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Jamie:

—Jamie, lo siento, ya me voy.—Se disculpa conmigo nuestra bibliotecaria, se coloca la cartera al hombro y me mira preocupada.—¿Estas segura que quieres quedarte un rato más?

Asiento con la cabeza. —Si no empiezo a hacer los examines finales ahora, se me acumularan para la última semana.

Y ya he sabido lo que se siente eso, no necesito más desvelos.

—Y no te preocupes, yo cierro.

—De acuerdo y gracias. Nos vemos mañana.

Me despido de ella y me encamino hacia los estantes de madera llenos de libros, saco los que necesito y me siento sobre el suelo a empezar a revisar uno por uno, mientras apoyo en la espalda en el estante.

Abro mi bolsa y saco un cuaderno de apuntes, junto a móvil, enciendo la pantalla y busco el número de Atlas.

Llamo, pero me envía al buzón, así que cuelgo y le envió un mensaje.

"Preparando los exámenes finales. Estoy en la biblioteca"

Guardo el teléfono y abro el primer libro.






(***)






—Hey...

Levanto la mirada de los libros y sonrio, en dirección a Atlas. El camina hacia mí y se sienta a mi lado, sobre el suelo.

—¿Sigues aquí?

Le da una mirada a mis libros.

—Sí que estas ocupada.

Le muestro el cuaderno de apuntes, lleno de ejercicios.—Llegue a hacer 10, necesito otros 10 y cinco preguntas introductorias.

Y tal vez debí empezar por eso último, tampoco quiero darles un examen imposible de resolver en dos horas.

—Tan ocupada que no te diste cuenta que ya anocheció, loquita.

Giro la cabeza hacia las ventanas. Mierda.

—¿Qué hora es...?

—Tarde, ya todos se fueron.

—¿Soy la única en la biblioteca?.—Me da pavor quedarme completamente sola, esperaba que me acompañaran uno o dos estudiantes y luego cerrar cuando ellos se fueran.

—Los únicos si.—Me corrige el.

Atlas se inclina hacia mí, quitándome el libro de las manos y dejándolo a un lado.

—¿Qué haces?.—Me rio.

Me derriba sobre el suelo y su boca se dirige a mi cuello.

—Atlas... aquí...

—He cerrado por dentro.—Me asegura y mis ojos se abren.—Nadie va a molestarnos.

Lo único que me tranquiliza en este instante es que en la escuela y sobre todo el director no utilicen sus gastos para comprar cámaras de videos en todos los salones y habitaciones, habitaciones como estas.

Field GoalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora