¿Sería posible una historia de amor entre un comisario frío y un chico tras una máscara? (Esta historia puede contener escenas sexuales, si no te gusta el amor entre hombres, no te recomiendo que la leas ❤️)
(Antes de empezar solo avisaros que Alex es un personaje inventado, hay que darle drama a la historia bbs uwu, besitos en el sin esquinas)
El pequeño Volkov giró la cabeza hacía su compañero, este de pronto vio como arrancaba la corteza del pan y la dejaba en la bolsita de plástico donde venían los alimentos.
-¿No te la comes?- pregunto este con la boca llena.
-No me gusta...- respondió Alex concentrado en dejar el pan sin un centímetro de esta.
-¿Por qué?
-No se...- respondió este extrañado por la insistencia de Vicktor- ¿A ti te gusta?.
Se encogió de hombros,-No me gusta pero cuando tienes hambre te la tienes que comer- intentó argumentar el niño de apenas seis años.
-Pero... ¿Y si no te gusta?
-Pues te la tienes que comer igual porque no sabes cuando puedas volver a comer algo mas...- dijo Volkov mientras se terminaba los últimos pedazos de su sándwich.
-A mi nunca me ha pasado eso, siempre tengo comida en casa- explicó Alex mientras miraba al suelo.
Volkov se giró y miró a aquel niño a los ojos,- ¿Enserio?- preguntó sorprendido.
Alex asintió muy exageradamente, sacudiendo la cabeza de arriba a abajo pero sin soltar el sándwich de sus manos. Típico gesto que hacen los niños pequeños para asentir.
-Pues que suerte...- Dijo Volkov mirando al suelo mientras miraba sus converse rojas desgastadas.
Este movía los pies de izquierda a derecha mientras se sentaba encima de sus manos para calentarlas.
Giró la cabeza para ver las zapatillas de su compañero, en cambio estas estaban nuevas, muy limpias y casi recién estrenadas.
Alex puso atención en la mirada de Volkov,-¿Te gustan mis zapatillas?- dijo este con la amplia sonrisa de antes.-Estas son mis favoritas.
Vicktor deslizó las comisuras de sus labios formando también una sonrisa y asintió con la cabeza,-Están muy limpitas- dijo mientras miraba a Alex, -yo nunca he tenido ropa nueva, casi toda es de mi hermano-
Alex se percató de un gran agujero que estas tenían a los costados, estaban desgastadas y descoloridas.
Giró la cabeza buscando con la mirada al hermano de Volkov, parecía un adolescente no muy problemático pero tampoco querías buscarte problemas con el.
Un largo flequillo moreno tapaba los costados de su frente. Estaba serio, muy serio y tomaba grandes bocanadas de su cigarro mientras miraba a la nada.
Era aquel tipo al que con solo una mirada ya te podías dar cuenta de que no había tenido una vida muy sencilla.
Era bastante alto, por lo menos de metro ochenta y era igual de escuálido que su hermano pequeño.
Tenía una mandíbula bastante marcada y perfilada y unos bracitos tan finos que daba la sensación que se romperían en cualquier momento.
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