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Las tres historias de: Camelia, Orange & Elizabeth.
Reporte de la prensa del campo: TÍTULO DEL APARTADO; "El ratón Rojo"
Reportera e investigadora del planeta, Susan Verónica; del caso de la desaparición de una adolescente hallada luego de dos semanas muerta en las orillas del lago Verde:
Los padres de Camelia, uno de ellos dió su testimonio relatando como todo comenzó.
2018.
El padre Sancho dijo: "Fui el primero en notarlo. Un día mi hija había empezado actuar raro luego de su segundo día de clases en la nueva escuela. Al principio creía que era un novio que había conocido en la escuela y la estaba acosando de más. Pasaban los días y Camelia se ponía muy nerviosa a la hora de la comida, nunca nos platicó el tema de su novio. Hasta que mi esposa y yo decidimos profundizar en las intimidades de nuestra hija. Le pedimos que queríamos conocer a su muchacho que... la venía a ver todas las noches. Camelia ascendió, dijo que sí."
"En una noche, luego de la cena... nuestra hija nos juntó afuera, cerca del granero. Ahí lo vimos, bajo la luz lunar, junto a una motocicleta negra. Era... bastante siniestro, no sé explicarlo, un individuo de aspecto... fuera de otro mundo pero vestido como un chico formal; camisa, pantalón ajustado de jean y botas negras. Y... en mi mente pasó ¡¿Un vampiro?! Jejej... eso es imposible."
"Le reclamamos a Camelia, osea yo, que ése joven era bastante grande para ella. Mi esposa Esmeralda estuvo de acuerdo conmigo y le hizo entender en voz baja a Camelia que no quería que no se volviera a juntar con ése joven revoltoso, nunca jamás. Finalmente terminamos por saludarlo con normalidad, todo bien, e incluso le quisimos invitarlo a pasar a casa pero ese joven nos avisó que tenía prisa. Si bien lo recuerdo... creo que dijo que se llamaba Ash. ¡El nombre más extraño que yo hubiera oído! Supongo extrajo su nombre, eso debe ser."
"Pasaba las semanas, y nuestra hija seguía encaprichada con ése tipo saliendo a escondidas por las noches. Esmeralda no se daba cuenta pero... yo sí."
"Durante sus salidas con ése pibe, y yo como un pedazo de bobo dejando a mi propia y única hija que se marchará por la puerta trasera de la casa, comenzaron a pasar cosas extrañas, cosas que nos complicaron la crisis del ganado. Las gallinas las encontrábamos secas, sin ninguna gota de sangre, luego le siguió a una de las tres vacas, y después uno de los dos caballos, todos... ellos de las mismas condiciones horrorosas. Pues..., algo le drenaban la sangre a los animales; debía ser murciélagos gigantes, eso que hay en África. Pero me equivoqué, me equivoqué en pensarlo así. ¿Porqué? Sucedió en una noche que salí a tomar aire fresco fuera de la casa, esa noche mi hija Camelia cumpliría sus 17 años. Había oído quejarse algunos de los animales que habían estado descansando en el establo. Fui y entré con la linterna a revisar, quedo pasmado. Lo que vi fue a un hombre vestido de negro, inclinado a uno de mis conejos...; creí que lo estaba comiendo, pero no fue así, el individuo tenía clavando sus colmillos sobre mi conejo. Salí corriendo, sin quedarme esperar descubrí su rostro, fui en busca de mi escopeta y avisarle a Esmeralda que llamara al comisario. Cuándo regresé al establo vaciando balas por donde lo vi, ese sujeto había desaparecido frente... a mis ojos."