Capitulo 7

3.2K 155 16
                                    

-Vengo a invitarla a cenar, señorita Heim.- dice y quedo perpleja.

-¿A qué se refiere, señor Russo? Si quiere hablar de negocios debe agendar una cita con mi secretaria.- le digo con profesionalidad.

-Me estas entendiendo mal, y llámame Dominik, no deberías llamarme por mi apellido des pues de lo que hicimos.- dice con un poco de picardía.

-Señor Russo, está en mi despacho y mientras eso sea así, lo tratare con la profesionalidad que se amerita.- le digo ara ver hasta donde aguanta que lleve esto.

-Por favor, Leyna, acepta que te lleve a cenar esta noche.- me dice mientras se acerca a mí, a decir verdad, muy muy cera de mi cara.- deja que te haga pasar una buena noche hoy.- dice y sin más une nuestros labios, esta vez es un beso tierno y con algo que no logro notar. Cuando el beso se torna más salvaje, me levanta de la silla y se sienta en ella dejándome a horcadas mientras seguimos besándonos hasta que oigo como mi teléfono suena y lo ignoramos para seguir besándonos, mientras pone sus manos sobre mis nalgas para darle un fuerte apretón, lo que me pega más a su cuerpo y puedo sentir su erección bajo mi sexo. Empiezo a desabotonarle la camisa cuando escucho que vuelve a sonar mi teléfono por lo que termino el beso y nos quedamos un rato frente a frente intentando recuperar la respiración. Suena una vez más el teléfono y me dan ganas de tirarlo contra la pared ara que deje de dañar el momento, intento alejarme para ver a quien voy a matar por dañar este momento pero Dominik no me deja alejarme, mueve la silla hacia el escritorio y coger mi teléfono ara no terminar con nuestra proximidad. En la pantalla aparece "Mason mi amorcito" y noto como Dominik lo nota y vuelve a intentar pegar nuestros labios con posesividad, me despego y le devuelvo la llamada a Mason. Un tono... dos tonos... tres tonos... y si no contesta ahora si que lo voy a matar. Al cuarto noto contesta:

-Hola, Ley, ¿Por qué no me contestabas? Estaba preocupado y voy camino a la empresa.- dice y escucho el tráfico de fondo.

-Estaba en el baño y deje el teléfono sobre mi escritorio.- le miento mientras Dominik reparte besos húmedos por mi cuello que me están volviendo loca.- ¿en dónde estás? vine en la motocicleta así que no necesito que me lleves, ¿salimos a almorzar juntos?- le pregunto para que me acompañe y que podamos hablar sobre todo lo que está pasando.

-¿Te llevaste la motocicleta? El señor Heim te va a matar por usarla y a mí por no ponerte atención.- dice regañándome.- y claramente iremos a comer juntos, cariño.- dice y sin más me cuelga. Maldito Mason. Estoy imaginando las mil formas en las que lo podría matar cuando la voz de Dominik me saca de mis pensamientos.

-¿Quién es ese tipo?.- me pregunta mientras me da un casto beso. Aún no hemos cambiado de posición.

-Mi guarda espaldas.- le digo mientras hago un segundo intento de separarme y otra vez me lo impide.

-¿y tienes agendado así a tu guarda espaldas?- pregunta y ya veo por dónde va la conversación.

-El mismo se guardó así, además, también es mi amigo así que tiene derecho a hablarme así.- le digo y vuelvo a sentir una vez más sus labios en mi cuello, creo que ya se dio cuenta del efecto que tiene eso en mi.- ¿podrías soltarme? Viene por mi para ir a almorzar.

-No respondiste mi pregunta.- dice ignorando mi petición.- ¿iras a cenar conmigo?- dice y me da un pico en los labios.

-Está bien, pero con una condición.- le digo.- yo escojo el lugar.

-¿Qué planeas?- me dice con curiosidad.- bueno no me importa, aceto con tal de salir contigo.

-¿Me puede decir a que se debe su invitación, señor Russo?- le digo usando su apellido otra vez.

Mister Russo. [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora