Capítulo 5: Volver con ella

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Dereck Miller

Termino de despejar el área de actividades y veo la hora en mi reloj.

4:53

Sonrío al ver que ya es casi la hora en la que Megan habla por videollamada con Thea. Sé perfectamente que Thea me odia incondicionalmente por ahora, pero sinceramente solo quisiera verla o escuchar su voz, no tengo intención de molestarla ni incomodarla, solo quisiera asegurarme de que ella se encuentre bien.

Camino a pasos rápidos a la cabaña y cuando llego, veo que Megan se encuentra sentada sobre una de las camas mientras observa el celular que seguramente le proporcionaron para la videollamada.

Tenemos estrictas reglas de que una vez dentro del área del campamento, no podemos usar ningún tipo de dispositivo móvil y nos lo retiran en la entrada. Sin embargo, a cada campista nos dan una oportunidad a la semana de hacer una llamada con quien sea. Aunque Megan —siendo la favorita de la instructora— puede hacer dos llamadas a la semana, una con su familia y otra con Thea.

En fin, la corrupción de estos tiempos.

—Faltan seis minutos —le digo con una sonrisa —En la mañana, que me dijiste tus reglas... decidí aceptarlas, sólo quiero ver a Thea ¿de acuerdo? Prometo que no intentaré hablarle ni nada por el esti...

—Espera —interrumpe Megan —Creo... que no podré hablar con ella —dice sin dejar de ver el celular —Estoy apenas intentando entender sus mensajes —menciona con una cara de extrañez —Está histérica, diablos ¿qué le sucede?

Me acerco a ella con rapidez y le quito el celular de la mano para ver los mensajes de texto.

《NO PUEDO HABLAR HOY》

CONOCÍ A UNA CHICA Y RESULTA QUE ESA CHICA ES HERMANA DE DERECK》

《TE CONTARÉ LOS DETALLES PRONTO, LO PROMETO》

—Dame eso —Megan me arrebata el celular de las manos —Metiche.

—¿Hermana? —cuestiono con la ceja en alto, intentando procesar los mensajes.

—¿Sabes a lo que se refiere? —me pregunta —¿Desde cuándo tienes una hermana? ¿Ella ya lo sabía? ¿Por qué yo no lo sabía?

—Desde que nació. Sí. Nunca me preguntaste —respondo a sus preguntas.

—Y si Thea ya sabía que tienes una hermana, ¿por qué actúa como si la acabara de conocer de sorpresa?

—Porque la acaba de conocer de sorpresa —asumo —Debo irme.

—¿Qué? ¿A dónde?

—Me gusta estar aquí, pero creo que tengo muchas cosas que resolver allá afuera —menciono.

—¿A qué te refieres con eso? ¿Te vas del campamento ya? Todavía te quedan dos semanas aquí.

—Pediré un permiso con la instructora Martha, seguramente lo entenderá.

—Claro, ¿y cuál será tu creíble excusa para que te autoricen salir antes?

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