✨Los ojos de la muerte-Volkacio✨

Unas cuantas miraditas

Volkov salió de esa habitación corriendo, bueno más bien rodando.
Cerró la puerta de la habitación, pero justo escuchó la puerta del baño abrirse.

Se le hizo raro ver a aquel hombre solo cubierto de cadera hacia abajo y la cara con aquella máscara,

-¿Te has duchado con eso?- preguntó desconcertado Volkov.
-Ostia que susto.
-Perdon....no pretendía...
-¿Me estabas espiando?- preguntó provocativamente Dan/Horacio.
-No...No que va, estaba...estaba buscando un libro.
-¿Usted lee?
-Si.
-¿Lee cosas otakus de esas?
- ¿Disculpe?, ¿Como sabe...? Digo, ¿Otaku? ¿Que es eso de Otaku?
-Ajá, intenté disimular conmigo si quiere...

Volkov se enrojeció, agachó la cabeza y empezó a rascar su nuca.

-¿Me dejas pasar?- preguntó Horacio con esa sonrisa tan dulce que siempre tenía y señalando la puerta.
Volkov se quedó embobado, tenía a ese gigante hombre al lado suya, tanto que las gotas de agua que tenía Horacio por salir de la ducha le caían a Volkov en el rostro.
-Es que estás en medio- volvió a decir Horacio señalando la puerta de su habitacion.
-Si si... Perdón.

Horacio pasó a la habitación y dejó una pequeña rendija en la puerta,
Al otro lado Dan/Horacio preguntó,
-Volkov, ¿Le apetece hacer algo hoy?, Salir a algún sitio...

Volkov estaba en el pasillo, seguía paralizado recordando la imagen de aquel mastodonte poniendo su tableta casi en su cara.

-Emm... Me gustaría visitar la comisaría.
- 10-4, podemos ir esta tarde si no hay mucho jaleo.

Volkov estaba deseando mirar a través de esa puerta, intentó no hacerlo pero fue en vano.
El comisario giró la cabeza en dirección al hueco de esta y consiguió ver la espalda y el trasero de aquel individuo.
Volkov necesitaba más pero debía controlar sus impulsos
"No veas algo de lo que te puedas arrepentir" se dijo a sí mismo, refiriéndose a la cara de aquel sujeto.
"Mantén su privacidad".

Justo salió Dan/Horacio de la habitación, Volkov para disimular puso su mano en la nuca y bajó la mirada al suelo.

-¡Ostia! Otra vez.
-Perdon iba a mi habitación- intentó disimular el comisario.
-Hoy tengo el turno de noche, ¿Le apetece comer algo en especial?
-No.
-Bueno pues tendrá que conformarse con espaguetis.

                              [...]

Volkov estaba viendo la televisión y Horacio haciendo la comida.
-Volkov, ¿se ha limpiado la herida?
-No.
-Ostia y ¿A qué espera?
-bueno...
-Deja ya lo hago yo-Le dijo el chico de la máscara mientras agarraba el botiquín y algunas medicinas que le recetaron al comisario.
-Tranquilo Dan, no hace...
-Quitese la camisa- interrumpió Dan.

Volkov se quedó unos minutos paralizado y con los ojos como platos, después se quitó la camisa.

Dan/Horacio se agachó,
-A ver, déjeme ver- murmuró Horacio fijándose en la herida.
Seguidamente quitó con delicadeza el esparadrapo pegado a la piel de Volkov.
Los dedos de Dan/Horacio rozaban el pectoral de Volkov. Haciendo que la piel de este se erizara.

Limpió la herida con un algodón y suero fisiológico,
-ah- soltó un pequeño quejido, todavía le dolía un poco.

Dan le miró unos segundos a los ojos,
-lo siento, no quería hacerle daño.- y mostró una pequeña sonrisa.

-tranquilo- Volkov se sentía en las nubes, no paraba de mirarle a los ojos, estaba embobado de aquel misterioso hombre.

Horacio/Dan aplicó una pomada antinflamatoria en la herida, después puso una gasa por encima.
Agarró el esparadrapo del botiquín e intentó romper un trozo con los dientes mientras miraba a Volkov a los ojos.

Volkov se perdía en el brillo de estos, se quedaron unos instantes mirándose.

(Perspectiva Volkov)

-Me moría de ganas de besar a aquel individuo, estaba claro, si, estaba enamorado de alguien que no conocía su rostro.
Estaba empezando a sudar, que sus dedos rozaran mi piel era muy agradable.
No podía disimular, es como si no controlará mi cuerpo.

(Perspectiva de Horacio/Dan)

Noté como la piel del comisario se erizaba justo cuando pasé mis dedos.

Ver los ojos de ese ruso era como una droga a la que cuanto más tomabas más querías, era mi única adicción.

Quería decirle que le amaba,
-Volkov....
Pero no me salieron las palabras, tenía miedo a ser rechazado de nuevo.
-¿si?
- Nada... Ya he terminado.