UN AMOR EXTRANJERO | NOZEL SILVA

NO TE CONFUNDAS

Cuando abrí los ojos pude ver que estábamos en una especie de hospital, me dolía todavía un poco el cuerpo.

Lo primero que hizo fue ver a mi alrededor, los chicos estaban ahí conversando, aunque después cerré nuevamente mis ojos.

—Es increíble que podamos regresar hasta que Finral se recupere— dijo Gauche— eres un inútil.

—Soy tu superior—dijo Finral— Por cierto, Grey, no sabía que fueras una chica tan linda.

—¡Que vergüenza, no me mires!— exclamó esta

—Si la miras con lesividad te mataré, Finral— dijo Vanessa— aunque tampoco debes vivir con tanta vergüenza, Grey.

—¡Tu deberías sentir más vergüenza!— gritó Magna

—¿Te sonrojaste, delincuente virgen?

—¡No soy un delincuente!

—¿Pueden dejar de gritar?— dije frunciendo el ceño abriendo mis ojos

—Hey, con qué ya despertaste Yumeko— me dijo Vanessa

—¿Cuánto tiempo he estado dormida?— pregunté

—Lo suficiente como para recuperarte— me guiñó un ojo— El Capitán llegó para salvarnos, dio el golpe de gracia.

—¡Yumeko Senpai hubieras visto al capitán! — se acercó Magna— estuvo increíble como siempre.

Mire a mi alrededor y mi atención se posó en una chica de cabellos celestes

—¿Quién es ella?— pregunté observándola

—Ella es Grey — dijo Charmy

—¿Grey?— pregunté sorprendida— es linda— sonreí

—¡Heeee, no me mires por favor, que vergüenza!— dijo tapándose la cara

—¿He?— pregunté confundida— no tienes por qué sentir vergüenza.

—¡Te lo suplico no me mires!— dijo roja como un tomate

Siempre pensé que Grey era un chico, pero es una chica muy linda.

—Que rabia. Lo único que hicimos fue que nos apalizaran— dijo Magna

—Era inevitable. Ese es nuestro nivel actual— contestó Luck

Chasqueé la lengua, no pude detener a esa bestia.

—Lo hiciste bien— volteé a ver sorprendida; era Vanessa

—¿Cómo lo sabes? no me vist...

—Simplemente lo sé, tu estado era fatal como para no saber que diste todo— me dijo sonriendo

—¿He, hay una fiesta?— dijo Charmy ya que se escuchaba mucho ruido afuera.

Como puede, me levanté de la cama, sentía un pequeño malestar como el de un moretón por el área del abdomen.

Nos asomamos a la ventana y el pueblo entero había ido agradecernos por lo que habíamos hecho.

—¡Gracias Toros Negro!

—¡Estuvieron increíbles!

—¡Los salvadores del templo Submarino!

—¡Son geniales!

Yo... nos están dando las gracias.

—Que te den las gracias no está tan mal— dijo Vanessa contenta

—Supongo que no— dije sonriendo

***

Nos enteramos que Asta había perdido para siempre sus brazos después de la batalla que tuvo contra el tipo de Ojo de la Noche Blanca, así que todos decidimos buscar alguna solución con tal de ayudarlo.