O48 | FAMILY

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Henry Cavill
Pedido de helamac

Los gritos agudos en la lejanía lo obligaron a despertarse bruscamente

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Los gritos agudos en la lejanía lo obligaron a despertarse bruscamente. Se sentó en la cama con rapidez y refregó sus ojos, preso de la somnolencia al haber pasado apenas unos segundos desde su despertar. Estiró la mano a un lado, aún dentro de su ensoñación, y notó que se encontraba solo en la cama. Entonces, unos pasitos se oyeron en el pasillo antes de que dos cabecitas aparecieran por la puerta.

-¡papi!- su niña, Fleur, se lanzó a sus brazos, cayendo junto a su padre en el colchón. El pelinegro sonrió, aún con los ojos cerrados, al sentir un par de besos siendo depositados en sus mejillas -ugh, tu barba pica, papá!- se quejó la pequeña, antes de reír escandalosamente cuando los dedos de su progenitor iniciaron una serie de cosquillas a los lados de su barriga.

Fleur era una pequeña alegre y risueña, aunque bien sabia conseguir lo que quería cuando se lo proponía, los caprichos venían en el combo. Su cabello castaño lacio caía por sus hombros y sus mejillas estaban encendidas como dos faroles, al parecer había estado correteando por ahí.

-papá que bueno que despiertas, te necesitamos- dijo Max, tomando la mano de su padre y tirando de ella, obligándolo a levantarse.

Max, el segundo de los gemelos. Tenía una actitud madura y muchas veces sobreprotectora con su hermana y con su madre, aunque tampoco perdía la oportunidad de molestarlas un poco con travesuras típicas en un niño de su edad. Su cabello también era castaño y lacio, se mantenía corto y peinado hacia un costado y las gafas que cubrían sus ojos le daban un aspecto más intelectual.

Se dejó llevar de la mano por sus hijos, aún somnoliento y soltando un bostezo. Fue cuando acabó de bostezar que se encontró en la cocina, con una Pamela que lo miraba divertida.

-parece que a alguien lo arrastraron de la cama hasta aquí- murmuró ella, acercándose para besar la mejilla de su marido antes de pasarle una taza de café recién preparado.

-si, me pregunto qué será tan importante...-

-papá, te trajimos hasta aquí para que le expliques a mamá por qué debemos desayunar huevos revueltos en lugar de fruta- explicó el varoncito entre los mellizos, actuando como si se tratara de dos bandos opuestos entre ellos y Pamela, y Henry allí sería una especie de juez que dictaminaría la sentencia final.

-si papá, mamá quiere que comamos esas cosas Rojas en lugar de cosas ricas, ¡es muy injusto!- la niña se cruzó de brazos con un puchero y eso logró que Henry comenzara a sucumbir bajo sus caprichos, una vez más.

-Henry ya hablamos de esto, llegamos al acuerdo de que podrían comer pizza dos noches en la semana sólo si desayunan fruta cada día- y ahí iba el argumento de su madre, captando la mirada de los tres presentes.

Henry soltó un suspiro y miró a sus hijos, quienes lo observaban con aquellos hermosos y especiales ojos que lograrían cautivar a cualquiera.

-niños, tenemos un trato con su madre. Lo recuerdan?-

❝𝗢𝗡𝗘 𝗦𝗛𝗢𝗧𝗦❞  HENRY CAVILLDonde viven las historias. Descúbrelo ahora