—Todavía tengo una pregunta, Capitán. —Órdenes o no, Lith no tenía intención de cargar a ciegas. Lo que fuera que estuviera sucediendo dentro del edificio no tenía importancia para él y tampoco la tenía la gente en el sótano.
Estaba allí para el curso del Código de Práctica, lo único que le importaba era su propia seguridad y los puntos.
—Sólo sé rápido, Blanco. —La Capitán Yerna resopló—. Rojo, mantenme informada si pasa algo más.
—Dado que la misión ha cambiado, ¿cuáles son las nuevas condiciones para considerarla un éxito?
—Niño, ¿crees que esto es algún tipo de juego? ¡La gente se está muriendo allí! —Lith podía comprender la justa indignación de Khran, pero de todos modos lo encontraba molesto. El Sargento era un plebeyo, probablemente de origen humilde como él.
A diferencia de Lith, había dedicado su vida a proteger a los débiles.
Qué tipo más irritante, siempre predicando sus propias ideas. Tenía la esperanza de haber dejado este tipo de fanáticos en la Tierra. Lith pensó.
—¿Y qué? - Lith respondió—. No hice ningún juramento, no soy un policía ni un héroe. Estoy interesado en la misión, no en un ideal anodino.
La Capitán Yerna agarró a Khran por el hombro para evitar otro arrebato.
—Sólo tenemos que entrar y verificar el estado de los que están en el sótano. Si son rehenes, liberarlos tiene prioridad. Si son soldados, podemos simplemente dejarlos en el olvido antes de pasar al resto de los guardias. ¿Está claro, todo el mundo?
La unidad asintió al unísono.
—Está bien, entonces movámonos. Tenemos que ser rápidos. No hay forma de llegar a la puerta trasera sin que nadie se dé cuenta, así que prepárense para una cálida bienvenida.
—En realidad, la hay. —Lith agitó las manos en la única magia falsa que realmente usaba. Abrió un Warp Steps que conducía directamente al callejón, en el último lugar a cubierto antes de su destino.
Mucha gente se estremeció de asombro. Para los no magos, la magia dimensional era algo sacado directamente de un cuento de hadas.
—Hoy es nuestro día de suerte, gente. —La Capitán Yerna sonreía de oreja a oreja.
» Cambio de planes. Mi equipo y el de Khran tomarán la delantera y atacarán por la detrás. El resto de ustedes permanecerán en espera hasta que revisemos a los prisioneros. A mi orden, rodeen el edificio. Rojo, conmigo.
Los demás la siguieron por el Warp Steps. Cada unidad estaba compuesta por cinco personas, dejando diez oficiales en el almacén para cerrar el perímetro o actuar como respaldo en caso de necesidad.
—Realmente eres un idiota. —Khran se detuvo un segundo antes de atravesar el pasillo dimensional.
» Sin embargo, los dioses saben cuánto me gustaría tener uno como tú en cada misión.
Una vez en el otro lado, el Sargento conjuró un velo de silencio a su alrededor antes de pedirle a Rojo que lo actualizara.
—Otra fuerza vital desapareció. Ahora sólo hay una persona en el tercer piso.
—¡Maldita sea! —La Capitán Yerna maldijo. Ella esperaba que fuera algún tipo de conflicto interno, pero tres muertes en tan poco tiempo no encajaban en el escenario.
» ¿Qué hay de los guardias de la planta baja?
Rojo se concentró por un segundo, revisando dos veces sólo para estar seguro.
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Mago Supremo: Volúmenes 4 y 5
ФэнтезиDerek McCoy era un hombre que desde una corta edad tuvo que enfrentar muchas adversidades. Constantemente forzado a conformarse con sobrevivir en lugar de vivir, finalmente había encontrado su lugar en el mundo, hasta que todo le fue arrebatado una...