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La taberna se hundió en un enorme silencio cuando la silueta de la mujer apareció por la puerta. Todos quedaron sorprendidos, algo embobados y temerosos, al verla allí. Sus rizos blancos caían como cascada por su espalda, ayudando a que sus ojos ámbar resalten, sin contar el contraste de su piel pálida.
Avanzó con pasos lentos hacia la barra, haciendo que el único sonido en el lugar fueran sus pisadas en la madera. El ciervo sin vida tomó protagonismo cuando fue depositado sobre la barra, manchando con sangre lo que lo tocara.
-es ella?- le murmuró Jaskier al brujo, quien no podía creer lo que sus ojos veían. Era ella, aquella mujer con la que había compartido tantas noches y ninguna mañana. Aquella que siempre que podía escapaba y lo dejaba con el corazón en la mano. Aquella que aseguraba quererlo, más no demostraba nada.
-cierra la boca- respondió con los dientes apretados. Si, sentía calidez y cariño al verla, más un enorme rencor seguía instalado en su sistema, rencor que solo desaparecería obteniendo respuestas.
-Lilith, que bueno verte de nuevo!- exclamó el anciano detrás de la barra.
-pero claro que es bueno verme de nuevo, sin mi ayuda no podrías alimentar a tu familia, Arthur- algunas moscas comenzaron a depositarse sobre el ciervo muerto mientras la bruja abandonaba el lugar con una sonrisa egocéntrica. El anciano borró su sonrisa y observó como la bruja se iba, agradeciendo su ayuda con pequeños murmullos avergonzados.
La taberna volvió a cobrar vida y la música y el barullo no tardó en aparecer nuevamente. Más Geralt sabia que no podía dejarla ir, no nuevamente. El brujo se levantó de su asiento, dejando su cerveza a medio terminar y abandonando al bardo en medio de una de sus numerosas historias.
Geralt salió de la taberna apresurado, logrando que el sol chocara contra sus ojos y lo cegara por unos instantes. Sin embargo la vio, caminando con elegancia y seguridad hacia su caballo. Su corazón comenzó a bombear con fuerza, devolviendolo a unos años atrás, donde su historia juntos apenas comenzaba.
-Lilith?- la llamó inseguro, algo atípico en él. La mujer se congeló en su lugar, demostrando sorpresa en sus movimientos. Aquella voz...no podía ser cierto. Jamás creyó volver a oírlo, mucho menos después de que se corrió el rumor de que habia muerto. Sus dedos temblaron levemente mientras que tragaba saliva con dureza.
La de ojos ámbar giró en su eje con lentitud, con miedo a hacer algún movimiento brusco y que aquel hombre solo fuera producto de una ilusión que desaparecerá. Pero al encontrarlo allí, tal como lo recordaba, incluso mejor, no pudo hacer más que sonreír para sus adentros con alivio. Lo había extrañado y quizá su falta de demostración no dejaba ver eso, pero asi era.
-Geralt?- susurró -eres tú?...eres real?-
-que yo sepa si- Geralt mentiría si dijera que no le había afectado verla de nuevo, tan hermosa y deslumbrante como siempre. Y tampoco diría que se había llevado una sorpresa al ver la mirada aliviada en la chica. Sin embargo, mantuvo sus sentimientos a raya y demostró la frialdad que gobernaba en él.
-oh por Dios..-
-no finjas sorpresa, Lilith. Ambos sabemos que lo último que quieres es tenerme cerca- interrumpió él.
-qué? Pero qué dices, te he estado buscando por un largo tiempo hasta que me llegó la noticia de que habías muerto- se defendió la muchacha.
-oh de veras? Encerio la inteligente Lilith Lupré le hizo caso al primer rumor que escuchó por ahí?- preguntó burlón, con la seriedad marcada en cada parte de su rostro -no te creía tan ingenua-
-y no lo soy, querido Geralt, pero cuando se trata de ti cualquier cosa es creíble- respondió ella, haciendo que el brujo frunciera el ceño -diculpa por creer que el ser más temerario e impulsivo en toda la faz de la tierra había muerto en batalla-
-sabrias que no es así si jamás me hubieses abandonado- atacó nuevamente.
-jamás te abandoné, porque jamás formamos nada, Geralt!- exclamó ella, callando al brujo y logrando que éste la mirara dolido. Lilith no se arrepentía de sus palabras, ya que estas eran sinceras y eran defendidas por los pasados hechos.
Ella jamás va a olvidar como Geralt le decía en cada uno de sus encuentros que su vida solitaria era lo mejor que tenia. Lilith odiaba aquello, más lo entendía, puesto que conocía el pasado de Geralt y las secuelas que éste pudo haber dejado en él. Estaba en desacuerdo con el brujo, ya que ella siempre odió la soledad y deseaba un futuro con el hombre. Más sus deseos eran contradictorios y ella sabia que de esa manera no funcionaría.
-acaso para ti, todos nuestros momentos compartidos significaron nada?- preguntó él.
-claro que no! Es solo que nunca llegamos a algo más que compartir unas noches, o al menos nunca tuvimos tiempo de demostrar algo-
-porque tú te fuiste!- acusó a la peliblanco. Los ojos del brujo comenzaban a oscurecerse, demostrando toda la ira contenida.
-porque así tú lo querías!- gritó ella en respuesta -cada jodido día te la pasabas añorando tu soledad, dejándome de lado todo el tiempo, ¿como crees que me sentía?- él abrió la boca para hablar, más la chica no lo dejo responder -me sentía un estorbo, en cada momento, por lo que una noche decidí partir y dejarte atrás, ¡feliz con tu soledad!-
-no es cierto!- rugió él -jamas hubiese preferido la Soledad antes que a ti, jamás hubiese preferido cualquier cosa sobre ti, lo eras todo para mí y me abandonaste, joder!-
-pues nunca me demostraste nada, como se supone que iba a adivinar? Eres el ser más misterioso y complicado que se cruzó en mi camino!-
-no lo sé! Pero no me merecía tu indiferencia!-
-tal vez no, pero yo tampoco merecía tu ignorancia- la mujer tomó una fuerte respiración, algo más calmada que hace unos momentos.
Ambos se miraron por unos instantes, intentando transmitir todo lo que sentían a través de la mirada. No había duda que entre ellos aún existía algo, a pesar del tiempo y espacio aún se querían. Nadie ni nada podría cambiar aquello, después de todo, entre ellos se comprendían y apoyaban a su manera como uno de los últimos en su especie.
Geralt sentía como todo el rencor había desaparecido, dándole espacio al cariño que le tenia y al temor de perderla, no comprendía como había aguantado tanto tiempo alejado de ella.
-aún continuó amándote- murmuró, acercándose a pasos lentos hacia ella. Una vez a su lado, acarició su mejilla con suavidad y dulzura, algo poco común en uno de los cazadores más temidos de todo el reino.
-es bueno oír eso, porque no planeo irme otra vez-
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Hola bbys!
Les traigo estecorto os de Geraltacompañado de una encuesta en la que me gustaría que todas participaran. Se basa en elegir uno de estos personajes de Henry para el próximo os;
● Sherlock Holmes
● Napoleón Solo
● August Walker
Comenten en el personaje que prefieren y el personaje con más votos gana! No me dejen morir ignorada ;D
