ahora