Capítulo 46

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Sero se pregunta si es su idea o no que los ojos rojos de Bakugou estaban algo brillantes cuando giro su cabeza hacía él. Tenía la boca abierta, como si estuviera por besarlo y él esperaba eso, pero a último momento se detuvo.

El azabache vio los hermosos y carnosos labios apretarse en una fina línea para luego ver el rostro sonrojado de su novio.

Algo estaba mal con él pero, ¿que era?

— ¡Chicos, ya elegimos una película! —anuncio Kaminari — ¡Será la Cabaña del Terror! Y luego La Llamada o Anabelle. Ah, también veremos algunas originales de Netflix, ¡haber que tan buenas son!

Hay expresiones temerosas entre los estudiantes. El más contento por las películas parece ser Tokoyami y el más aterrado Koda. Iida les pide a todos que se vayan eligiendo un lugar y después se va junto con Midoriya a traer la comida.

Hanta toma eso como señal para soltar a su novio y verlo de frente correctamente. Katsuki sigue con el rostro rojo y en un silencio que es algo inquietante. Cómo todos están peleando por los mejores lugares, ninguno es capaz de saber que empieza a arrinconar al más bajo contra la pared y que pone sus brazos a los costados de su cabeza para evitar una huida.

—Katsuki, ¿estás bien? —interroga con preocupación el azabache —Te pusiste muy rojo, ¿te dio fiebre o algo? ¿quieres irte?

—Sí, pero no por una estúpida fiebre...—murmura el cenizo.

— ¿Que? Lo siento, no te escuche —dice el más alto — ¿Puedes repetirlo?

Bakugou gruñe y maldice no poder decir que es lo que quiere. Entonces, se conforma con enroscar sus brazos alrededor del cuello de su novio y tirar hacía abajo. Lo besa rudamente, esperando que eso calme un poco el calor que está sintiendo por dentro.

No sirve. Las llamas incrementan. Sus lenguas pelean por un dominó que ninguno de los dos sabe imponer y las manos del azabache se ponen sobre su cintura, tentativamente se van metiendo bajo su ropa. Él puede sentir su piel caliente por la emoción y el cenizo detesta eso por lo que lleva una mano hacia el cabello azabache para jalarlo con brusquedad. Las manos le aprietan los costados de la cadera en respuesta, al azabache le dolió la jalada en su cabello y esa es su forma de hacerselo saber.

Si supiera que esa forma solo calentaba más a el de ojos rojos quizás no lo habría hecho. O quizás sí y con más fuerza.

Sero es quien termina el beso y lo ve claramente conmocionado. El cenizo no sabe que decirle, sus piernas están débiles y de milagro nadie aún los había visto. Y él pensaba mantenerlo de esa forma, por lo que da un pequeño empujón a su novio para dejar de estar contra la pared y camina hasta la sala.

Casi inmediatamente Kirishima va tras él. Con el traje de dragón aún puesto pero sin la cabeza y cola, porque sino no entraba en el sofá. El pelirrojo nota que está algo aturdido porque le ve con una ceja alzada, el cenizo trata de volver a respirar con normalidad y que el rubor baje de su rostro.

Los ojos rojos de su amigo ven sobre su hombro. Debía estar viendo al azabache. Por primera vez sus neuronas parecen conectar porque no dice nada al respecto, va a abrazar al cenizo y le dice que se sienten juntos en el sofá para ver la primera película.

Katsuki no se niega a sentarse con Eijirou. Y Hanta se sienta junto con Denki que estaba sobre el regazo de Shoto.

La clase A internamente se pregunta si ha habido una pelea entra la pareja—pelea que ellos no han visto para nada— para que se sienten en distintas puntas de la sala y junto con sus amigos. Los hace sentir curiosos y algo inquietos, porque los que más conocen a los involucrados están en calma.

Un interés inesperado [SeroBaku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora