Un interés inesperado [SeroBaku]

Capítulo 20

La clase A ganó con veinte minutos adicionales la búsqueda del tesoro en parejas y algunos con unos cuantos rasguños causados por lo más difícil para todos que fue la escalada a la montaña.

No había mayor premio que el reconocimiento de que eran una clase fuerte y con un alto nivel de compañerismo entre ellos que les ayudo a sobrepasar las dificultades. Pero por haber encontrado el objeto especial Kota Izumi -el cenizo y el azabache se llevaron una sorpresa por eso- tuvieron un premio que consistía en postres de su elección traídos por un restaurante profesional.

Oh, la victoria era dulce. Nunca mejor dicho.

Las femeninas y Sato estaban encantados y con deseos de que llegara la noche para poder tener sus postres. Midoriya también lucía contento aunque no fuera tan fanático de lo dulce y en cambio, los demás solo estaban contentos de los collares y las fotos que habían obtenido. Incluso un par las intercambió entre ellos como si se trataran de figuritas de algún álbum.

Bakugou estaba junto a Kirishima, liberado del hilo rojo que lo ataba a Sero -tarde se habían dado cuenta los dos de ese detalle- y estaba viendo con una ceja alzada la negociación que estaba llevando a cabo con Tokoyami por una foto en particular.

- ¡Por favor, hermano del lado oscuro! -rogaba el pelirrojo.

El azabache le miraba con pena y luego a su foto. El cenizo no podía saber que tenía pero sería mentira decir que no sentía curiosidad. Por otro lado, la foto de Eijirou era de uno de los eventos deportivos de fútbol.

¿Por qué quería cambiar esa foto?

-Esta bien -termino por aceptar Fukumigake -Ten, Kirishima.

- ¡Muchas gracias!

Katsuki se inclino ligeramente por sobre el hombro del pelirrojo para ver la foto y abrió los ojos con sorpresa al ver quién salía en ella.

Era Momo, sentada sobre un tronco hablando tranquilamente con Kyoka. Llevaba un vestido blanco y tenía el cabello azabache suelto cayendo en cascada por sus hombros. Por lo oscuro de los bordes debía ser una foto tomada minutos antes de la cena.

El cenizo miro con una ceja alzada al pelirrojo y cuando él noto eso, escondió la foto tras su espalda y puso sus manos sobre su rostro a modo de protección como hacía cierto pecoso cuando estaba nervioso o avergonzado.

- ¡N-No es lo que crees, Blasty! -negó con la cabeza el pelirrojo -E-Es que Yaoyarozou quería una foto con sus amigas y en el árbol que vimos no la encontramos. Por eso se la pedí a Tokoyami para poder dársela a ella, ¡n-no es para mí!

Bakugou se rió un poco, algo que tomo con la guardia baja a Kirishima y tuvo que cubrir su rostro pero fue tarde porque su amigo ya lo había notado.

- ¡Te reiste! -exclamo emocionado el pelirrojo - ¡Es la primera vez que te oigo reír!

-Fue a causa de tu estupidez, no sé que te da tanto orgullo -se dejo de reír el cenizo y limpio una lagrimita que quería salir de sus ojos -Ve a darle la foto a la cola de caballo. Antes de que empiece el torneo de boxeo.

- ¡Oh, cierto! ¡Gracias por hacerme acordar! -sonrió Eijirou - ¡Tienes que venir a verme!

Katsuki se encogió de hombros en señal de que estaría ahí. El boxeo le gustaba pero no tanto como para participar de las competencias. Aparte, el único peleador que valía la pena para él era el pelirrojo que tan alegremente se había ido y prefería ver sus encuentros que ser participé de ellos.

-Kacchan, ¿que es eso?

La sorpresiva voz de Izuku le hizo ladear la cabeza. El pecoso llevaba las flores azules en su mano derecha y con la izquierda apuntaba al centro de su pecho. Con tranquilidad acortó distancias para ver más claramente qué era.