XV

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Todavía estresada por todo el asunto del confesionario y el trato del padre Gabriel hacia ella, Leonie tenía que verlo en el primer ensayo.

"Espero que el padre esté de mejor humor esta tarde." dijo Mai.

Ellos estaban trabajando en el primer acto así que solo algunos miembros del elenco habían sido llamados. Leonie y Mai estaban en la primera escena juntas. Mai solo tenía unas pocas líneas que no se había molestado en aprender todavía.

"¿Estamos todos?" El padre Gabriel hizo una breve comprobación de los miembros del reparto necesarios y de los alumnos reunidos ante él. "Bien. La primera escena aún no ha sido esbozada, pero usaremos el escenario de todas formas. No os preocupéis sobre cómo posicionaros por ahora. Solo enfóquense en el guion. Por ahora haremos que todos entren por el escenario directo, aunque esto puede cambiar la próxima vez."

Subir a un escenario y sentir el olor del polvo, la humedad de las cortinas y esos olores únicos del teatro siempre emocionaba a Leonie. Normalmente la llenaba de energía y la ayudaba con su presentación, pero hoy ella estaba demasiado estresada.

Empezaron las escena con el reverendo Parris rezando y entonces la mujer esclava Tituba entrando. Después entraba Abigail, marcando el comienzo de Susana.

Leonie pensó que era una pena que Mai no hubiera obtenido un papel mayor ya que estaba bastante animada. Pero ella tendía a jugar e imitar a las demás. Ella incluso consiguió hacer que Susana pareciera estrafalaria diciendo "¡Sí, señor!" de una forma cómica, causando que algunas chicas se rieran. La fría mirada del padre Gabriel las calló al instante.

Para Leonie era al contrario. Ella no se sentía para nada animada. Ella apenas conseguía decir las líneas e iba de mal en peor.

Ellos estaban practicando la primera escena donde Abigail intenta atraer a John Proctor de vuelta a ella, y él se niega. Las palabras estaban literalmente trabadas en su garganta. Ella era consciente de la presencia del padre Gabriel.

Peor aún, era él quien estaba a cargo del ensayo hoy ya que la hermana Rosalinda tenía que estar en otro lugar. Además, cómo él estaba dirigiendo la obra iba a estar más involucrado en los ensayos igualmente.

Leonie intentó decir la línea en la que Abigail le decía a John Proctor que sentía su calor y que eso la atrajo. Pero ella sabía que sonaba sin emoción y su falta de expresión estaba haciéndolo difícil para la estudiante que hacía de John Proctor. 

Esta era una chica alta de pelo corto y oscuro que se llamaba Mercy Braithwaite. Debería haber sido más fácil hacer esta escena con otra chica, ya que no había ninguna tensión sexual entre las dos actrices. Al menos Leonie asumió que no había. Ella supuso que era posible que Mercy fuera lesbiana. De todas formas, si lo era tampoco le molestaba.

Pero cada línea que Leonie tenía que decir, ella solo sentía como si la mirada del padre Gabriel se clavaba en ella con creciente desaprobación.

Ella intentó otra vez poner emoción en ello, diciendo a John que lo había visto arder en la soledad y buscarla en esta.

¿Pero podía decir esas líneas con el padre Gabriel mirándola? Ella estaba tropezando con las palabras y diciéndolas rápidamente sin expresión ninguna.

Mercy estaba haciendo un trabajo increíble. Había una verdadera convicción en su voz cuando decía "cortadle la mano" y ordenando a Abigail a "borrarlo de su mente".

La respuesta de Abigail, de burlarse de John Proctor por ser un hombre fuerte pero tener una mujer enfermiza, debería haber estado llena de pasión y veneno. Ello lo estaba incitando a reaccionar ante ella. Pero Leonie sabía que lo estaba haciendo cada vez peor. Leonie no supo ni cómo llegó al final de la escena. Cuando el ensayo fue llamado a su fin, ella le lanzó una mirada de disculpa a Mercy. "Lo siento, simplemente no pude decir las líneas correctamente hoy."

Mercy se encogió de hombros y sonrió. "Esta bien, nos pasa a todos." A Leonie le caía bien, por eso se sentía tan mal de haberla defraudado hoy. "Solo es el primer ensayo, nadie recuerda las líneas aún."

Excepto que Leonie sí lo hacía. Ella se las sabía de memoria, estaban tatuadas en su interior incluso antes de que obtuviera el papel.

"Lo siento de todas formas."

"No te preocupes. Será genial la próxima. Una vez no tengamos que hacer un esfuerzo por recordar cada palabra." Mercy sonrió otra vez a Leonie para tratar de animarla y se fue.

Leonie fue a recoger sus carpetas que se había dejado en una silla. Mai ya se había ido ya que Susana solo era necesaria al principio. Así que le habían permitido escabullirse temprano junto a un par de personas más.

Cuando Leonie estaba a punto de irse, el padre Gabriel la llamó. "Leonie Wilson, si pudiera quedarse un momento."

Su corazón se hundió en su pecho. Él iba a darle el papel a otra persona, ella lo sabía. Probablemente a la jodida Suki, esperandolo de brazos abiertos.

Caer en la tentaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora