Mister Russo. [✓]

Capítulo 19.

Me quedo maravillado con la hermosa vista que tenemos en frente, aunque Leyna parece más que acostumbrada a ver algo así, por lo que intuyo que ya ha estado aquí antes

La he visto muy callada desde que salimos y eso me preocupa, más por lo que tenía planeado antes de salir.

Tal vez suene a cosa de críos pero quiero pedirle que sea mi novia, quiero hacerlo bien porque me siento bien com ella y creo que la quiero para mi vida, tal vez sea una afirmación precipitada pero la siento diferente, es tan poderosa que no hace más que maravillarse. La quiero aún más ahora qud se todo se su vida y se que confia en mi, aunque me preocupa que puedan hacerle daño y yo no pueda protegerla, pero tampoco la subestimó, si es tan poderosa y reconocida es por algo.

Al principio repudie la idea de que estuviera asesinando personas pero solo fue por un momento, estoy de acuerdo con lo que ella hace y veo que eso le agrada.
Un movimiento a mi alrededor me saca de mis pensamientos y es justo Leyna entrando a la cabaña, igual de callada que como ha estado todo el tiempo, espero que su ánimo mejore antes de que haga la proposición y espero por supuesto que me corresponda.

Entramos y en silencio la sigo a lo que supongo será nuestra habitación, con una cama nido tamaño king, con un ventanal gigante que deja al descubierto las preciosas montañas nevadas en la que estamos. Cansado del silencio y la incertidumbre, intervengo:

-¿Que pasa? No es normal en ti que estes tan callada, cariño.- casi me sale automático ser cariñoso con ella, aunque no sea una persona que normalmente exprese sus sentimientos.

-Solo estoy algo cansada.-dice regalándome una sonrisa que me reconforta y decido creerle.
Veo como se acuesta sobre la cama y ahora entiendo la razón, no ha tenido unos buenos días y el día ha estado movido. Me acuesto a su lado y como ya es costumbre, se recuesta sobre mi pecho.
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Me despierto por la luz que se fuga por la ventana y miro mi teléfono, notando que ya es un nuevo día, mi mano busca a cierta pequeña peligrosa pero no la siento, automáticamente volteo a ver hacia donde deberis estar y noto que hay una nota sobre su almohada:

"Salí a caminar un rato, vuelvo antes de que despiertes"

Sin dudarlo dos segundos, suelto una carcajada. Mi chica tal vez no noto que lo que escribió no tenía sentido y eso hace que me guste aún más, para ser tan inteligente es un poco despiada.

Pienso pedirle que sea mi novia hoy, así que busco en internet un lugar que se que que puede gustar para tener un ambiente más comodo. Encuentro un lindo parque con una represa cerca de aquí y decido que ese será el lugar.

Una vez con eso listo, me dirijo al baño y voy directo a la ducha para asearme, cuando voy a salir siento unas manos sobre mi espalda y me giró lentamente sabiendo que pasa, es Leyna, totalmente desnuda, pero su mirada no denota deseo, es simplemente una mirada de cariño, la cual correspondo.

Sin mediar palabra, cojo el jabon y lo repaso por su suave piel, sin ningún rastro de perversión, estamos tranquilos hasta que noto unas marcas en sus muslos y cadera que me desconciertan, más al pensar en que puede ser, ella parece notar que las estoy viendo porque veo que aparta su mirada con incomodidad. Pienso si preguntar o no y termino decidiendo que preguntare pero respetaré si no quiere hablar sobre ello, pero ante todo quiero que entienda que estoy para ella.

-¿Que son? -digo con simpleza sabiendo que ella sabe a que me refiero.

-¿No es obvio? Es lo que estas pensando.- dice con clara incomodidad y decido dejar el tema ahí.