XLIX-Durmiente.

687 126 49
                                    

Habrá pasado al menos unos 2 días desde que Evangeline salió de cuidados intensivos, pero ella simplemente no despertaba, su cuerpo no quería hacerlo..., ella no quería hacerlo.
Sus padres estaban constantemente al pendiente de sus hijos, pero cuando Kiyo despertó y se enteró que su hermana aún no daba señales de volver a querer abrir los ojos, hacia todo lo posible para ir con ella, pero los trabajadores de blanco no se lo permitían y la única solución de mantenerlo quieto era atarlo a la camilla de manos y pies, imposibilitandole a Kiyo ir a ver a su hermana.

En el tercer día, Katsuki se hizo presente en el hospital, saludando de manera educada a los padres de la joven; Hanna sonrió apenas cuando vio al hijo de su amiga y le dijo que pase a la habitación, ya que ella iría a ver a su hijo.
Con un asentimiento, el cenizo abrió la puerta con delicadeza y la cerró de la misma manera, acercándose a la camilla para observar a Evangeline..., la cual duerme profundamente o eso es lo que parece, pues ni siquiera había vuelto a despertar desde que lavaron su estómago.

Apretó con fuerza el ramo de flores que trajo y cerró sus ojos, aguantando las grandes ganas de llorar que tiene, odiaba verla de esa manera, no podía, no quería llorar, pero su debilidad se había vuelto ella.
Miró el jarrón con unas flores feas, esas no van con la chica y menos con esa habitación tan muerta en blanco. Tomó aquello y las tiró a la basura para después acercarse con su ramo y ponerlas en el recipiente, arreglandolas un poco para que la chica tal vez pueda despertar con el aroma suave de ellas.

Con una expresión de enojo por si mismo, tomó una silla cercana a la cama de hospital, la acercó más para así tomar asiento y tomar con delicadeza la mano de la peliblanca, acariciándole la palma y luego observar las pequeñas marcas de cortes que tuvo en la pelea, afortunadamente van sanando de a poco pero eso no cambia el hecho de que ella no despierta y al parecer no lo haría.

-Oe... -dice en tono bajo- No sé si estés escuchándome... pero necesito que despiertes y me digas que todo está bien, necesito escucharlo de ti, no de otra persona, no de un héroe, sino de ti. -le besa suavemente los nudillos- La...la película se estrenará en unos días y no iré a verla sin ti, mientras sigas aquí, vendré todos los días a molestarte los ovarios para que abras esos ojos amarillos, para que puedas regalarme una sonrisa, un golpe amistoso, lo que sea, pero no pienso dejarte... -suspira y gruñe enojado- Debí haberme quedado contigo, si lo hubiera hecho, no hubiese ocurrido todo esto, si tan solo hubiese sido más fuerte, no me hubiera dejado capturar..., ahora por mi culpa All Might perdió su poder y tu estas aquí... en el hospital sin despertar... De verdad lo siento, Evangeline..., yo solamente fui un cobarde... que dejó atrás a la chica que le gusta... pensé que...tal vez hice lo correcto, pero no fue así, no hice lo correcto y mira lo que pasó...-suspira triste- Por favor Eva, abre los ojos... y dime que estas aquí... quiero a la chica valiente, brava y poderosa nuevamente...mirándome a los ojos sin desviarlos... la culpa me mata... por favor rescatame de ello una vez más...

Katsuki observó nuevamente a la chica, se puso de pie y le dio un beso en la frente para después apoyar la suya con la de ella, mirándola con una expresión de tristeza.
Observó los labios de la chica, se acercó a ellos y susurró una última cosa antes de posar sus labios sobre los de ella.

Despierta pronto, mi bella Evangeline.

En la madrugada, la puerta de la habitación que mantiene a la joven, se abrió lentamente, dejando pasar a una sombra que se acerca rápidamente a la camilla, revisando a la chica para después darle un abrazo con delicadeza

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

En la madrugada, la puerta de la habitación que mantiene a la joven, se abrió lentamente, dejando pasar a una sombra que se acerca rápidamente a la camilla, revisando a la chica para después darle un abrazo con delicadeza.
Con lágrimas en los ojos, la persona misteriosa acaricia suavemente las mejillas de la peliblanca, depositandole un beso en la frente y en ambas mejillas.

-Vamos hermanita... despierta. -El peliblanco es iluminado por la luz de la luna que ingresa por la ventana- Lamento haberte lastimado... no quiero pelear contigo, pero no tengo otra opción, debo hacerlo si quiero poder estar contigo...

Su expresión de tristeza se reemplazo por una de dolor, pues se había escapado de Ryan para venir a ver a su hermana, pero ahora al parecer su lector lo ha pillado y está quemando la tapa del libro con el cigarrillo de la marca de siempre.
Una marca más se hace presente en su torso, sumándose a la colección de cicatrices de quemaduras que Ryan le hace para que obedezca o aparezca rápido.
Como pudo, sacó rápidamente de su bolsillo un relicario de forma ovalada, sacó el collar que su hermana porta, lo pone junto al dije de la E y se lo vuelve a colocar, mirándola y sonriendo con suavidad.

-Era de mamá, cuídalo bien, hermana~.

Dándole un último beso en las dos manos, corrió en silencio hacia la puerta pero las voces de quienes son los padres del lector de su hermana estaban afuera, por ende se acercó rápidamente a la ventana, vio una última vez a Evangeline y se dejó caer al vacío justo en el momento preciso en que la puerta es abierta y Hanna ingresa para velar por su hija mientras que su esposo se encarga de Kiyo.

Se frotó los brazos soltando un pequeño jadeo a causa del escalofrío que sintió  por culpa de la brisa nocturna que ingresa a la habitación. La mujer se acercó, asomó medio cuerpo y miró las afueras, había jurado ver una sombra salir de la habitación, pero al parecer solo ha sido su imaginación.
La ventana fue cerrada y cubierta por las cortinas, imposibilitando al mamodo en lo alto del edificio de en frente seguir viendo a su hermana; otro dolor más se instaló en su cuerpo pero esta vez el dolor es en su espalda, lo más probable es que Ryan... este alzando su nivel de castigo por tardar tanto a sus ordenes.

Se fuerte, Raito, solo aguanta un poco más y Evangeline estará contigo...

📖⚡El Quirk Mamodo⚡📖Donde viven las historias. Descúbrelo ahora