Capítulo 28

1.5K 243 206
                                    

No muchos eran los estudiantes que festejaban la vuelta a clase. En sí, los que estaban más contentos eran los de nuevo ingreso.

Bakugou no podía decir que volver a Yuei era algo que esperaba con ansias. Pero sí, debía admitir que extrañaba un poco el ambiente de la preparatoria y...el hecho de tener una oportunidad para verlo.

A Sero. Le daría un buen golpe al maldito apenas estuviera en su rango de ataque.

Resulta que después de su primer llamada en las vacaciones de invierno, no hubo otra. Solo mensajes cortos y dados cada tantos días. Claro que le contestaba pero le enojaba el no ser capaz de no haber podido escuchar su voz ni poder maldecirlo de frente.

Si hubiera una palabra para definir su sentir respecto a eso sería frustrante.

—Buenos...días, Bakugou-kun.

El cenizo volteo hacía un costado dónde Uraraka le daba una media sonrisa y apretaba su bufanda contra su cuello, para ajustarla. El invierno estaba por irse en cualquier momento pero aquel día era especialmente frío y causaba sueño en los jóvenes, en especial, en la castaña quien se preguntaba internamente porque no se había quedado dormida en su casa por un día más.

— ¿Te caíste de la cama? —pregunto con burla el de ojos rojos pero la femenina no estuvo de humor para contestar, solo fue hasta su lado y al igual que él se apoyó en el muro de la preparatoria — ¿Uraraka?

—Tengo mucho sueño, despiertame cuando llegue Iida-kun —pidió la castaña y se apoyó en el hombro del cenizo —Gracias.

Katsuki gruño con fastidio pero no se movió. No podía hacerlo cuando ya la femenina estaba durmiendo de pie y usándolo como soporte. Debido a eso, recibió varias miradas indiscretas que eran ahuyentadas con sus ojos rojos desafiantes.

Para su suerte, hasta donde sabía el estirado era bastante puntual y estaría buscando a sus amigos cuando llegará al edificio. No tendría que cargar con la femenina demasiado rato.

— ¿Que están haciendo?

O mejor, ni tendría que cargar con ella más tiempo del necesario.

Katsuki miro con una ceja alzada a Mina quien tenía un abrigo rosado y el ceño curiosamente fruncido en desagrado por lo que estaba viendo.

— ¿Celosa? —se burlo pero después agrego —Ven por ella, entonces. A mí ya me está doliendo el hombro.

La recién llegada no tardó en seguir sus palabras por dos motivos. Sí, estaba celosa de que su amigo tuviera esa cercanía con Ochako. Y dos, quería ser ella quien velera por el sueño de la castaña.

El cenizo fue bastante gentil al momento de invertir posiciones y la de ojos chocolate si bien sintió un perfume familiar cuando fue depositada en el hombro de la otra femenina, solo suspiró a gusto y se quedó quieta, siguiendo con su sueño ligero.

La de cabello rosa sonrió amorosamente y luego miro hacía el cenizo sin el enojo que había usado antes.

—Kaminari viene con Todoroki, se quedó a dormir con él ayer —comento divertida por la anécdota —Y creo que Kiri se desvelo anoche haciendo las tareas, así que llegara tarde. Sero me mandó un mensaje diciendo que estaba en camino, ¿no lo has visto?

—Para nada —bufo el cenizo con obvio disgusto por ese hecho — ¿Tenías una razón para llegar temprano hoy?

Después de todo, la femenina de cabello rosa no era lo que se pudiera considerar puntual.

Cómo si fuera una respuesta, Ashido acaricio el cabello castaño de Uraraka.

Bakugou no necesitaba preguntar más.

Un interés inesperado [SeroBaku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora