Un interés inesperado [SeroBaku]

Capítulo 27

[Sé que suena repetitivo pero realmente, muchísimas gracias a todos los que leen está historia y votan, comentan, dejan amor en ella. Me hacen infinitamente feliz]

— ¿No...vendrá?

La pregunta fue hecha en un tono tan titubeante que Kirishima dudo por medio segundo que se tratara de su amigo. Pero frente él estaba la prueba de que sí era su amigo quién le estaba hablando, con el ceño fruncido y una falsa actitud desinteresada.

Era la quinta vez que Sero no venía a una salida entre ellos.

Era la primera vez que Bakugou preguntaba de frente sobre eso.

No supo que contestarle si bien sabía la razón de la ausencia del azabache y está no era difícil del explicar, ver el rostro tan triste de su amigo le hizo sentir profundamente mal.

—Oye, Bakugou. Es tu turno —interrumpió Kaminari la conversación con una sonrisa y un guiño de ojo —A ver si superas mí puntaje.

El cenizo rodó los ojos y acepto el control de mando que le extendía el rubio, olvidando a agrede la conversación que había mantenido con el pelirrojo. El de ojos dorados sonrió una vez el mayor estuvo distraído y luego miro hacía los ojos rojos de su otro amigo.

No había rastro de sonrisa.

Eijirou soltó un suspiro y cuando Denki se paró, lo siguió. Estaban en la casa del rubio, jugando videojuegos y pasando un buen rato aunque al inicio el plan era que el cenizo les ayudará con sus tareas.

Habían pasado cuatro semanas desde la fiesta para los graduados de tercer año, tres semanas desde navidad, dos de año nuevo y una más dónde no habían visto a Hanta para nada. Y aunque el azabache contestaba sus mensajes y les llamaba, lo hacía a horas esporádicas desde de un par de días.

Además, por el estado del cenizo se podía asumir que él era el único en no tener noticias sobre su querido amigo.

El rubio suspiro cuando bajó hasta la pequeña cocina de su casa y como buen anfitrión que era preparo un par de tazas de chocolate caliente junto con galletitas de limón. En lo que se calentaba la leche para derretir el chocolate, dirigió una mirada significativa al pelirrojo y comenzó con sus teorías.

— ¿Habrán peleado? Yo no recuerdo mucho de lo que pasó en esa fiesta pero desde entonces que están así, ¿no? —cuestiono hacía su amigo —Aunque no se me ocurre alguna razón para una pelea entre ellos.

—A mí tampoco —suspiro el pelirrojo —Sero nos dijo que consiguió trabajo y por eso no puede salir con nosotros pero...eso no es excusa para no hablar con Bakugou.

—Claro que no. Tiene que decirle a nuestra querida madre —bromeo el de ojos dorados para aligerar la situación —Que ya es un hombre hecho y derecho. Con empleo, novia...¡oh! ¿y si es eso?

El pelirrojo ladeó la cabeza en señal que no entendía lo dicho por el de ojos dorados.

—Que tiene novia, Ei —enfatizo Kaminari —Tal vez por eso tarda tanto en contestar y no nos puede venir a ver. Porque está con ella.

—Tú también sales con Todoroki y estás aquí con nosotros.

Kirishima se lamento haber sido tan brusco con sus palabras cuando vio como todo el rostro de su amigo se ponía completamente rojo. No sabía cuando exactamente el rubio y el bicolor habían empezado a salir pero estaba muy contento por ambos ya que se les veía felices.

Pese a que la sola mención de la relación lograba hacer que el desvergonzado rubio se pusiera tan rojo como tomate.

— ¡E-Es diferente! T-Todoroki y yo...bueno, no nos importa que el otro salga con sus amigos porque confiamos el uno en el otro —murmuro Denki —Pero no quiere decir que todas las parejas sean así. Y yo sinceramente...no me gusta a veces verlo con Yaoyarozou.