Derek McCoy era un hombre que desde una corta edad tuvo que enfrentar muchas adversidades.
Constantemente forzado a conformarse con sobrevivir en lugar de vivir, finalmente había encontrado su lugar en el mundo, hasta que todo le fue arrebatado una...
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Desde su escritorio, Linjos estaba examinando los datos que llegaban a través de la red mágica de la Academia. Apenas había pasado más de un día, pero el número de grupos que participaban en la prueba se redujo casi a la mitad.
Era mucho peor de lo que había predicho, pero mirando los informes de sus subordinados no podía dudar de que su método era la elección correcta.
*El Profesor Trasque tiene razón, muchos estudiantes no tienen experiencia en combate, necesito invertir más mano de obra y fondos en las clases de 'Teoría de la magia de combate'. El examen simulado ayudó a los estudiantes sólo hasta este punto.*
*El escenario era demasiado simple, y sin ninguna lesión real, muchos de ellos subestimaron los riesgos. El año que viene tengo que presentar monstruos humanoides antes y hacer que los profesores permitan que los estudiantes se lastimen un poco, o volveré al punto de partida.* El pensó.
Su amuleto de comunicación llamó su atención y también la runa brillando debido a la llamada entrante. Linjos no podía evitar estremecerse cada vez que la Reina lo llamaba.
-Su Majestad, ¿a qué le debo el honor de esta llamada? -Se puso de pie y le hizo una profunda reverencia.
-Linjos, ¿cuál es el significado de estos números? ¿De verdad vas a suspender a dos tercios de los estudiantes de cuarto año? -La Reina Sylpha ignoró la etiqueta, ni usó su título ni le dio siquiera un movimiento de cabeza en respuesta.
Su voz no estaba tan enojada como preocupada.
-La respuesta a su segunda pregunta es no. -Respondió con tono firme.
» Sin embargo, la primera es una pregunta complicada y requiere una respuesta compleja. Necesito su permiso para hablar libremente.
-Concedido. -Sylpha asintió sin dudarlo.
-Las cifras nos dicen que dos tercios de los estudiantes son cobardes, mal preparados para el combate, tramposos o todo lo anterior. El veinte por ciento se rindió tan pronto como supieron que sus vidas estarían en riesgo.