Dulce Caos

45. El hilo rojo

— si vuelves a moverte voy a golpearte, te lo advierto - le digo a Monett mirándola mal mientras intento cerrar la cremallera de su vestido de novia, el corte sirena le queda divino pero ella no para de removerse ante los nervios y complica mi trabajo, además de que mi vestido de dama de honor no me da mucho margen de movimiento

- Nia, me va a dar un paro cardíaco en los siguientes minutos - comenta mi tía accediendo a quedarse inmóvil y al fin puedo subir el cierre sin problema

- Moni, se que estás embargada de mil sentimientos ahora mismo pero esta es mi mejor oportunidad para darte las gracias por abandonar una vida normal solo para cuidar de mi - Monett gira sobre su eje para quedar de frente conmigo, sus ojos se humedecen y yo tomo sus manos entre las mías con todo el amor que siento por ella - lo abandonaste todo para quedarte junto a mi, tu me convertiste en la buena persona que soy ahora, a ti te debo conocer el mejor lado de la vida, fuiste la mejor mamá que la vida pudo darme después de tanto daño, y a pesar de nuestras peleas y gritos no cambiaría absolutamente nada a los últimos doce años de mi existencia, pasaría todo otra vez si es junto a ti, te amo, tía Monett

- yo te amo mucho más, Nia - es todo lo que puede decir abrumada por las ganas de llorar, nos abrazamos con fuerza, mostrando así todo el amor que podemos sentir por la otra, porque durante más de una década nuestra familia fue simplemente nosotras dos y Tomy

- vas a arruinarte el maquillaje, no llores - sonrío limpiándole las mejillas con suavidad, ella asiente con la cabeza y toma el ramo de orquídeas blancas que había dejado sobre la mesa

La boda se realizará en la hacienda de los padres de Jacobo, nosotras estamos en una habitación que dispusieron para arreglar a la novia, que ahora luce estupenda, las damas de honor somos cinco, todas con vestidos similares de color rosa pastel, ensayé durante semanas para no pisarme el borde del vestido y pasar vergüenza. Todo por Monett.

- ¿Listas? - la voz de mi padre se hace presente al otro lado de la puerta

- así es - respondo por mi tía y él ingresa ataviado en un elegante traje de etiqueta color negro

- Dex, muchas gracias por aceptar hacer esto - la novia llorosa abraza a mi padre, él que esta dichoso por ser quién la entregará en el altar solo puede sonreír emocionado

- eres como una hija, Monett, no podría negarme a entregarte el día de hoy - le dice ofreciéndole el brazo que ella acepta gustosa

- me iré ahora porque yo ya debería estar con las demás - comento antes de perderme por el pasillo y salir de la casa, el jardín que esta decorado de manera preciosa me distrae un segundo antes de caminar hacia las demás damas de honor junto al altar que mandaron a construir a un costado de la casa

Aurora, Johana, Alicia e Irina se ven hermosas y todas sonríen ampliamente cuando me posiciono entre la pelirroja y la ojiverde, unos segundos después la marcha nupcial inicia y Charlotte junto a la adorable sobrina de mi padre aparecen en la alfombra roja tirando pétalos de rosas, ambas están vestidas de blanco y tienen las mejillas sonrojadas por la emoción, pasos atrás la novia luce hermosa.

Mi mirada se cruza con la de Damien, él me guiña un ojo y yo sonrío en su dirección mostrándole los dientes, mi mirada cae en Jacobo que parece que va a ganarle con esa sonrisa al gato del país de las maravillas. La ceremonia transcurre hermosa y sin complicaciones, en la recepción los ahora esposos abren el baile con un vals, varias parejas nos unimos después, bailo la pieza suave junto a Damien que me sostiene como si estuviera hecha de cristal y en cualquier momento pudiera desaparecer entre sus brazos.

Después del banquete todo es alegría, Irina se le declara a Giancarlo al ver que muchacho no tiene el valor y reciben un grito de júbilo mientras se dan un beso en medio de la pista de baile, Alicia es quien más escándalo hace animando a nuestra amiga, yo me quedo sentada un buen rato junto a Mary que me cuenta sobre su amiga imaginaria y el mundo de los unicornios, mi pequeña prima es una cosita igual de tremenda a mi, después su mamá viene a buscarla y mi atención cae en Charlotte que desea que baile con ella una canción movida.

No puedo decirle que no a Charlotte.

- me alegra mucho que Alicia se volviera tu amiga - me dice la niña mientras da una vuelta sujeta a mi mano al ritmo de la música

- a mi también me alegra - le respondo sonriendo

- ¡La novia va a arrojar el ramo! - avisa Mary poniéndose de pie sobre una mesa siendo sujeta por las manos de mi padre para que no vaya a caer mientras hace su anuncio

Todas nos reunimos en un grupito a un metro detrás de mi tía que sonríe sujtetando el ramo de orquídeas, nos preparamos para luchar por "ser la siguiente novia" pero Monett que había hecho el amague de arrojar el ramo hacia atrás dos veces se gira para vernos a la cara y camina hacia nosotras, todo el mundo, incluida yo, la observamos con confusión por sus acciones pero entonces se sitúa enfrente de mi y toma mi mano derecha depositando el ramo en ella, se escucha un jadeó colectivo y Moni se aparta dejando ver a Damien arrodillado sobre una de sus rodillas con la cajita de un anillo abierta.

- Katania Isabel Faradhay, mi abejita, desde el primer instante en el que te vi supe que ya nunca podría sacarte de mi cabeza, te veías tan dulce y perdida que tu rostro se grabó a fuego dentro de mi corazón - Damien habla con la mirada fija en mi, mis ojos se humedecen mientras abrazo el ramo contra mi pecho sin poder creer nada de lo que esta pasando justo ahora - con cada segundo que pasé a tu lado solo pude confirmarme a mi mismo lo inevitable, que quería pasar a tu lado el resto de mi vida y si hay algo más después de esta existencia deseo volver a encontrarte, tener por la eternidad junto a mi a mi dulce caos, Katania, ¿Me harías el honor de convertirte en mi esposa?

- ¡Si, si si! - chillo y todo el mundo estalla en un grito de alegría, Damien me pone el anillo en el dedo indicado y entre las lágrimas apenas puedo notar el diamante en forma de corazón, nos besamos sintiendo que el lazo que nos unió desde aquella noche en la que tocó mi puerta pidiendo algo de azúcar se vuelve mucho más sólido, irrompible

Alguna vez leí una vieja leyenda, una creencia oriental que hablaba sobre las almas gemelas, decía que todas las personas en el mundo tienen un hilo rojo atado al dedo meñique izquierdo, a ese en específico porque es el dedo que se une con el corazón, según el relato al otro extremo del hilo se encontraba el destino de cada alma, su eterno. El hilo puede estirarse a través de todo el universo, hacerse frágil e incluso invisible para el espíritu pero jamás se conseguirá que se rompa, estará allí, para siempre, uniendo dos almas que deben encontrarse a través del mar tormentoso que rodea nuestras existencias.

Yo encontré el otro extremo de mi hilo rojo en medio de un dulce caos.

FIN