Flores Salvajes || L.S

XIV

Al llegar a la casa de Dan todo era música, feromonas y alcohol, varios alfas saludaban a Louis en su camino hacia la barra de bebidas, pero en ningún momento soltó la mano de Harry, quien se aferraba a ese contacto, cohibido ante tanto alfa extraño.

– ¿Qué quieres tomar?

Louis susurró cerca de su oído para que pudiera escucharlo por encima de la música, eso erizó la piel del omega pero rápido pensó en algo que tomar.

– Vodka.

– ¿Puro?

– No, con piña, por favor.

Asintiendo se volvió hacia el beta que estaba sirviendo y le pidió la bebida de ambos, esperando unos minutos hasta obtenerlas y darle la suya a Harry y sonreirle. Iba a hablar cuando un grito lo hizo girar a su derecha dejando de mirar al rizado.

– ¡Louis! No creía volver a verte por aquí.

Harry notó la incomodidad del alfa e inconscientemente se acercó un poco más a él, escuchandole maldecir por lo bajo.

– Hola Sam, ¿cómo te va?

Harry sumó dos más dos y recordó lo que Luke le había dicho por la mañana, miró al omega frente a él y su aroma a azucenas le picó en la nariz, no podía negar que era un poco atractivo, pero parecía que su alfa no lo toleraba, y tenía motivos.

– Muy bien, ¿quién es él? ¿Ya cambiaste a Francesca?

En ese mismo instante Louis quiso borrar de un golpe la sonrisa inocente que Sam tenía en su rostro, pero se vio rodeado por unos brazos suaves y un aroma a miel y cerezas, que reconoció al instante.

– Louis nunca me cambiaría, no todos son como tú, Fender, pero para desgracia de mi querido castaño vengo acompañada de mi alfa.

Harry sonrió aliviado al saber que Francesca tenía alfa, y notó que a pesar de estar abrazando a su amiga Louis nunca soltó su mano. Como fuera Sam se retiró claramente avergonzado y Fran pudo mirar a su amigo alejándose un poco.

– Lo siento Lou, esta noche no podremos fingir que somos-...

Su frase quedó colgada al ver la mano de su amigo enlazada y al dirigir su mirada hacia Harry ambos se miraron y el rizado la reconoció como la chica del parque, y Francesca lo reconoció por la descripción que Louis le había dado, definitivamente su amigo estaba enamorándose porque tal vez, y solo tal vez, exageró un poquito sobre el chico, pero no podía negar que parecía esculpido por los dioses.

– Cherry.

Louis la llamó advirtiendole, sabía que su amiga podría decir algo que lo acabara avergonzando, así que prefirió prevenir, y cuando su amiga asintió supo que había captado el mensaje. Un alfa rubio, de ojos muy claros y piel pálida se acercó a ellos no mucho después y enredó sus manos en la cintura de la omega.

– Louis, ti presento il mio amore, il mio alfa, Kalevi, es de Finlandia, su nombre significa héroe y es precisamente lo que es, me salvó de un alfa pesado hace unos meses y en cuanto lo vi supe que era mi destinado. Amore, él es Louis. - "Louis, te presento a mi amor, mi alfa...".

– Es un placer, conocerte, Louis, Prinsessa habla mucho de ti. ‐ "Princesa".

Los alfas estrecharon sus manos y Francesca se encontraba sonrojada, el alfa tenía un claro acento nórdico pero una gran pronunciación del inglés, lo que resultaba casi cómico cuando mezclaba ambos idiomas.

– ¿Él?

Kalevi señaló a Harry tras soltar el agarre con Louis, realmente no sabía cómo presentar a Harry pues no quería que se sintiera incómodo, pero tampoco quería presentarlo solo como Harry, decir que es su amigo estaría bien.