📖⚡El Quirk Mamodo⚡📖

XXII- Casi perdidos.

En la semana de entrenamiento de la peliblanca, Kamui recibió una llamada muy importante de la ciudad de Hosu de una de las agencias de ese lugar.
El héroe avisó a los hermanos y estos con gusto y deseos de ir, acompañan al héroe a dicho viaje.
Vestidos con sus trajes, van en tren lo más pronto posible, pues al parecer había problemas con unos criminales, Woods aprovecharía para poder lucirse ante sus alumnos, tal vez le daba algo más que solo conocimiento teórico y físico.
Viajaron temprano, antes del medio día ya habían llegado a la ciudad, siendo recibidos por una gran cantidad de personas caminando de aquí para allá, yendo a sus lugares de trabajo o a sus instituciones. 

-Chico, no se separen de mí, hay muchas personas, fácilmente podrían... -Woods da media vuelta y no los ve- Perderse...

Parados en medio de una gran multitud que los arrastró desde la puerta del tren hasta casi la salida de la estación. Miraban a los lados en busca de su maestro pero a pesar de tener una ropa llamativa y kosei llamativo, no lo veían por ningún lado. Los dos se observaron y luego observaron el mapa de la ciudad que se plasma en un cartel.

-Nos perdimos o nos perdió? -Eva observa a su hermano-

-Sep. - el muchacho se rasca la nuca- ¿vamos a una comisaría? Así nos reportamos como perdidos.

-¡Tu eres el adulto!

-Pero estamos perdidos!!

Dándole un golpe en el brazo, se acercaron al mapa y comenzaron a memorizar cada una de las calles y avenidas. Bueno, solo lo hacía Eva, mientras que Kiyo se mantenía en el suelo sentado de forma india, preocupado por haberse perdido en una ciudad desconocida.
Miró por sobre su hombro y dio un leve golpe a su hermano para que se ponga de pie, pues ella sería la guía, como siempre.

Caminaron por lo menos por unas dos horas hasta que se detuvieron frente a la agencia con la que Woods tenía que hablar sobre unos problemas en barrios bajos de la ciudad, donde los criminales abundan.

-En...Endeavor? -Kiyo observa el cartel de a quien pertenece la agencia-

-Calla y entremos, mientras más rápido salgamos de aquí, menos serán las ganas que tengo de romperle la cara.

-Calma, yo le explicaré la situación, tu solo mantente alejada, no quiero que te le tires encima como animal rabioso.

-No me importaría hacerlo.

Rodó los ojos y ambos ingresaron a la agencia, llamando la atención de prácticamente todo el mundo. Endeavor, que salía del ascensor junto a Shoto y un subordinado, quedaron estáticos al ver al dúo Raiki.
La mirada amarillenta de la joven se encontró con la del héroe número dos, este sintiéndose levemente acorralado, ella con su seriedad y frialdad, puede intimidar mucho, incluso a él, un héroe de élite.
Shoto por otra parte, miraba con asombro a su compañera, ahora que la veía más de cerca, se sentía levemente acalorado y no por su lado izquierdo.

-El dúo Raiki, ¿a qué se debe esta repentina visita de ustedes dos?

-No son muy deseadas, señor Endeavor. -Eva le mira seriamente-

-L-Lo que mi hermana quiere decir es que, no vinimos porque queríamos, sino porque nuestro héroe guía y maestro dijo que tenía asuntos pendientes en este lugar y que vendría a hablar con usted sobre los asuntos descontrolados en un sector de esta ciudad.

-¿Y dónde está?

-Ese es el problema, apenas salimos del tren, él ya no estaba. -Kiyo tiene un aura deprimente mientras que Evangeline observa hacia la salida- Si no fuera por mí hermana y su buena orientación, estaríamos perdidos.