–Horacio acaba de despertar, ¿Y ya vais a follar?, Pero si ni siquiera puede mantenerse en pié.–Gruñó aquel viejo refunfuñón.
Horacio mostró una pequeña sonrisa tímida mientras mantenía la mirada fija y rodaba los ojos hasta los de Volkov.
–Tranquilizate Jack, el amor es joven.–Una voz familiar se hizo sonar tras la puerta de la habitación.
En ese momento entró aquella mujer de cabellos rojos y carácter peculiar.
–Evans–Dijo sorprendido Conway.
Volkov se enfadó, ¿Quien quedaba por llegar?, Tan solo pedía unos minutos con su chico a solas. Joder, llevaba un maldito año sin hablar con él, sin acariciarle, sin besarle...
–Hola, Horacio...–Dijo Michelle ladeando una sonrisa y guiñando un ojo. Intentando imitar una expresión dulce en aquella cara de expresiones toscas y ásperas.–Me alegra mucho que hayas despertado. Nos preocupamos mucho por tí.
–Gra-¿gracias?–Respondió confuso el chico. Dirigiendo los ojos hasta Volkov, como si con estos preguntara quien era aquella mujer.
–Oh vamos, ¿es enserio?–Bufó el ruso.–¿Enserio Michelle?, ¿Enserio te alegras de que Horacio esté despierto?.–Todos dirigieron la mirada al comisario. Un ambiente de incomodidad y tensión se concentró en aquella habitación.–No has pisado está puta habitación ni un día, ¿Ahora vienes a hacerte la falsa con él?, ¿Cuando está despierto?. No parecías muy preocupada cuando Horacio estaba medio muerto ahí.-Señaló la cama.
Michelle repasó con la lengua sus dientes superiores, mostrando una sonrisa que daría escalofríos a cualquiera, mientras se quitaba las gafas y se las colgaba del cuello de su camisa azul perfectamente planchada.
Esta se acercó despacio hacia el comisario con la misma sonrisa.
–Mueve tu culito ruso y acompañame afuera,¿Quieres?–Dijo a penas a unos centímetros del comisario mientras punzaba con su dedo índice el torso superior de este.
–Yo no voy a ninguna parte.–respondió algo tenso.
Michelle amplió un poco más la sonrisa de un lado de sus comisuras. Seguidamente se arremangó los bordes de sus mangas y tomó con una fuerza descomunal el glóbulo de la oreja del comisario. Arrastrándolo hasta la salida.–Si nos disculpáis.
–¡Ah, Ah!–Se escuchaban los quejidos de este mientras salía a la fuerza de aquella habitación.
Horacio no despegó los ojos de aquella escena, pestañeó dos veces, anonadado y confuso. Y seguidamente giró la cabeza hasta mirar a Jack, que se encontraba a una distancia prudencial del joven, manteniendo la misma expresión. Este se pellizcó el entrecejo, una expresión de cansancio e incomodidad.–Cuantos más gilipollas tengo a mi lado, más se me acorta la vida...–Resopló.
Horacio intentó mantener la risa, mostrando un temblor de labios que lo delataba.
–Ni si quiera se te ocurra reírte, trozo de mierda. Que estes lisiado no significa que pueda sacar la porra en cualquier momento.–Amenazó señalando con su dedo índice, tras esas gafas de sol que ocultaban aquellos ojos inhumanos cada vez más humildes.–mamón...
–Venga Conway, sé que me has echado de menos, aunque sea un poquito.–dijo con una tez tierna el chico de los ojos marrones.–¿Un abrazo?–extendió los brazos.
–Tu lo que quieres es volver a acabar en coma de la ostia que te voy a meter...
⭐⭐⭐
Michelle lanzó a Volkov contra una de las sillas del pasillo del hospital, dejándolo sentado.
Este se agarró la oreja, intentando calmar el dolor–Auch...–mientras agachaba la cabeza, algo intimidado por la tremenda fuerza que poseía aquella oficial.
ESTÁS LEYENDO
✨Los ojos de la muerte-Volkacio✨
Fanfic¿Sería posible una historia de amor entre un comisario frío y un chico tras una máscara? (Esta historia puede contener escenas sexuales, si no te gusta el amor entre hombres, no te recomiendo que la leas ❤️)