Field Goal

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Atlas:

Asistir al funeral de Kennan me lleva a revivir la misma sensación que sentía cuando iba a algunos funerales de los chicos en mi vecindario o en toda la zona en general de Somerville.

Las personas morían entonces y las personas siguen muriendo igual, el barrio no a cambiado en absoluto.

 Y estoy seguro que hace algunos años aquí en Boston, la violencia y los atentados, el racismo. Aquí tampoco nada de eso ha disminuido ni un poco.

Solo se ha incrementado.

Permanezco al lado se Jamie durante la ceremonia y calmo su llanto cuando empieza a llorar.

Los chicos recién aparecen después de los últimos versos del padre que realiza la ceremonia e intuyo por sus ropas sucias, que acaban de soltarlos de la comisaria.

Pero al menos llegan a despedirse de Kennan y todos observamos como ese ataúd desciende, acompañado del sufrimiento y llanto de los presentes.

Jamie empieza a llorar y hasta los chicos tienen lágrimas en los ojos, me giro buscando a Darío, esta aquí, pero lo bastante lejos, cerca de los árboles del cementerio.

—Es tan injusto, Atlas. —Me dice mi novia, al borde de las lagrimas. —Es muy injusto..

(***)

Observo a Jamie hablar con los padres de Kennan, aún estamos en el cementerio, aunque solo unos allegados se encuentran aún presentes, como los amigos de Kennan, como alguno de los familiares y también nosotros.

La madre es la que más mal lo pasa y el padre es la fortaleza que ella tiene, noto su tristeza y su dolor en la cara, pero es claro que se mantiene fuerte por ella, como yo lo hago con Jamie.

Jamie quiere ayudar y no soy nadie para negárselo.

Me quito las manos del bolsillo y ubico los ojos en Darío, quien no se ha movido del mismo lugar, mientras sus compañeros hablan.

Los saludos y me acerco a el.

—Hey. —Mantiene los ojos en la tumba de su amigo.

No agrego nada, Darío se acerca a ella y yo sigo sus pasos, no hablo, no emito ni un solo ruido dejándole tiempo para que se despida.

—Esto no ha terminado. —Dice de pronto.

Me vuelvo hacia el.

—Lo que le hicieron a Kennan...

—Kennan tendrá justicia. —Le interrumpo, por primera vez quiero tener fe, sobre todo porque Jamie lo cree.

—Eso espero, Atlas.

Junto las cejas.

—Porque entonces si tomaremos justicias con las manos.

Se aparta y comienza a alejarse.

—¿Si hablamos de justicia también debo aplicarla contigo?

El se detiene. 

—¿Qué?. —Se vuelve en mi dirección.

Mis pasos siguen hasta detenerme en frente. Esta dolido y enojado, conozco el sentimiento, no sanara del todo, menos ahora, solo empeorara.

—Se lo que haces en las esquinas por las noches.