Capítulo 22

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La cena continuó sin más complicaciones, decidieron dejar de lado las preguntas acerca de los novios y de sus roles para hablar de anécdotas vergonzosas de Christopher cuando era pequeño; como que creía que sí plantaba dinero crecería un árbol de billetes o la vez que estuvo todo el día llorando porque se había tragado una semilla de sandía y creía que le crecería una planta en el estómago.

Pero ya era lo suficientemente tarde y era hora de volver a casa. Jisung se despidió de los miembros de la familia Bang, quienes le pidieron que regresara nuevamente para poder conversar con él, en especial Hanna, quien había compartido su información de contacto con el rubio, prometiéndole que le hablaría con frecuencia.

Se subieron al asiento trasero del taxi y dado que ninguno tenía ganas de conversar, Jisung sacó sus audífonos y le prestó uno a su amigo para hacer al viaje algo más placentero. Y mientras el menor tenía la vista perdida en la ventana y en la forma en que los edificios desaparecían con el avanzar del auto, Chan estaba totalmente perdido en el rostro de Jisung.

Cada una de sus facciones era un obra de arte; sus ojos, nariz y boca parecían haber sido tallados por el mismísimo Miguel Ángel. Jisung era totalmente perfecto y no había forma de pensar lo contrario.

<<Versátil... ¿eh?>> pensó sin querer hacerlo. Tuvo que apretar los dientes para que imágenes no aptas al público aparecieran en su mente, ya que no quería repetir aquel incidente de mucho tiempo atrás cuando Jisung dormía con él y sin entender razones su amiguito decidió hacer de su noche lo más agozinate que alguna vez pudo haber vivido.

Pasado un tiempo, arribaron en la casa de los Han. La ardilla descendió y detrás suyo lo hizo Chan, dejando al taxi esperándolo ya que quería asegurarse de ver a su amigo ingresar a su casa para estar tranquilo de que de ahora en más estaría en buenas manos.

– Gracias otras vez. – le habló el menor con una sonrisa.

– No fue nada. Tú llámame siempre que me necesites y veré qué hacer para ayudarte ¿sí?

– Creo que nunca podría terminar de agradecerte por lo bueno eres conmigo. – Sung abrazó a su amigo por la cintura y este lo correspondió. – Eres un buen amigo, Chan.

<<Auch.>>

Pero estaba bien así. Él y Jisung eran simples amigos, no habría modo de cambiar de cambiar la naturaleza de la relación que los unía. Los dos estaban en pareja y más allá de los conflictos internos de Chan acerca de su sexualidad, era más que obvio que Sung estaba perfectamente feliz con su novio y que nunca miraría en su dirección.

Y aunque lo sabía deseaba pasar todo el tiempo junto a él.

– Oye. – se separó del chico. – El equipo de fútbol pasó a semifinales ¿Te gustaría ir conmigo a ver el partido?

– No sabía que teníamos equipo de fútbol. – comentó el chico riéndose ¡Como se notaba que Chan era popular y él no! – ¿Cuando es?

– El sábado a las 6 P.M.

– ¿Solo tú y yo?

<<¡¿SÓLO NOSOTROS DOS?!>> Chris tuvo que aguantarse las ganas de gritar. No había pensado en ello.

Carraspeó para aclarar su garganta. – Como tú quieras. – concedió. – Puedes invitar a Minho o los chicos si gustas.

Jisung decidió meditarlo un poco y llevó los dedos a sus labios para eso, acción que llevó a Chan a tragar saliva. – Mhh está bien. – aceptó. – ¿Pasarás por mí?

– Por supuesto.

– Entonces es una cita. – rió y le dio la espalda encaminándose hacia su casa. – Nos vemos Chan. – se despidió agitando la mano y el otro lo imitó.

Triángulo || STRAY KIDSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora